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"Te apoyo": hasta un afiliado de Vox defiende a la profesora 'castradora' de Fuerteventura
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Juan Soto Ivars

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"Te apoyo": hasta un afiliado de Vox defiende a la profesora 'castradora' de Fuerteventura

Quienes la conocen la describen como una mujer inquieta y una profesora que obliga a pensar a sus alumnos; pero ahora está viviendo un infierno

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La profesora Aurelia Vera no puede contestar a mis preguntas. Su caso está ya en manos de sus abogados y estos le han recomendado que no hable con la prensa en este momento. La mujer se ha visto envuelta en una polémica demoníaca cuando, días antes de su toma de posesión en el ayuntamiento de Puerto del Rosario con el PSOE, se han filtrado a través de Vox y panfletos como OkDiario grabaciones de sus clases en las que, supuestamente, anima a castrar a todos los hombres del planeta para alcanzar el matriarcado mundial.

Quienes la conocen la describen como una mujer inquieta y una profesora que obliga a pensar a sus alumnos. Quería confirmar que no se trata de una pirada que realmente propone la castración de los hombres para arrebatarles el poder mundial antes de escribir esto, y a sus conocidos, ante esta idea, directamente les entra la risa. La cosa llega al extremo de que hasta un afiliado a Vox, Álvaro Hormiga, la defiende públicamente. Hormiga fue compañero de clase de Vera y publicaba en su Facebook el siguiente mensaje:

“Tú de izquierdas y yo de derechas, pero te conozco, y sé que eres una gran persona. (…) No creo que quisieras decir eso que dijiste, y no creo que ni siquiera lo pensaras, fue tu forma de transmitir una idea, una posible propuesta en un debate de clase, alguna palabra por encima de la otra, una frase mal conjugada, o un tema divertido para todos los alumnos e interesante, demasiado interesante solo para el que lo grabó. (…) Yo soy afiliado de Vox, pero primero soy persona, y te doy todo mi apoyo y mi cariño”.

Vox, partido cuya penetración en Fuerteventura es muy reciente, ha denunciado a Vera aportando como prueba unas grabaciones realizadas hace tres meses, según la afectada, justo antes de la toma de posesión. La jugada recuerda demasiado a la que sufrió Guillermo Zapata en los días previos a la formación del gobierno de Manuela Carmena en Madrid. Para Nuria González, una de las periodistas más influyentes de Fuerteventura, está claro que este linchamiento recuerda al del concejal purgado de Ahora Madrid.

Quince años de docencia

La periodista explica que Vera lleva quince años en la docencia y “nunca ha tenido una denuncia de este tipo por parte de los padres, y menos de los alumnos”. Su implicación con el movimiento feminista viene de largo y “jamás había pasado algo así”. González ha sido la última periodista en entrevistarla: debajo del vídeo de su entrevista en Facebook puede verse cómo algunos de sus alumnos responden a los comentarios de los lectores más agresivos defendiendo a su profesora. Pero la cosa no acaba ahí.

“Se ha manipulado todo”, opina Eloy Vera, coordinador de ciclos literarios con el Cabildo de Fuerteventura y, pese a la concordancia del apellido, ajeno a la familia de la afectada. Dice que “ella intenta generar debate en clase y despertar la conciencia crítica de los alumnos” y, respecto a sus credenciales como profesora, informa de que “se la ha invitado desde el Cabildo para que implique a los estudiantes a los encuentros culturales que organizamos y es una de las que más ha apoyado siempre estas iniciativas como docente”.

Se ha manipulado todo, ella intenta generar debate en clase y despertar la conciencia crítica de los alumnos

“Lo que me preocupa”, reflexiona, “es qué hacen esos niños grabando las clases y qué hacen esos padres filtrando las grabaciones para destruirla: qué está pasando aquí para que se someta a una clase a este control y a este uso político”. Esta cuestión es, sin duda, la madre del cordero. Escribía el martes Sergio del Molino que “tan preocupados estamos por que Alexa nos escuche para vendernos cremas cosméticas cuando nos quejamos de las arrugas que perdemos de vista que el demonio siempre tiene forma humana”.

Y así es. El linchamiento contra Aurelia Vera recuerda a episodios vividos durante el terror estalinista en la Unión Soviética, en los que los niños denunciaban a los adultos y servían de oídos para la policía del pensamiento. Que haya sido un partido anticomunista el que ha montado este escándalo es una paradoja deliciosa, y una constatación de que los métodos antidemocráticos no son patrimonio de un extremo del espectro ideológico.

Abogada del diablo

Cualquier profesor sabe que en los debates escolares, particularmente con adolescentes, el docente puede hacer de abogado del diablo para agitar la capacidad crítica de sus alumnos. Estén las opiniones filtradas más o menos en concordancia con la ideología de la profesora, daría exactamente igual: un profesor podría fingirse nazi para animar a sus alumnos a desmontar sus argumentos. Lo que nos lleva a una nueva paradoja:

Si los profesores empiezan a tener miedo de que sus alumnos les graben y descontextualicen, la víctima va a ser toda la educación

Los mismos que, con mucha razón, critican perversiones educativas políticamente correctas como los “espacios seguros”, donde a los estudiantes se les aísla de opiniones que puedan herir sus sensibilidades inmaduras, ponen ahora el grito en el cielo ante una clase en la que se manifiestan opiniones, reales o paródicas, de una postura ideológica que no les es afín. Sospecho que Vera y yo no estaríamos de acuerdo en muchos aspectos sobre el feminismo, pero yo diría lo mismo si a un profesor de Ciudadanos le filtrase Podemos un audio donde instiga a sus alumnos a debatir sobre la inmigración adoptando una pose de apariencia xenófoba. Sin saber qué dice este profesor en otras clases, ni cuál es el contexto del debate, no soy nadie para cuestionar su profesionalidad.

De hecho, esta polémica sienta un precedente que puede provocar un daño todavía mayor: si los profesores empiezan a tener miedo de que sus alumnos graben y descontextualicen sus palabras, la víctima de este linchamiento no va a ser Aurelia Vera, sino toda la educación.

La profesora Aurelia Vera no puede contestar a mis preguntas. Su caso está ya en manos de sus abogados y estos le han recomendado que no hable con la prensa en este momento. La mujer se ha visto envuelta en una polémica demoníaca cuando, días antes de su toma de posesión en el ayuntamiento de Puerto del Rosario con el PSOE, se han filtrado a través de Vox y panfletos como OkDiario grabaciones de sus clases en las que, supuestamente, anima a castrar a todos los hombres del planeta para alcanzar el matriarcado mundial.

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