Las mentiras que siguen dividiendo el fútbol español en futbolistas y 'futbolistos'

Por si no se habían percatado, durante la pandemia el lenguaje inclusivo ha dejado de utilizarse y, a pesar de ser noticia todos los días, no se escucha hablar de "muertos y muertas" o de "contagiados y contagiadas". En el caso del fútbol este problema no existe, pues futbolista vale lo mismo para hombres y mujeres. Claro que la auténtica inclusión no es una cuestión de palabras o palabros, sino de hechos y derechos que en el fútbol femenino español siguen brillando por su ausencia. De ahí que podamos hablar de futbolistas y 'futbolistos', ya sean estos dirigentes de la Federación Española de Fútbol (RFEF), donde Rubiales brilla con luz propia, de los clubes o del sindicato mayoritario que preside el 'masterizado' Aganzo.

El mejor ejemplo es lo que sigue sucediendo con la polémica lista de compensación, lo más parecido al famoso derecho de retención que antiguamente había en el fútbol masculino, incluida en el I Convenio Colectivo del Fútbol Femenino. Suele ocurrir con los asuntos difíciles de explicar y, por tanto, de entender. Salvo que se esté puesto en la materia, es fácil cometer algunas inexactitudes, aunque otra cosa bien distinta es que todo lo contado sea un cúmulo de mentiras que no solo crea confusión, sino indefensión.

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Así, el pasado 14 de diciembre de 2020, un diario deportivo publicó una 'información' que llevaba por título 'AFE logra un acuerdo para evitar cláusulas abusivas en las listas de compensación'. Ya en el cuerpo de esta 'noticia' que en realidad era un copia y pega de un comunicado de la mencionada Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), se aseguraba que "las listas de compensación del fútbol femenino vienen suponiendo un punto de desencuentro entre la patronal (Asociación de Clubes de Fútbol Femenino) y los sindicatos (AFE)". Sí, se hablaba de sindicatos en plural, pues en la mesa negociadora también están Futbolistas ON y UGT, pero solo se citaba a uno y precisamente al que no se opuso a la lista de compensación.

Esta fue la primera gran mentira, pero hubo más. El mismo medio 'informó' que "la Audiencia Nacional falló a favor de los clubes, estableciendo que era perfectamente legal que tuvieran que pagarse derechos de formación por las jugadoras menores de 23 años, tal y como establece el artículo 20 de su convenio". Sin embargo, esto no es solo incorrecto, pues la Audiencia Nacional sí declaró parcialmente nula la lista de compensación, de manera que no afectaba a los clubes no firmantes de un Convenio que aún no estaba en el BOE y tampoco a las futbolistas que no estuvieran afiliadas a los sindicatos firmantes, sino que resulta que el sindicato AFE no fue el denunciante sino el denunciado junto a la mencionada ACFF por Futbolistas ON.

AFE, de la mano de la patronal

"Las cifras exigidas, de hasta 500.000 euros, resultaban desorbitadas para los sueldos medios de las futbolistas e incluso la capacidad financiera de la gran mayoría de los clubes", se comentaba a renglón, más que seguido, torcido, pues fue precisamente AFE la que defendió su legalidad para ir de la mano de la ACFF, de la que, por cierto, en los últimos días se han salido Espanyol y Sevilla FC, como antes hicieron el Atlético de Madrid, el Madrid CF y el Deportivo, para unirse así a Real Madrid, Athletic de Bilbao y FC Barcelona, los tres clubes más afines a la federación de Rubiales.

Y llegamos a la cuarta mentira cargada de una dosis extra de propaganda: "En una comisión paritaria celebrada entre ACFF y AFE, solicitada por este sindicato, se ha llegado a un acuerdo tras muchos meses de trabajo en el que dejan esta cifra en un tope máximo que rondará los 100.000 euros". Por partes. Una, esta reunión de la comisión paritaria la solicitó, y por dos veces, Futbolistas ON. Y, dos, ACFF y AFE, valga la 'redundancia', llegaron con un acuerdo cerrado de antemano, tal y como demuestra el hecho de que les bastara un receso de diez minutos para anunciarlo.

La quinta mentira es un párrafo de lo más habitual en estos tiempos de mucha propaganda y poco periodismo: "Finaliza de esta manera un conflicto de listas de compensación que estaba bloqueado entre la AFE y la ACFF, quienes han conseguido, tras muchos meses de trabajo del sindicato, llegar a un acuerdo lejos de los juzgados para que, una vez reconocida la legalidad del pago de los derechos de formación por jugadoras sub 23, estos sean sensatos y ajustados a la realidad del fútbol femenino".

La nueva lista de compensación

Pues bien, este 1 de marzo de 2021 termina el plazo para presentar una nueva lista de compensación en la que, como podremos comprobar una vez que se traslade a la comisión paritaria, no solo no se habrá solucionado nada, sino que los clubes, a buen seguro que con el consentimiento de una AFE que desde el primer momento no quiso saber nada del asunto y habló de negociaciones individuales en lugar de colectivas, volverán a poner cantidades abusivas, incluso los 500.000 euros de la temporada pasada a varias futbolistas. A partir de ahí, que las menores de 23 años se preparen para lo peor.

Ya lo dijo Damaris Egurrola cuando le preguntaron si estaba contenta "ahora que AFE y la ACFF van a cambiar el tema de la lista de compensación". "Todo es mentira", respondió la ex jugadora del Athletic de Bilbao que se negó a renovar su contrato y, en vista de que su club pedía por ella 250.000 euros, se marchó al Everton y hace un mes fue fichada por el mejor club de Europa, el Olympique de Lyon. Damaris estuvo presente en la Audiencia Nacional defendiendo los derechos de las futbolistas, aunque, como ella misma dijo, "hemos sido muy pocas y a menudo nos ha faltado una protección más clara de las veteranas".

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En un país en el que el Ministerio de Igualdad, creado en 2008 por Zapatero y presidido actualmente por Irene Montero, tiene un presupuesto de nada menos 451,42 millones de euros, las futbolistas son el mejor ejemplo de que, más que tener a alguien que presuntamente les defienda, de boquilla y a sueldo, necesitan librarse de quienes, ya sean hombres o mujeres, que abogadas en AFE haberlas haylas, permanentemente las utilizan y mienten. Para hacerlo les bastaría con levantar la voz, denunciar lo que les hacen, aunque para ello antes deberán quitarse la venda de los ojos y ver la diferencia que hay entre futbolistas y 'futbolistos'...