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La segunda oleada de inversiones en Latinoamérica
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Juan Carlos Martínez Lázaro

El Observatorio del IE

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La segunda oleada de inversiones en Latinoamérica

Ayer presentamos a la prensa el "Informe sobre el Panorama de la Inversión española en Latinoamérica en 2013", que desde seis años venimos realizando en el

Ayer presentamos a la prensa el "Informe sobre el Panorama de la Inversión española en Latinoamérica en 2013", que desde seis años venimos realizando en el IE Business School. Mientras que en 2012 la mayor parte de las empresas  españolas allí presentes tenían previsto congelar sus inversiones a la espera de ver cómo evolucionaban las cosas tanto en España como al otro lado del Atlántico, este año, la gran mayoría de ellas tiene previsto incrementarlas.

El resultado no sorprende, a tenor de lo acontecido en los últimos doce meses. Frente a una economía española que sigue inmersa en su proceso de ajuste y no anticipa cifras de crecimiento sustanciales durante un cierto tiempo, Latinoamérica en su conjunto parece haber superado los riesgos de un nuevo contagio de la crisis financiera y presenta un horizonte bastante favorable. Y digo en su conjunto, porque mientras que hay países que están teniendo un desempeño muy descatable -Colombia, Perú, México, Brasil, Chile o Panamá son un buen ejemplo de ello-, otros como Venezuela, Argentina o Bolivia acumulan importantes desequilibrios macroeconómicos que impactan de forma sustancial en sus niveles de crecimiento y tienen actitudes hacia la inversión extranjera, en muchos casos, hostiles.  

También hemos detectado que cada vez son más las pymes españolas que están iniciando su aventura americana. Hasta ahora, la gran parte del stock de inversión española en la región, unos 116.000 millones de euros, pertenecía a grandes corporaciones y no habían sido muchas las pequeñas y medianas empresas españolas que se habían instalado allí. Ahora, con un mercado doméstico estancado y con unos mercados europeos que tampoco presentan buenas perspectivas, muchas pymes se ven obligadas a salir fuera. Latinoamérica está siendo el destino favorito  de muchas de ellas, dentro de una segunda oleada de inversiones españolas, pero también otras zonas, como el norte de África o la Europa extracomunitaria, se han convertido en lugares muy atractivos.

Y mientras muchas de nuestras empresas buscan nuevos mercados, muchos de nuestros compatriotas están buscando nuevos horizontes. El INE acaba de publicar el Padrón de Españoles Residentes en el Extranjero a 1 de enero de 2013, según el cual las personas con nacionalidad española residentes en el extranjero aumentaron en 2012 en casi 115.000. Muchos de ellos son inmigrantes que han decidido retornar a sus países de origen por la falta de expectativas que hay en España, pero también otro muchos son nacidos en España. Concretamente, más de 43.500. Esta última cifra no tiene por qué coincidir con el número de españoles de origen que, en los últimos tiempos, han  abandonado nuestro país en busca de un trabajo que aquí no encuentran, pero nos da muchas pistas sobre este fenómeno. 

Si para la economía española es muy positivo que sus empresas inviertan en otros mercados -sólo hay que ver lo que sería de muchas compañías del Ibex sin la aportación de su negocio exterior- no es, en cambio, nada positivo que ciudadanos  españoles, en general muy bien formados, estén teniendo que emigrar. Esperemos que para ellos sea un viaje de ida y vuelta y que la mayor parte pueda retornar en un plazo razonable con experiencia, conocimientos e ideas en la mochila. Y esperemos también que la apuesta que muchas empresas españolas están realizando en el exterior sea sólo un viaje de ida y que no se trunque cuando el mercado doméstico comience su recuperación.

Ayer presentamos a la prensa el "Informe sobre el Panorama de la Inversión española en Latinoamérica en 2013", que desde seis años venimos realizando en el IE Business School. Mientras que en 2012 la mayor parte de las empresas  españolas allí presentes tenían previsto congelar sus inversiones a la espera de ver cómo evolucionaban las cosas tanto en España como al otro lado del Atlántico, este año, la gran mayoría de ellas tiene previsto incrementarlas.