“Florentino, llévame de directivo”

Florentino Pérez sigue sin decir esta boca es mía. No le hace falta mover un dedo. La campaña se la hacen los medios de comunicación, los primeros que necesitan que el Real Madrid recupere su grandeza, aunque algunos de estos medios, y muchos de sus profesionales, callaron, miraron para otro lado, algunos hasta jalearon o contribuyeron, quizá inconscientemente, a las tropelías, irregularidades y atropellos que marcaron la presidencia de Ramón Calderón, con la fraudulenta Asamblea del 7-D como punto álgido, pero con un montón de escándalos demostrados y acreditados.

 

Ahora, cualquiera que escucha las palabras de Calderón en El Larguero de la Cadena Ser siente vergüenza ajena por la sarta de mentiras que lanza el ex presidente. Ahora, todos lo analizan sin dar importancia a un personaje público al que daban crédito por más que se demostrara que vivía instalado en la irregularidad permanente y en las promesas incumplidas. Florentino Pérez sabe que tiene su parte de culpa en los últimos ominosos años que ha vivido el Real Madrid, porque por más que haya logrado dos Ligas y una Supercopa de España, el mejor club del Siglo XX se ha dejado mucha parte de su gran imagen como club modelo en el mundo.

 

La información de ayer de El Confidencial (ver), en la que apuntaba un primer borrador de la que podía ser la próxima junta directiva de Florentino Pérez montó un gran revuelo en esos mentideros madridistas donde se mueven los que quieren ser directivos con Florentino a toda costa. El entorno de Florentino asegura que aún no tiene decidida cual será su junta, pero descartaba la presencia de Juan Miguel Villar Mir en esa futura directiva.

 

Florentino se arrepiente de haber metido a Ramón Calderón en su junta directiva. Por eso, en la próxima junta directiva que formará, una vez resulte ganador de las elecciones a las que parece seguro que se presentará, no quiere ‘Calderones’. En los últimos meses, Florentino no para de recibir ofrecimientos, de forma indirecta o indirecta, de gente que le pide formar parte de su directiva. Y el presidente de ACS siempre contesta lo mismo: “Voy a contar con el mismo grupo que tuve en mi anterior etapa”. Puede haber alguna modificación, pero el núcleo duro estará formado por la gente que estuvo con él. Y se encuentra ojo avizor para que no se le cuele ningún ‘Calderón’.