El ventilador, en marcha: Isco, fuera del Madrid (y que parezca cosa de Zidane)

Como escribió el exdirector de 'El Mundo', David Jiménez, "los poderosos saben que eliminar a un periodista incómodo puede salir por el precio de una llamada de teléfono y el teléfono seguirá sonando mientras el oficio se defienda de los ataques contra su libertad con la misma hipocresía". Pues bien, algunos de esos poderosos no tienen suficiente con vetar o pedir la cabeza de esos periodistas incómodos, sino que también les gusta utilizar a otros que les son afines —por no llamarles serviles— para manipular la información a su antojo, según les convenga en cada momento, lo cual suele acabar en una obsesión por controlarlo todo.

Lo cuenta el ilustre Luis Miguel González en su libro 'Las entrañas del Real Madrid', el cual difícilmente encontrarán en las librerías pues fue misteriosamente retirado de circulación por la editorial. "A los pocos días de que el señor Pérez presentara oficialmente a Manuel Pellegrini como nuevo entrenador del Real Madrid, sin haber comenzado aún a trabajar con el equipo, me encontraba yo en el largo pasillo de la gerencia del club y vi venir a Pellegrini acompañado de uno de sus ayudantes (...) El presidente llamó al nuevo entrenador y le dijo: 'Me he enterado que esta noche asistirá a un programa deportivo de la 'Cadena SER'. ¡Pero usted qué se ha creído! ¿Es que aún no se ha dado cuenta de que está en el Real Madrid? En este club, mientras yo lo presida, tiene que informar a Manuel Redondo sobre los medios de comunicación que le requieran para hacerle una entrevista. ¡Que sea la última vez que acude a un programa deportivo sin saberlo nosotros! Ahora me pensaré si nos conviene o nos interesa que vaya usted esta noche a la 'SER', porque es muy probable que no le autoricemos a esa emisora de radio, ¿me ha entendido bien?".

Opinión

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"Me hubiera encantado irme campeón, pero no tenía ningún interés en continuar de la forma en la que estábamos trabajando", confesaría años después el entrenador chileno, una víctima más de esa dictadura que se vive en el Real Madrid y que solo los títulos y la cuenta de resultados tapan. Su caso no es precisamente la excepción que confirma la regla, sino más bien la regla de la que hay alguna excepción, como la dimisión de José Antonio Camacho tras apenas cinco meses en el banquillo e, incluso, la de Jorge Valdano de su cargo de director general por incompatibilidad con Mourinho. Sinceramente, y salvo que la situación del equipo cambie radicalmente, lo cual pasa a corto plazo por eliminar al Paris Saint-Germain en la Champions, no descartaría que otro que pudiera marcharse fuera Zinedine Zidane.

De momento, el presidente del Real Madrid ya ha puesto en marcha el famoso ventilador, de ahí las informaciones que apuntan a que el técnico francés quiere vender a Isco en verano, aunque sabido es que en el Bernabéu no se decide nada sin el consentimiento del presidente. La razón es que, siempre supuestamente, el malagueño ha decepcionado a su entrenador. Pero, ¿no será precisamente al revés, que el entrenador ha decepcionado a su futbolista? Sabido es que las suplencias no sientan bien a ningún jugador, de ahí que sea fácil de suponer que el '22' del Real Madrid no estará nada contento con su situación. Sin embargo, su enfado es entendible pues las buenas palabras de Zidane hacia él luego no se las demuestra con hechos.

Es cierto que detrás de la salida de James Rodríguez, cedido al Bayern de Múnich, estuvo la mano de Zizou, quien, puestos a elegir, prefirió quedarse con Isco. Esto es algo que Florentino Pérez no olvida, ya que él no quería que el colombiano se fuera y tuvo que tragar para complacer a su exitoso entrenador. De ahí la inevitable pregunta de si no estará precisamente el presidente detrás de esta información para 'vengarse' de su técnico y, de paso, allanar el camino hacia un posible traspaso o trueque, pues la hipotética venta de Isco ya se relaciona con la llegada de Hazard.

Lopetegui y el Mundial de Rusia

De momento, y en vista de que Zidane no termina de considerarle titular, sobre todo a raíz de volver a tener a su disposición a la famosa 'BBC' que forman Benzema, Bale y Cristiano, precisamente los intocables del presidente, Isco no tiene ninguna intención en plantearse su futuro fuera del Real Madrid y a día de hoy está únicamente centrado en acabar lo mejor posible la temporada y llegar en las mejores condiciones al Mundial de Rusia. El malagueño sabe que Julen Lopetegui le considera indiscutible en el centro del campo de la Selección junto a Busquets, Iniesta y Silva, y por delante de Koke, Thiago o Saúl.

Volviendo al Real Madrid, no es casualidad que su presidente haya empezado a rajar por las esquinas de algunos de sus jugadores —entre ellos, por supuesto, el señalado Isco, pero también otros como Marco Asensio— y a poner en duda la labor del entrenador que le ha ganado ocho títulos en un tiempo récord. Esta suele ser la mecha para que algunos de sus medios más afines —por no llamarles serviles— empiecen a airear que el segundo no quiere al primero, hasta el punto de asegurar que ha pedido su salida. ¿Cómo va a pedir Zidane la salida de Isco si él es el primero que puede salir a final de temporada, si no antes? Puestos a completar la pantomima, no faltan clubes como el Manchester United supuestamente interesados en el malagueño. Sí, lo ha pedido Mourinho, un amante del virtuosismo... Pues eso, manipulación pura y dura al servicio del poder, al que la mejor forma de hacerle frente es... no cogiéndole el teléfono.