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Pedrosa sale del hoyo en Misano, pero su triunfo no oculta lo que pasa en su garaje
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Juan Pedro de la Torre

Historias del paddock

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Pedrosa sale del hoyo en Misano, pero su triunfo no oculta lo que pasa en su garaje

La victoria de Dani, de cuyo equipo nadie quiere ser el responsable técnico la próxima temporada, se añade a la serie de ganadores diferentes no consecutivos en MotoGP

Foto: Dani Pedrosa, en lo más alto del podio de Misano. (EFE)
Dani Pedrosa, en lo más alto del podio de Misano. (EFE)

Desde que Dani Pedrosa ganó su primer Gran Premio, el 29 de junio de 2002, en Assen (Holanda), nunca había estado tantas carreras sin repetir victoria. Tras ganar el año pasado en Sepang, en el polémico Gran Premio de Malasia, Pedrosa se ha pasado 13 carreras sin subir a lo alto del podio. Lo ha conseguido, contra pronóstico, este domingo en Misano, cumpliendo así con esa tradición suya iniciada aquel día en Assen, que consiste en ganar al menos una carrera cada temporada. Y ya van 15 años…

Foto: Marc Márquez lidera el grupo al comienzo del Gran Premio de la República Checa de MotoGP. (EFE) Opinión

El reencuentro de Pedrosa con la victoria fue muy especial. No fue una victoria como otra cualquiera. Para un piloto acostumbrado a ganar, que ya va por los 52 triunfos en el Campeonato del Mundo —una cifra solo superada por Agostini, Rossi, Nieto, Biland, Hailwood, Lorenzo y Doohan—, ganar una carrera en un campeonato en el que no tiene opciones al título siempre es positivo, siempre es digno de celebrar, pero lo de Misano fue más allá de la celebración. Porque en el box del Repsol Honda se vio llorar y emocionarse a tipos hechos y derechos. Había mucha tensión acumulada entre la gente del equipo de Pedrosa, porque la complicada situación por la que pasaba el piloto ha contagiado a toda la estructura, afectando a las relaciones del piloto con sus técnicos, en especial con Ramón Aurín, hasta el punto de que este no seguirá trabajando con Pedrosa en el futuro.

Las relaciones entre piloto y técnico se han deteriorado de manera irreversible, y cuando no te entiendes con la parte técnica de tu estructura, que es uno de los pilares de tu trabajo, mal vas. Desde que Pedrosa dejó de trabajar con Mike Leitner —ahora responsable técnico en la estructura KTM de MotoGP—, que estuvo a su lado desde su etapa en 125, Aurín fue el hombre elegido por HRC para trabajar con él. La marcha de Leitner coincidió con una transformación del entorno más próximo de Pedrosa, que no solo dejó de trabajar con el austriaco, sino también con Alberto Puig, su mentor desde los tiempos de la Copa Movistar, y Raúl Jara, que llevaba a su lado más de una década. Incluso Puig, que siempre fue su paladín, no ha dudado en criticarle con dureza recientemente desde la atalaya de Movistar+, donde colabora como comentarista, además de ser empleado de HRC.

Pedrosa y Aurín no fueron capaces de encontrar la fórmula que permitiera al piloto sentirse a gusto —al menos antes de Misano— sobre la actual Honda RC213V, en cuyo desarrollo se ha seguido el criterio de Marc Márquez. “Yo no habría elegido la moto que tenemos”, reconoció Pedrosa en Cataluña, en una abierta crítica al camino marcado por su compañero. Entonces, incluso señaló que era necesario hacer una moto útil para todos los pilotos de la marca, y no solamente para uno. El destino es caprichoso: este domingo él fue el cuarto piloto de Honda que gana esta temporada…

También hay quien señalaba falta de motivación en Pedrosa, tajantemente desmentida desde el equipo: “Es un hecho que en carrera él va más rápido que en entrenamientos, y eso significa que no es una cuestión de motivación”, explicaba Livio Suppo, director del equipo Repsol Honda. Tras ganar en Misano, Dani daba las gracias a todos los que le han apoyado, y se refería a su familia y amigos, y a la gente de su equipo: “Todo el equipo está detrás de este éxito. Desde Nakamoto [vicepresidente de HRC], Livio Suppo y la escudería entera. Incluso mucha gente del ‘paddock’ se ha ofrecido, porque querían que estuviera otra vez arriba”, dijo Pedrosa.

Lo cierto es que el triunfo no oculta la complicada relación que se vive en su garaje. De hecho, Honda tiene una dura papeleta: nadie quiere ser el responsable técnico del equipo de Pedrosa la próxima temporada. Christian Gabarrini, que llegó a HRC con Casey Stoner, regresará a Ducati para trabajar con Jorge Lorenzo; y Ramón Aurín trabajará con Jack Miller en el Estrella Galicia en 2017. Incluso se intentó reclutar a Juan Martínez, extécnico de Sete Gibernau y Nicky Hayden, y ahora comentarista en Movistar+, pero el ingeniero barcelonés declinó la oferta, como ya había hecho a finales de 2014, cuando se lo ofrecieron por primera vez. La situación es tan comprometida que al final HRC va a tener que reclutar un técnico para Pedrosa en las filas de un equipo satélite de Ducati, el Team Pramac. Se trata de Giacomo Guidotti, que actualmente trabaja con Scott Redding.

¿Y qué le ha pasado a Pedrosa para que le haya costado tanto ganar? Evidentemente, ha sido el más afectado por los cambios introducidos en MotoGP, porque las carcasas de los neumáticos Michelin son muy duras, demasiado para su peso, y tiene muchas dificultades para hacer que trabajen a la temperatura óptima, por eso generalmente tiene que usar compuestos más blandos que el resto. Lo hemos visto en Misano: Pedrosa montó el compuesto blando en la rueda delantera, mientras que la mayoría usaba el medio, y Márquez y Viñales el duro. Pedrosa había sido incapaz de superar las dificultades generadas por la combinación de la nueva electrónica y los neumáticos Michelin, que hasta este domingo resultaba letal para él.

Foto: Márquez y Dovizioso en Brno (Reuters) Opinión

Como decíamos hace unos días, hay que considerar que es un éxito que opciones tan diferentes permitan a pilotos y motos tan distintos luchar por la misma posición. Y como resultado de todo ello, tenemos ocho ganadores distintos en las ocho últimas carreras de MotoGP, algo que es verdaderamente inédito en la historia del Campeonato del Mundo.

Desde que Dani Pedrosa ganó su primer Gran Premio, el 29 de junio de 2002, en Assen (Holanda), nunca había estado tantas carreras sin repetir victoria. Tras ganar el año pasado en Sepang, en el polémico Gran Premio de Malasia, Pedrosa se ha pasado 13 carreras sin subir a lo alto del podio. Lo ha conseguido, contra pronóstico, este domingo en Misano, cumpliendo así con esa tradición suya iniciada aquel día en Assen, que consiste en ganar al menos una carrera cada temporada. Y ya van 15 años…

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