Me llueven críticas por hacerse pública la identidad de mis clientes en la red

Tenemos una empresa sólida que nos ha costado mucho levantar. Como consecuencia de nuestra propia actividad, manejamos datos personales de clientes que diligentemente tratamos y eliminamos cuando la ley lo exige. Sin embargo, hemos descubierto por comentarios recibidos en las redes sociales que se ha producido una filtración de determinados datos, por parte de quien sospechamos era un antiguo trabajador de la empresa que tenía acceso a ellos. ¿Qué podemos hacer?

Ante un escenario de estas características, se nos plantea un doble problema, por un lado, la empresa estaría incurriendo en un incumplimiento de la normativa sobre protección de datos de carácter personal, y por otra parte, estaríamos inmersos en una crisis de reputación, pues nadie querría contratar con una empresa que publica cierta información confidencial sin consentimiento de los afectados.

Respecto a la primera de estas cuestiones, los datos relativos a personas físicas que manejan las empresas están sometidos en España a la Ley Orgánica 15/1999 de 13 de diciembre de Protección de Datos de Carácter Personal (LOPD) y su normativa complementaria.

En este sentido, y a modo de ejemplo, indicar que la propia jurisprudencia (sentencia de la Audiencia Nacional de fecha 15 de enero de 2015, recurso 297/2010) se ha encargado de concretar que, además de otros datos más obvios, como el nombre o la dirección de una persona, el correo electrónico del que es titular una persona física o su IP constituyen una información protegida por la LOPD.

En este contexto, cabría distinguir entre las posibles denuncias de clientes que se hayan visto perjudicados por la filtración y las acciones que amparan a la empresa en relación al exempleado que ha utilizado los datos de forma indebida.

En primer lugar, lo más conveniente será contratar un abogado especializado en protección de datos, que analice la situación y las posibles acciones a emprender, tanto en virtud de la aplicación de la Ley de Competencia Deslealcomo del Código Penal, puesto que la difusión, revelación o cesión de un secreto de empresa, llevada a cabo por quien tuviere legal o contractualmente obligación de guardar reserva, es constitutiva de delito.

Además, este panorama se ampliará en 2018, pues el nuevo Reglamento Europeo de Protección de Datos obliga a las empresas a notificar cualquier brecha de seguridad a la autoridad de control (en España, la Agencia Española de Protección de Datos) y, en su caso, a los afectados.

La publicación indebida de los datos va a generar, al mismo tiempo, una crisis de reputación 'online' de la empresa que será necesario afrontar, elaborando previamente un informe que, expertos en reputación 'online', le podrán hacer para conseguir la información necesaria para comenzar a actuar.

Se hace necesario comenzar a escuchar qué se dice en internet, dónde, cómo y con qué alcance. Será necesario actuar sobre los comentarios negativos que ya han sido publicados mediante la eliminación cuando proceda a través de acciones jurídicas o utilizando estrategias de 'marketing online' que minimicen el problema.

Como punto final, una recomendación: elaborar un plan preventivo destinado a los trabajadores de la empresa, que incluya medidas como informar por escrito a los mismos de su obligación de secreto respecto de los datos de los clientes; y requerirles su conformidad y compromiso. Igualmente, la empresa deberá adoptar internamente las medidas de seguridad suficientes, que estén a su alcance, para asegurar que los datos están debidamente protegidos.

Si quiere eliminar algún contenido negativo o recibir un informe gratuito sobre lo que se dice de su empresa en internet,entre aquío llámenos sin compromiso al teléfono91 509 63 05para que nuestros expertos en reputación 'online' puedan ayudarle y estudiar su caso.