La nueva era: Proyecto Atleti 2020

Miguel Ángel Gil Marín va a dar una vuelta de tuerca al Atlético de Madrid. Aprovechando el buen momento que vive el Atlético, probablemente el mejor de su historia, va a acometer una reestructuración en la organización del club. Llevaba meses trabajando en ello y la semana pasada se lo comunicó a los mandos de la entidad rojiblanca. El objetivo es conseguir un crecimiento de la marca que se traduzca en un aumento de potencial deportivo. Estos cambios se enmarcan dentro del Proyecto Atleti 2020. Todo este plan fue explicado el pasado jueves en una comida con los mandos de la empresa deportiva y fue expuesto por el presidente Enrique Cerezo que alabó la gestión del club a cargo de Miguel Ángel Gil Marín.

La gestión del Atlético en la última década ha sido muy personalista y todo pasaba por Gil Marín. No se movía un lapicero ni un sacapuntas o un ordenador en las oficinas del estadio del Manzanares sin autorización del consejero delegado. La idea del máximo accionista siempre ha sido modernizar y dotar al Club Atlético de Madrid Sociedad Anónima Deportiva de una organización vanguardista en el mundo empresarial. Siempre lo intentó, pero le ha costado muchos años conseguirlo y muchos años la gestión no fue nada buena. Y parece que en esta ocasión, aprovechando la ola buena en la que se ha subido el Atlético, si lo puede lograr.

Para hacer la reforma del organigrama y de las competencias, Gil Marín ha querido contar con una empresa externa que ha estudiado el funcionamiento del club y ha dado su informe de cómo sería mejor realizar la modificaciones. La empresa elegida por el dueño del Atlético ha sido McKinsey & Company, compañía que se define en su página web como “una firma de consultoría de alta dirección que ayuda a las principales organizaciones del mundo a mejorar su desempeño. En nuestro trabajo con todo tipo de empresas privadas e instituciones públicas, aplicamos nuestra amplia experiencia de ámbito mundial, adaptada a las necesidades locales, con el fin de ayudar a nuestros clientes a afrontar sus principales retos en muy diversas áreas (desde la estrategia a las operaciones, pasando por la organización o la tecnología)”.

Una vez concluido el asesoramiento de McKinsey & Company, que ha durado cinco meses, Miguel Ángel Gil ha decidido aumentar las competencias de Fernando Fariza, director de área social que pasará también a ser responsable de infraestructuras y desarrollará todo el proyecto del nuevo estadio. Javier Martínez, ejecutivo experto en marketing a quien fichó de Disney, también da un salto en sus competencias y se pasa a encargar de toda la unidad de negocio del Atlético fuera de España, donde centrará todos sus esfuerzos de crecimiento el club rojiblanco. Mientras, Guillermo Moraleda retoma la dirección comercial para España.

Dentro del nuevo organigrama aparecen dos asesores externos. Peter Kenyon, cuya colaboración con el Atlético ya era conocida, será el encargado de desarrollar la marca fuera de España. El exdirector general del Manchester United y del Chelsea aportará su prestigio y experiencia para hacer crecer el volumen de facturación del Atlético, que gracias a los éxitos deportivos se encuentra en un momento de crecimiento imparable.

El otro asesor externo será Ignacio Aguillo. Aguillo, experto en finanzas y banca, ya empezó a ejercer en mayo de 2014 y su primera gran aportación ha sido estudiar y preparar la ampliación de capital que realizará la sociedad para dar entrada en el accionariado a Wang Jianlin, el multimillonario chino propietario de Wanda Group.

También habrá cambios en la estructura deportiva con ajustes en la cúpula de la Academia. Los técnicos como Miguel Ángel Ruiz pasarán a tener mayor importancia en cuestiones futbolísticas que Emilio Gutiérrez, que en el anterior organigrama salía por encima en la faceta deportiva que los especialistas en fútbol. Emilio Gutiérrez y Mario Aragón son dos hombres de plena confianza de Miguel Ángel Gil y seguirán teniendo presencia en el nuevo organigrama, pero los ejecutivos y especialistas tendrán mayor jerarquía y responsabilidad que ellos en este Proyecto Atleti 2020 que la pasada semana empezó a esbozar el consejero delegado a su cúpula y que durante los próximos días se comunicará al resto de los trabajadores, entre los que también habrá algún cambio. El área de comunicación seguirá dirigido por Rafael Alique, que además del área deportiva controlará también la información institucional.

La entrada en el capital de Wang Jianlin, una de las mayores fortunas de China, se acompañará con otra fuerte inyección de capital que ultima el máximo accionista del Atlético. La expansión económica del Atlético va paralela a su crecimiento deportivo. Tras pasar de 75 millones de euros a 150 millones de presupuesto, ahora el objetivo es doblar de 150 a 300 millones de euros de presupuestos, un escalón por detrás de los 550 millones de euros que manejan Madrid y Barça. Dominado deportivamente por el Atlético, el Real Madrid se encuentra aún lejos en el apartado financiero, pero se espera que las distancias entre Madrid y Atlético también se reduzcan en el capítulo económico gracias a este Proyecto Atleti 2020.

Todas estas reformas en el organigrama se realizan con el objetivo de que aumente la facturación del club a nivel mundial lo que redundará en un aumento del presupuesto dedicado al primer equipo que aspira a sentarse como uno de los diez grandes de Europa. La continuidad de Diego Pablo Simeone al frente del Atlético es vital para el proyecto Atleti 2020 y esa se la garantizó al menos un año con el regreso de Fernando Torres. La agente del Cholo, su hermana Natalia, ha estado los últimos días en Madrid, pero no ha trascendido aún si su presencia tenía relación con otra mejora de contrato de su hermano y representado que ya tuvo un aumento de sueldo hace un año (sus colaboradores Oscar Ortega y Germán Burgos aún no han tenido esa merecida mejora). Todo podría ser y sería algo lógico dentro del Proyecto Atleti 2020.