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Qué dicen los que tachan a Piqué de antiespañol (parece hasta simpático...)
Quién nos iba a decir que Piqué, con esa fama de antiespañol y para muchos de independentista, se viniera arriba con el triunfo de la Selección española Sub-21
No se trata de un golpe de calor ni es producto de una alucinación. Es real. Quién les iba a decir a algunos que Gerard Piqué, con fama de antiespañol y hasta de independentista, se viniera arriba con el triunfo de la Selección española Sub-21 en el Europeo de Italia. Piqué es capaz de descolocar a los que le atacan y le defienden. Lo ha vuelto a hacer con la felicitación a los chicos de Luis de la Fuente. “Felicidades a todo el equipo! Qué gran torneo han realizado! La Selección tiene el futuro garantizado”, es el tuit con el que el central del Barcelona se congratula de un nuevo éxito del fútbol español. ¿Postureo? No tiene necesidad de fingir que se alegra de un éxito del fútbol español. Para salir de la depresión, la decepción o el hundimiento con el que se fue a las vacaciones tras las derrotas contra el Liverpool y el Valencia no hay nada mejor que sentirse orgulloso de que uno ha crecido en la Selección. Es lo que demuestra Piqué, al que se le ponía en duda su compromiso con España.
Injusto. Piqué ha sido protagonista, en ocasiones criticado de forma justificada, por provocar al madridismo con mensajes en las redes sociales en los que picaba por la eliminación en la Copa del Rey por alineación indebida de Cheryshev o enfrentarse a un referente como Álvaro Arbeloa. También ha tenido declaraciones polémicas con dardos a las influencias y el poder en el palco del Bernabéu en unas fechas en las que Hacienda investigaba a Messi. Después se demostró que no era así porque ‘cayó’ Cristiano Ronaldo (además de otros madridistas como Marcelo, Modric o Xabi Alonso). Pero ese Piqué tenía revuelto el patio más por su defensa al derecho de votar en Cataluña y esta fue la bomba para mezclar todo y generar antipatía. Hasta que dio una rueda de prensa, en una concentración de la Selección española, para aclarar que no pedía más que el derecho a votar de los catalanes. Quedó el Piqué perverso que no sentía los colores de España porque se le escrutaba cualquier gesto cuando sonaba el himno.
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Se cansó, un mes de octubre de 2016, cuando tras un partido de la Selección en Malta se le criticó con dureza por llevar las mangas cortadas. Tras el encuentro tiró la toalla, anunció que dejaba a España tras el Mundial de Rusia y se retiró por la puerta de atrás un chico que llevaba en la Selección desde los 15 años. Ahora parece tener esa nostalgia cuando ve a los Sub-21 ganar un Europeo con la certeza de que el relevo generacional está garantizado gracias a futbolistas que no han perdido la esencia del mejor estilo de la Selección que fue campeona del Mundo y de dos Eurocopas. Piqué, en las categorías inferiores de la Selección, llegó a ser subcampeón de Europa con la Sub-16, en 2004, y campeón de Europa Sub-19 en 2006. Con la absoluta ganó el Mundial de 2010 y el Europeo de 2012. Muchos le echan de menos en una Selección en la que sigue Sergio Ramos (33 años) y después de ver el nivel tan alto que tiene en el Barcelona.
La pesadilla de la Champions
Pero a Piqué no le ha ido todo lo bien que esperaba cuando dejó la Selección absoluta el 11 de agosto del 2018. “Me voy a centrar en el Barcelona” es la decisión que tomó el central después de comunicarle a Luis Enrique que necesitaba gastar todas sus energías, físicas y mentales, en una temporada que era clave. A sus 32 años tenía la sensación de que el ciclo con España estaba cerrado y había llegado a un punto de madurez para liderar un equipo, junto a Messi, que tenía como principal objetivo volver a ganar la Champions. No se cumplieron las expectativas y ambos jugadores fueron los que quedaron más tocados con el batacazo en Anfield.
Los días siguientes fueron una pesadilla. Un horror para dos veteranos que maldecían haber vuelto a fallar en la principal competición y no haber aprendido de los errores de Roma. El equipo se desplomó y sufrió un grave despiste contra un Liverpool más intenso y agresivo. Piqué y Messi se sinceraron en una rueda de prensa lacrimógena, antes de la final de Copa del Rey, en la que llegaron a pedir perdón. El estado de ánimo era depresivo en dos baluartes que, a pesar de cerrar la temporada con la derrota contra el Valencia, son partidarios de la continuidad de Ernesto Valverde. Están de acuerdo con la postura del presidente, Josep María Bartomeu, de dar continuidad a un entrenador que ha ganado dos Ligas seguidas y con el que el vestuario se siente identificado por cómo gestiona la plantilla. Son los jugadores los que asumen la responsabilidad de haber fallado en el día clave contra el Liverpool y ese fallo, en el gol de saque de esquina, que califican de “juveniles”.
No se trata de un golpe de calor ni es producto de una alucinación. Es real. Quién les iba a decir a algunos que Gerard Piqué, con fama de antiespañol y hasta de independentista, se viniera arriba con el triunfo de la Selección española Sub-21 en el Europeo de Italia. Piqué es capaz de descolocar a los que le atacan y le defienden. Lo ha vuelto a hacer con la felicitación a los chicos de Luis de la Fuente. “Felicidades a todo el equipo! Qué gran torneo han realizado! La Selección tiene el futuro garantizado”, es el tuit con el que el central del Barcelona se congratula de un nuevo éxito del fútbol español. ¿Postureo? No tiene necesidad de fingir que se alegra de un éxito del fútbol español. Para salir de la depresión, la decepción o el hundimiento con el que se fue a las vacaciones tras las derrotas contra el Liverpool y el Valencia no hay nada mejor que sentirse orgulloso de que uno ha crecido en la Selección. Es lo que demuestra Piqué, al que se le ponía en duda su compromiso con España.