Un gran patrimonio bien asegurado

Si hay un colectivo que sufre menos en una situación de crisis como la que estamos viviendo son las grandes fortunas. Los altos patrimonios requieren de un asesoramiento específico a la hora de buscar una cobertura aseguradora, de ahí que los grandes brókers de seguros dispongan de departamentos especializados y dedicados en exclusiva a este segmento de negocio.

 

Se intenta facilitar a los clientes esta labor, aportándoles un asesoramiento especializado,  tasadores profesionales y por supuesto, diseñando un producto a la medida de cada cliente.  Además de todo lo anterior, el broker elegido tiene que contar con un Departamento de Siniestros con gran experiencia que gestione de principio a fin cualquier reclamación por un siniestro ocurrido en el riesgo asegurado.

Muchas veces el broker se encuentra con clientes que por diferentes motivos, por ejemplo una herencia inesperada, desconocen el auténtico valor de su patrimonio y necesitan de un soporte o una ayuda externa que les facilite cómo hacer las cosas.

En otras ocasiones se deben facilitar soluciones alternativas, para aquellos clientes que por motivos de seguridad o discreción, no desean proporcionar demasiada información sobre sus bienes.

También hay que considerar que lo que más cuesta son los objetos de arte, por la dificultad que tienen los clientes en dar un valor a estos objetos, ya que pueden ser artículos únicos, incunables, objetos heredados cuyo valor se desconoce.

En definitiva, la experiencia de un broker de seguros internacional nos dice que este tipo de cliente necesita una atención especial y además, una protección total. Por ello, la mejor solución es una póliza Todo Riesgo con cobertura mundial, y sin las restricciones que exigen las coberturas habituales, como puede ser el hurto.  La redacción de la cobertura se adapta igualmente al objeto asegurado, incluyendo ampliaciones a los daños sufridos, por ejemplo, para obras de arte como descabalamiento o demérito artístico, o en el caso de joyas, su extravío o pérdida.

Este tipo de clientes son bastante exigentes a la hora de asegurar su patrimonio y en particular los objetos de valor especial (obras de arte, joyas, antigüedades, armas , pieles). Buscan un seguro a su medida y quieren estar protegidos ante cualquier incidente, motivo por el que ofrecemos pólizas todo riesgo, con cobertura mundial,  incluso para los objetos que sean transportados en cualquier parte del mundo, y sin las restricciones que ponen las pólizas generales. Con coberturas exclusivas de estos productos para los objetos de valor y joyas,  como la inclusión de la posible depreciación que puede afectar a su valor como consecuencia de daños sufridos, descabalamiento, extravío o pérdida.

Las grandes fortunas también exigen además de un análisis objetivo de la calidad de las coberturas, unos precios altamente competitivos. La prima que puede llegar a pagar un cliente de estas características varía en función de diferentes premisas, principalmente las sumas aseguradas y sus medidas de protección. 

Un gran patrimonio puede encontrarse con una prima media de 55.000 euros, pero este tipo de coberturas depende de muchos factores y del riesgo que estamos asegurando, ya sean inmuebles, colecciones de arte, joyas, yates, fincas… Por poner ejemplos más específicos, el seguro de un yate puede encontrarse entre los 20.000 ó 30.000 euros, mientras que una colección de arte de unos 20 millones de euros se encontraría con una prima alrededor de los 25.000 euros.

Por lo general las compañías aseguradoras reconocen como a un “gran patrimonio” a aquel que alcanza el millón y medio de euros. Afortunadamente para este tipo de clientes, cada vez hay más aseguradoras interesadas en este segmento, por lo que el cliente final conseguirá unas mejores condiciones económicas.

(*) Responsable del Área de Patrimonios de Willis Iberia