Iñaki, discutir (y escupir) con tu pareja en una calle de Bilbao no es intimidad

"Sí, soy negro, pero también vasco porque he nacido aquí". Así se reivindica Iñaki Williams en el documental 'Six Dreams', de Amazon. Sabido es aquello de que los de Bilbao nacen donde quieren, aunque el caso del delantero del Athletic no es un chiste, sino real. Iñaki Williams Arthuer nació el 15 de junio de 1994 en la capital vizcaína y lo cierto es que tiene mucho mérito llegar donde ha llegado. "Para mí es un orgullo que toda la gente de raza negra y africana se sienta orgullosa de mí", asegura. Sus padres, Félix y María, son de Liberia y tuvieron que exiliarse a Ghana a causa de la guerra. De hecho, se conocieron en un campo de refugiados de Acra, para más tarde emigrar juntos a Europa y recalar en el vizcaíno municipio de Barakaldo.

"Quiero quitar eso de la cabeza que dice la gente de que 'un negro no puede jugar en el Athletic' o 'ese negro no es vasco", comenta en el citado documental el internacional sub 21 español y uno de los meritorios a los que llamó Julen Lopetegui para la absoluta antes del reciente Mundial de Rusia. "A día de hoy sigue pasando. Escuchas o lees comentarios sobre cómo puede jugar un negro en el Athletic. No, no, soy negro, pero también soy vasco, he nacido aquí. Me siento vasco", sentencia Williams, a quien el club bilbaíno fichó cuando tenía 14 años del Club Natación Pamplona, ciudad a la que sus padres tuvieron que marcharse a trabajar.

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EC

En contra de lo que algunos piensan, el primer futbolista negro que ha vestido la camiseta del primer equipo del Athletic no es Williams, sino Jonás Ramalho, nacido en Barakaldo en 1993, de padre angoleño y madre vizcaína, que lo hizo en 2011. Sin embargo, mientras el defensa pasó fugazmente por San Mamés, el delantero se ha convertido en una de las estrellas del equipo que ahora dirige Eduardo Berizzo, así como uno de los que más cobran tras renovar su contrato el pasado mes de enero hasta 2025, con una cláusula de 80 millones que irá subiendo progresivamente hasta los 108. De ahí también que a sus 24 años tenga una mayor responsabilidad, deba cuidar lo que hace tanto dentro como fuera del terreno de juego y comportarse como el personaje público que es.

Pues bien, el delantero del Athletic denunció el pasado viernes un intento de extorsión por parte de desconocidos para intentar evitar la difusión de un vídeo que circula por las redes sociales desde la tarde noche del día anterior en el que Iñaki y su pareja, una joven bilbaína estudiante de Enfermería, mantienen una acalorada discusión nada menos que en el recinto festivo donde se celebran las fiestas de Bilbao. Berizzo había dado el miércoles fiesta a su plantilla y el futbolista tenía permiso para salir, aunque lógicamente no para montar semejante escándalo y menos aún siendo un personaje público como es.

Salvando las distancias, en las formas, pero sobre todo en los tiempos, el caso de Williams me recuerda al del malogrado delantero inglés que tuvo la Real Sociedad a principios de los noventa. Dalian Atkinson, apodado 'Txipiron', protagonizó un pequeño altercado en la noche donostiarra con su deportivo rojo... y se dio a la fuga. Si entonces llegan a existir las redes sociales, lo normal es que las imágenes no solo hubieran sido captadas, sino también que hubiesen circulado por Twitter a tanta o más velocidad con la que Atkinson intentó evitar que le reconocieran, algo que en su caso, como el de Williams en Bilbao, era imposible.

Según 'El Correo', "las imágenes fueron ofrecidas ya el miércoles a este periódico, que rechazó su difusión". Sin embargo, como quiera que las redes sociales son incontrolables, el vídeo no tardó en correr como la pólvora sin necesidad de que ningún medio le diera cobertura e Iñaki Williams se vio obligado a colgar un comunicado en el que él y su pareja se disculpaban y mostraban su pesar. Eso sí, más que por lo sucedido, por que hubiera trascendido. "Ante las imágenes difundidas sobre una discusión en nuestra vida privada, queremos pedir disculpas por el mal ejemplo dado en ellas". En el vídeo, que finaliza con la intervención de Yeray Álvarez, otro jugador del Athletic, que aparta de la escena a Iñaki, se observa la bronca en la que ambos gritan, la chica le insulta y le empuja y Williams le lanza un escupitajo.

En el mismo comunicado, el futbolista, que pide "respeto a nuestra intimidad", dice haber puesto en manos de sus abogados el intento de chantaje del que afirma haber sido víctima para no sacar a la luz pública "las imágenes que alguien grabó y difundió en contra de nuestra voluntad". Hombre, se entiende que fue en contra de su voluntad, aunque lo que está por ver es si existen esos "intentos de extorsión recibidos para que no se distribuyeran las imágenes", pues no solo hay un vídeo, sino al menos dos. En el segundo se puede ver cómo la chica insulta a Williams llamándole "hijo de puta" e Iñaki responde vehemente repitiendo una y otra vez "tú la has cagado".

El polémico video de Williams viene precedido por otro de su compañero Aritz Aduriz, también grabado durante la noche de las fiestas de Bilbao. El veterano delantero de 37 años comenzó la temporada como titular en la victoria contra el Leganés (2-1), pero tuvo que retirarse lesionado en la segunda parte. Según el parte médico, sufre una lesión de grado I-II en el bíceps femoral derecho, lo que seguramente hará que se pierda los dos siguientes partidos. El problema surgió con otro vídeo colgado en las redes sociales en el que se ve a Aduriz celebrar por todo lo alto la Aste Nagusia bilbaína, cantando, bailando y saltando rodeado de gente, lo cual también provocó un incendio en las redes sociales, aunque en este caso con opiniones dispares, pues mientras unos criticaron su "falta de profesionalidad", a otros les parece bien que Aduriz se permitiera "esta licencia y muchas más por todo lo que ha dado al club".

El alcalde habla, pero Urrutia no

Pocas aficiones como las del Athletic son tan incondicionales con sus futbolistas, al menos mientras estos visten sus colores. Sin embargo, todo tiene un límite y es normal que tanto en la mayor parte de la masa social rojiblanca como en la junta directiva que preside Josu Urrutia no hayan gustado nada estas polémicas, pues dañan la imagen de un club cuya 'singular' filosofía se mantiene cogida con pinzas y dejan al descubierto una de las grandes paradojas del fútbol profesional: cobrar y ser tratados como estrellas, pero al mismo tiempo pretender vivir en el anonimato cuando les convenga.

El alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, considera a los jugadores del Athletic "importantes referentes de la juventud", de ahí que les pida que sean "muy cuidadosos con su vida en la calle y con los valores que, de alguna manera, generan". Basurto, que asegura que las imágenes de Williams "son lamentables sin ningún tipo de duda", añade que "no se puede generalizar cuando hablamos de un colectivo". Más tibios han sido los compañeros de Iñaki. "No es fácil lo que le ha tocado pasar estos días. Estamos todos para arroparle. Hay que pasarlo y ya está. No fue bonito, pero son cosas de pareja", señaló Óscar de Marcos en Lezama. Urrutia, como suele ser habitual en él, no se ha pronunciado al respecto, aunque sí parece que tuvo unas palabras en el vestuario. "Si tuvo que hablar con alguien, lo haría en privado", comentó al respecto De Marcos.

Quien sí habló públicamente del asunto fue Berizzo, que dejó claro que no habrá sanción para el jugador. "Yo como entrenador no opino de la vida privada de los futbolistas, pero cuando uno pertenece a una institución, en este caso el Athletic, debe ser cuidadoso en su comportamiento público porque la imagen que trasciende y que se ve afectada es la del club". El técnico argentino explicó que "hemos abordado en la intimidad la cuestión, tanto a nivel club como a nivel equipo, y así se quedará".

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Como dijo Marcelo Bielsa a sus jugadores, precisamente a los del Athletic cuando entrenaba al equipo bilbaíno: "Tengan conciencia de que son muy jóvenes, son millonarios prematuros, no tienen problemas, no les importa mayormente lo que va a pasar, porque todo el mundo tiente resuelto lo que va a pasar. Se permiten reírse...". Y así es. Por supuesto no todos, pero sí algunos futbolistas se creen por encima del bien y del mal y suelen confundir las cosas. Por ejemplo, Iñaki Williams cuando pide respeto a su intimidad. ¿Desde cuándo es intimidad discutir y escupir a tu pareja en plena calle? ¿Cómo puede pedir respeto alguien que no lo tiene con su pareja, con el club al que representa ni en definitiva con él mismo? El delantero regresa esta noche a San Mamés para el partido de Liga contra el Huesca y veremos si la grada hace como que no ha pasado nada. Aunque pasar, ha pasado, y algo mucho más grave de lo que parece, por más que se trate de un futbolista.