De dinámicas y preguntas...

Un buen resultado atrae otro buen resultado, una derrota nunca sabrás con certeza cuando se cierra. Madrid y Atlético quieren dar continuidad a una dinámica corta y efectiva que tuvo la Champions en primer plano y tiene La Liga como estruendo final. Parte de la belleza del duelo va a estar en lo diferente del estilo, la mente y casi que también la ejecución.

Dirección

Del Atlético se anuncia casi todo, y no por previsible se hace más fácil. El Cholo se enfoca en lo que puede controlar, muy consciente de que hay otras muchas partes del juego que cambian con el soplido de una hoja. Es milimétrico, casi suizo, en el manejo de piezas y estrategias. Lidera juntando obligaciones pero, sobre todo, convenciendo desde la idea. Zidane se anuncia lo justo, sorprende desde la alineación y se las piensa, confiado, al once inicial. su piedra angular.

Simple y bello

En futbol, de lo simple, lo bello. Decía Johan Cruyff que jugar sencillo es lo más difícil. Y sí, el Madrid, para alcanzar la estética más práctica, tiene que acudir a los jugadores que formulan el futbol inteligente, preciso y seguro. La suma Modric/Kross en su mejor versión de ingeniería punta, eleva al Madrid a una categoría de control del juego digna de un equipo estimulado a dominar el partido. Ahora bien, no olviden juntarse cuando pierdan la pelota, vigilen los jugadores que salen fugaces a la contra y finalicen jugada todo lo que puedan, es la mejor forma de organizarse detrás de un ataque.

Recursos

El Atlético es otra casta, otro fútbol, pero, sobre todo, diferente carácter. Son unos tipos envueltos en una idea asumible, un convencimiento de hierro y la concentración más férrea del campeonato. El dilema del juego lo resuelven los jugadores, es muy simple. El Cholo elige, después los jugadores aportan su talento, fuerza y despliegue físico. Si el sector lo ocupa Correa es una cosa más ligera y hábil; si lo ocupa Koke, es más pensante y reposada. Eso, multiplicado por once... muchos recursos.

La pizarra

En la pura pizarra hay incógnitas suficientes como para reposar la respuesta. El Madrid, ya se dijo, respira por el cerebro de Modric y Kross, ventila por los extremos veloces y remata por Benzemá. El Atleti inventó el falso lateral o el interior bajo con la presencia de Carrasco, una fórmula que tiene la aprobación de los resultados. lo más importante. Así, el esquema, crea superioridad inmensa en el centro de la defensa y junta al resto del equipo cerrando espacios y presionando en zonas estratégicamente caóticas para el rival. Alguna cuestión más. ¿se van a dar las salidas de pelota en corto amenazadas por la presión? ¿Es sufriente un jugador en cada costado para doblegar la defensa del Atleti? ¿Jugará Benzemá en soledad ante la columna de centrales? ¿Hay forma de parar a Joao cuando encara la vertical? El futbol es, como buena religión, misterio y miedo. y una multitud motivada detrás esperando respuestas.