La mejor Liga del mundo

Cada día que pasa, cada partido que se juega, cada gol que se consigue, cada récord que cae, hace que me reafirme más en mi convicción de que la liga española es la mejor del mundo. Vaya por delante que no hablo de la organización porque, entonces, bajamos varios puestos en el ranking. Hay que ser muy zote para tener el mejor producto y no saber explotarlo. Me refiero a la calidad de la competición. 

Para empezar en esta Liga tenemos al mejor futbolista del planeta. A Messi le siguen otras estrellas como Cristiano Ronaldo, Iniesta, Falcao, Casillas o Xavi. Un escalón más abajo están jugadores de categoría internacional caso de Xabi Alonso, Valdés, Busquets, Ozil, Sergio Ramos, Piqué, Villa, Benzema. Todos ellos y alguno más que seguro pueden entrar en la lista ven como los Isco, Iago Aspas, Thiago o Beñat llaman a la puerta con fuerza. Son muchos nombres en tan solo seis líneas. 

Es verdad, la mayoría pertenecen al Barcelona o al Real Madrid. Son los equipos destinados a acaparar los títulos pero eso no resta emoción en el día a día. Es inevitable que la liga sea cosa de dos pero en cada jornada es habitual ver sufrir a algunos de los grandes para conseguir la victoria. Al Real Madrid ya le han arañado puntos, y a lo mejor la Liga, equipos como el Getafe o el Betis. Los mismos verdiblancos hicieron sudar sangre al equipo de Tito Vilanova a pesar de ceder la primera media hora de partido. Por no hablar del espectáculo que no en pocas ocasiones ofrecen otros equipos con objetivos menores. El partido entre Valencia y Atlético de Madrid ha sido de lo mejorcito que se ha visto esta temporada. 

Ver jugar al Málaga, al Betis, al Valladolid, al Levante, al Celta o al Rayo da gusto. Disfrutemos de todos ellos. Superemos el galimatías de horarios. Olvidemos que el final de la historia ya está escrito. Gocemos con el día a día que nos ofrecen estos equipos y estos formidables futbolistas. Hagámoslo ahora porque puede que en breve nos estemos tirando de los pelos. Puede que veamos con pena como los mejores jugadores han emigrado a otros países donde hay más dinero y menos chorizos. Sentiremos la misma envidia que ahora tienen ingleses, alemanes, franceses o italianos cuando se enteran del estratosférico récord de Messi. Cuando ven los cinco goles de Falcao. O cuando alucinan con la magistral falta de Özil. Y todo en un mismo fin de semana.