Es noticia
Del Bosque no despeja la incógnita mientras sigue mareando con Diego Costa
  1. Deportes
  2. Es lo que hay
Antonio Sanz

Es lo que hay

Por

Del Bosque no despeja la incógnita mientras sigue mareando con Diego Costa

Tras los últimos partidos, Del Bosque no se ha decantado aún por Casillas o Valdés. Y mientras sigue el debate, se espera el gesto de Diego Costa

Foto: Iker Casillas y Víctor Valdés antes del encuentro ante Georgia (Efe).
Iker Casillas y Víctor Valdés antes del encuentro ante Georgia (Efe).

Resulta incómoda tomar la determinación que, calculada, va a suponer un antes y un después en el presente de la portería de España. Porque tampoco es sencillo acertar o encontrar el buen momento, si es que existe, con la brisa del Mundial en el horizonte. Para cualquier entrenador, en este caso el marrón ha caído sobre el más galardonado de nuestra historia, comprometerse de manera ciega con Víctor Valdés significa desterrar al poseedor del lugar, Iker Casillas, aquel que con autoridad y sin rivalidad ha monopolizado la ubicación durante la última década.

Se comprende lo duro que pudo resultar para Ladislao Kubala cuando en la primavera de 1976 situó bajo palos a Miguel Ángel, cortando la racha de 49 partidos disputados por José Ángel Iríbar. A Miguel Muñoz le tocó poner freno, también en un mes de mayo aunque de 1985, a Luis Arconada, tras 68 encuentros, para dar entrada a Andoni Zubizarreta, en lo que se estimó como un relevo generacional natural. Precisamente, su gran valedor en aquella etapa, Javier Clemente, recompuso la portería y se olvidó de ‘su’ portero tras el Mundial de Francia en 1998. Colocó a Cañizares, a quien Camacho daría continuidad hasta encontrarse con Casillas. Zubi dejaba el listón en 144 presencias. Por eso, la decisión de sentar a Iker se estima prematura para Del Bosque, algo que, sin embargo, sí ha hecho Ancelotti, aunque éste tras una decisión salomónica que lo transforma en titular en las competiciones de Copa (Champions y del Rey).

Del Bosque no se ha separado tampoco de la semblanza del Rey Salomón, aquel monarca del pueblo de Israel a quien la Biblia describió como ejemplo de rectitud, justicia y sabiduría. Así lo atestiguan las formaciones que ha presentado en los tres partidos oficiales del curso, además con asistencia de manera secuencial: en Helsinki, Iker; en Palma, Víctor; y en Albacete, nuevamente Casillas para cerrar la sucesión ordenada. Porque si la explicación que se ofreció es que frente a Bielorrusia jugó Valdés porque Iker había defendido sólo una vez la meta del Real Madrid, ante Georgia, cuatro días después, sí era titular con el mismo número de partidos celebrados y con la clasificación para Brasil aún sin rematar (restaba sumar un punto).

Y en este punto nos encontramos, con la incógnita por despejar en un puesto donde los ilustres siempre advierten que el portero debe sentirse convencido de que es el elegido para defender la portería. Otros, que también saben, opinan que este axioma sólo sirve para el club, nunca para la Selección. En cualquier caso, Del Bosque irá desterrando una decisión que atenaza. Mientras el cuerpo pide poner a Valdés, en el mejor momento de su carrera profesional, el técnico se resiste a navegar en la tempestad que supondrá la decisión de observar de manera continuada a Iker en el banquillo.

Precisamente, los dos porteros, también podemos incluir al tercero en discordia, Pepe Reina, afrontan un post Mundial de Brasil con cambios y novedades en sus trayectorias tras varios años anclados en el mismo espacio. Si Casillas, pese a farolear anunciando punto y final en un trimestre, aguarda ofertas, a Valdés le falta ese mismo tiempo para poder comprometerse formalmente con el nuevo club. A Reina le tocará retornar a Anfield, donde tampoco continuará tras aceptar por la espalda esta tan útil y como provechosa cesión al Nápoles.

Casillas mantiene relación contractual con el Real Madrid hasta junio de 2017, donde es el segundo jugador mejor pagado de la plantilla, información descubierta por su presidente -lo que significa que era el mejor pagado del club hasta hace unas semanas antes de la renovación de Cristiano Ronaldo-. La confirmación de Diego López como alternativa seria para el puesto lo ha situado en una complicada tesitura: conformarse con ser alternancia o salir a pelear fuera donde lo tenga más fácil que en el club de toda la vida. Con dificultad para salir en el mercado de invierno, no podría jugar la Liga de Campeones con otra entidad, una importante oferta internacional lo haría dudar…en verano.

Quizá la Premier sea un buen destino, pero en Inglaterra sólo Manchester City y Arsenal aparecen como realidades. Chelsea cuenta con Cech y Courtais y el Manchester United con De Gea, a quien, por cierto, persigue el Real Madrid. Beguiristain quiere reforzarse porque Hart no termina de convencer con plenitud. Pellegrini pretende lo viejo conocido -Willy Caballero-, pero Txiki cree que puede convencer a Iker o a Valdés, también candidato. Con quien fue su portero en el FC Barcelona parece que llega tarde. Con el del Real Madrid debe emplazarse a una negociación dónde únicamente la presión a la que someta Casillas a Florentino Pérez será clave para conseguir un precio de mercado poco elevado de salida. El jugador asume que nadie pagará fortuna por quien cumplirá 33 años en el próximo mayo.

Valdés apunta a Francia. Si se da por hecho que acabará en el glamouroso Mónaco, otras fuentes exponen que es el París Saint Germain el lugar de destino. Los dos escenarios son una elección afirmativa en lo económico y en lo deportivo, aunque más afianzada se convierte la apuesta parisina por la ventaja de estabilidad que tiene frente al club del Principado que aún mantiene el ejercicio de construir el bloque. Los dos pelearán por todos los títulos en el país galo y se afianzará su protagonismo en Europa. Reina, que debe volver en junio a Liverpool, tiene claro que su etapa en los ‘reds’ ha concluido. Por eso, Wenger volverá a ejercer el antiguo deseo de incorporarlo al Arsenal, si bien, el Barça sigue siendo lo que más seduce al gran portero madrileño.

Y si el ‘1’ está en el aire, que decir del ‘9’. Diego Costa nos sigue mareando y utilizando la elástica roja para forzar a Scolari a contar con sus servicios en el Mundial. Entre tanto, el poder federativo se reúne en Canarias para meditar y determinar el camino a seguir porque empieza a notar que no tienen tan controlado el caso. Si tras la comida en Las Rozas, la seguridad era plena y la decisión tomada, se contaría en noviembre con el rojiblanco, los últimos silencios y las ambigüedades relatadas por el hispano-brasileño descolocan a quien es su gran valedor en esta historia: Vicente del Bosque.

Aquellas palabras rotundas que atesoraban un matrimonio longevo se van difuminando, y más cuando se deslizan comentarios procedentes de la caseta de Simeone que hablan de que el verdadero deseo de Costa no ha variado y sigue siendo jugar con la ‘verde-amarela’. Por cierto, la bomba sería, porque podría ocurrir, que Diego actuase de rojo en noviembre y de amarillo después. Hasta dos semanas antes de la apertura del Mundial no tendremos convocatorias oficiales, que son las únicas que cuentan para la FIFA. Hasta esta fecha, legal y formalmente, todo es posible. A todo esto, seguimos esperando la declaración escrita del protagonista para cambiar de Confederación. Pero no aparece. Por eso, este vodevil está desnudando a más de uno…ya que sólo uno, Costa, sale ganando.

Resulta incómoda tomar la determinación que, calculada, va a suponer un antes y un después en el presente de la portería de España. Porque tampoco es sencillo acertar o encontrar el buen momento, si es que existe, con la brisa del Mundial en el horizonte. Para cualquier entrenador, en este caso el marrón ha caído sobre el más galardonado de nuestra historia, comprometerse de manera ciega con Víctor Valdés significa desterrar al poseedor del lugar, Iker Casillas, aquel que con autoridad y sin rivalidad ha monopolizado la ubicación durante la última década.

Iker Casillas Vicente del Bosque Diego Costa Pepe Reina
El redactor recomienda