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Las ventas de las grandes empresas se desploman en marzo
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Juan Carlos Barba

Gráfico de la Semana

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Las ventas de las grandes empresas se desploman en marzo

Las ventas de estas empresas, que constituyen aproximadamente la mitad de la economía española, caen en marzo el 6,9%En el gráfico de esta semana hablaremos de

Las ventas de estas empresas, que constituyen aproximadamente la mitad de la economía española, caen en marzo el 6,9%

En el gráfico de esta semana hablaremos de un indicador que es uno de los grandes desconocidos del gran público, el de las ventas de las grandes empresas que elabora la Agencia Tributaria.

Este indicador es sumamente importante, pues abarca aproximadamente la mitad de todas las transacciones comerciales de la economía española y la actividad de casi cinco millones de empleados (la tercera parte de los trabajadores del sector privado). Según el Ministerio de Economía, este indicador era, hasta que comenzó la crisis, el que mejor correlacionaba con el PIB (0,89), lo que por otra parte es bastante lógico dado el enorme tamaño de la muestra y que los indicadores de producción (ventas) y valor añadido (PIB) necesariamente tienen que oscilar a la par (aunque a largo plazo el valor añadido aumenta en relación a la producción fundamentalemente por el cambio tecnológico).

Como se puede apreciar en el gráfico suavizado, las ventas deflactadas vinieron aumentando hasta el inicio de la crisis (que según este indicador fue diciembre de 2007) a un ritmo sostenido de entre el 3,4 y el 5,2% anual. Después del estallido de la burbuja se desplomaron, alcanzando su pico en enero de 2009 (un asombroso -17,89%). Después nunca, cogiendo el gráfico suavizado que se ve más abajo, llegaron a estar en positivo. A día de hoy la recaída es clara y muy grave, ya que la tasa media de descenso de ventas en los últimos cinco meses es de casi el 6%. Desde los máximos de ventas de antes de la crisis se acumula ya un descenso superior al 22%.

Esto da idea de la gravedad de la recesión (aunque más bien deberíamos decir depresión) en la que estamos inmersos, y que no hará sino introducir mucha más presión al proceso de reducción del déficit público pretendido por el Gobierno. No olvidemos que la recaudación fiscal tiene una alta correlación con las transacciones comerciales del conjunto de la economía, de las que estos datos son un reflejo extremadamente fiel.

En los siguientes gráficos se detallan por sectores las ventas interiores de las grandes empresas. A destacar la enorme depresión que sufren las ventas de bienes y servicios de capital, que llevan casi 4 años cayendo a tasas sostenidas por encima del 14% anual. Bienes de consumo, bienes y servicios de consumo y bienes intermedios también caen de forma importante. Construcción y promoción cae desde hace casi cinco años (como es lógico siendo el sector que desencadenó la catástrofe) y actualmente decrece a tasas sostenidas por encima del 20% desde hace casi tres años. Servicios de consumo cae de forma neta y equipo y software se encuentra en una situación pésima, descendiendo ya a tasas cercanas a los dos dígitos. Construcción pura (excluyendo promoción) se halla también sumido en una profundísima depresión (-22%), industria cae sobre el 6% y servicios (todos) sobre el 10%.

Las grandes empresas consiguieron compensar parcialmente estas espeluznantes cifras del mercado interior mediante el recurso al mercado externo. Pero por desgracia para ellas (y para la economía nacional) éste ha comenzado a debilitarse rápidamente, y las exportaciones han entrado también en negativo a partir del último trimestre de 2011 (-0,01%), acentuándose la tendencia en el primero de este año (-1,08%). Como se ve, el hundimiento ha sido brusco y espectacular, después de siete trimestre creciendo a tasas superiores al 7%. Esto supone también un durísimo varapalo para el Gobierno, ya que estas exportaciones incluyen realmente la casi totalidad de las que se realizan en España y en el cuadro macro presentado hace pocas semanas preveían un aumento de las exportaciones del 3,4% para 2012.

Las ventas de estas empresas, que constituyen aproximadamente la mitad de la economía española, caen en marzo el 6,9%