A vueltas con Aitor González: cómo afrontar con éxito el final de una carrera deportiva

Facilitar la transición de un deportista profesional al mundo de la empresa ocupa el quehacer diario de Luis Pasamontes (Pasa, en el mundo ciclista) en la actualidad. Convertirse en 'coach' y un mentor de éxito para que otros deportistas afronten esa etapa delicada de sus vidas es el enfoque que Luis le ha dado a su actividad profesional a través de su empresa, Challenge 3'59.

TE PUEDE INTERESAR

Dopaje, delincuencia y malas compañías: así fue la caída de Aitor González

Gonzalo Cabeza

Pasamontes es un exciclista profesional que disputó las tres grandes vueltas (Giro, Tour y Vuelta) en varias ocasiones. Desempeñó su trayectoria deportiva desplegando su esfuerzo físico y su oficio ayudando a los líderes (¡y qué líderes!) de equipos punteros como Unibet y Movistar. Fue un gregario sobresaliente encargado de tirar abajo escapadas incómodas para los intereses de su equipo, durante kilómetros y kilómetros poniendo al pelotón en fila india (como en la París-Niza, donde se relevaba con Imanol Erviti trabajando para Alejandro Valverde); responsable de proteger a su líder y llevarlo a rueda cuando se quedaba cortado en Jaizkibel (en la Clásica de San Sebastian)situa; o metiéndose en fugas, como la impresionante escapada en los Dolomitas en el Giro en la que coronó primero el Passo Giau en la épica etapa que ganó Mikel Nieve. Luis fue siempre el paradigma del trabajo oscuro e invisible a los ojos del profano, pero necesario para los triunfos deportivos que han de recoger otros.

Probablemente, su estajanovismo y su capacidad de sacrificio los aprendió de su madre en Cangas de Narcea. Una mujer humilde que sacrificó lo indecible para que él pudiera hacer realidad su sueño de ciclista profesional. Eso le ha dado una gran resiliencia, una inteligencia emocional superlativa y una humildad que son parte de su imagen de marca.

He entrenado muchas horas a su lado y hemos hablado de lo divino y lo humano: su inicio en el campo amateur, su ilusión de principiante al entrenar con la 'Grupeta de la Alegria' que comandaban Félix García Casas y Miguel Angel Martín Perdiguero (donde rodaban muchos puntos UCI juntos por el carril bici de Colmenar Viejo, Perdi dixit), sus expectativas como ciclista, las preparaciones del Tour o del Giro (que le dejaban con un aspecto casi cadavérico para llegar fino a las grandes citas), vislumbrar el fin de su carrera deportiva, aconsejarle que aceptara la oferta de Eusebio Unzúe de competir un año en Colombia en el Movistar Continental para tener una experiencia diferente… Muchos otros ciclistas buscan una salida más cómoda relacionada con dirigir equipos ciclistas profesionales, amateurs y juveniles, o montan un negocio relacionado con la bicicleta. Pero no. Él decidió que había que arriesgar.

Que Luis Pasamontes no elige los caminos fáciles ni los atajos me quedó claro cuando me comentó que pensaba cursar el Master en Gestión Deportiva del Real Madrid tras su retirada del campo profesional. Su discurso en el estadio Santiago Bernabéu en el acto de clausura del máster, ante varios cientos de personas y con la plana mayor de la directiva del Real Madrid, me convenció de que había tomado la decisión correcta. Ganas de aprender, desparpajo, capacidad para comunicar, visión de futuro y saber dónde quiere llegar, rodearse de gente que te aporta experiencia en el mundo del 'coaching' (Alvaro Merino), capacidad organizativa y motivación son algunas de las cualidades que le ayudan a desarrollar su proyecto empresarial.

Que tiene una labor difícil por delante es evidente: la mayoría de los deportistas profesionales de cierto éxito tiene tendencia a pensar que su profesión durará (casi) eternamente y que después su nombre le ayudará a encontrar una ocupación en el mundo laboral y de los negocios. Por tanto, la mayoría de sus potenciales clientes son reacios, cuando no abiertamente escépticos, a contratar servicios profesionales dedicados a orientarles qué perspectivas laborales se adecúan mejor a sus características, sus intereses, su capacitación o su situación económica. Sin embargo, Luis es tenaz y persuasivo como él solo, y seguro que tardará poco en consolidar su proyecto.

Adicionalmente al asesoramiento profesional, en Challenge 3'59 cuidan con especial detalle el aspecto psicológico de los deportistas que han de afrontar el delicado proceso de hacer la transición del mundo deportivo al laboral: muchas veces es complicado gestionar tu tiempo cuando no tienes que salir a entrenar 5 horas todas las mañanas, o cuando dejas de ser reconocido por la calle, cuando deja de sonar tu teléfono porque ya no interesas a los medios de comunicación, a las marcas, a los patrocinadores, cuando tienes que enfrentarte a inversiones fallidas porque no has podido asesorarte correctamente durante tu etapa de deportista.

Luis, que tiene una gran capacidad para desenvolverse en entornos de alta incertidumbre y de manejarse bien en situaciones con poca visibilidad de futuro, puede poner su conocimiento práctico y su experiencia al servicio de un amplio espectro de deportistas.

A decir verdad, me gustaría ver a Luis y a su equipo con su proyecto empresarial consolidado, porque eso significaría que muchos deportistas profesionales presos de la angustia, de la desorientación, del estrés de tener que lidiar con el final de sus trayectorias deportivas, habrán vadeado ese tramo de sus vidas en la mejor compañía posible y tendrán las mejores armas para enfrentarse a nuevos retos personales y profesionales.