Es noticia
Y todavía quedan seis meses
  1. Economía
  2. Información privilegiada
José Ramón Iturriaga

Información privilegiada

Por

Y todavía quedan seis meses

El lunes que viene cerramos el semestre. ¡Vaya seis mesecitos! ¡Han sido como para escribir a casa! Los mercados en este periodo han puesto en precio

El lunes que viene cerramos el semestre. ¡Vaya seis mesecitos! ¡Han sido como para escribir a casa! Los mercados en este periodo han puesto en precio el fuerte deterioro de el cuadro macroeconómico –a día de hoy con síntomas horribles, “estanflacionistas”-; una crisis financiera de proporciones bíblicas de la que todavía no tenemos muy claro cuando empezaremos a salir; y han comprado el “decoupling” de emergentes y comodities. El resultado: bolsas –salvo honrosas excepciones de algún que otro emergente- arrastrándose por el fango. Bonos también desplomándose, con una curva de tipos que no sólo se ha invertido sino que se ha desplazado muy fuerte y rápido en todos los plazos. Y petróleo y materias primas en el cielo.

Lo malo de terminar el primer semestre es que al día siguiente empieza el segundo y nos tenemos que plantear como nos enfrentamos a él. Es un momento como otro cualquiera para tratar de hacer balance, sacar la cabeza de la pantalla y mirar un poco más allá del valor liquidativo de mañana.

Pues en pocas palabras lo que yo creo que habría que hacer es:

1. comprar bonos

2. Vender comodities, emergentes y petróleo

3. Comprar bancos ingleses.

Con la que está cayendo entiendo que me tachen de imprudente, contrarian e incluso oportunista. ¡Qué le vamos a hacer!

Voy a tratar de explicarme:

Los bonos hay que comprarlos porque la curva se ha pasado siete pueblos descontando riesgos inflacionistas y la reacción de los bancos centrales. En mi opinión, los principales elementos que han arrastrado al índice general de precios para arriba –fundamentalmente petróleo y alimentos- van a comparar mucho mejor en la última parte del año. Además, el componente de salarios va a ayudar. La reacción de los bancos centrales es otro cantar. A pesar del tono algo más severo por parte de algunos miembros de la Fed, creo que no van a subir tipos en lo que queda de año porque son conscientes de que no es el mejor remedio para un “credit crunch” como el que estamos viviendo. En cuanto al BCE -¡Ay el BCE!- es más difícil tratar de anticipar nada porque la ineptitud de esta institución es insondable y contrastada. No deberían subir. En todo caso empezar a bajar en algún momento del año que viene. Pero no me jugaría una cena. Si por alguna remota subieran tipos en la próxima reunión, marica el último. Yo soy de la opinión que no dentro de mucho erigiremos una estatua a Bernanke por haber sido capaz de sacarnos de este atolladero.

Vender comodities, emergentes y petróleo porque esta vez tampoco va a ser distinta. Y los efectos de una crisis del consumidor americano ya los conocemos. En el caso del petróleo también. Aunque a veces se nos olvide, Estados Unidos y Europa continúan siendo el 50% de la demanda de petróleo a nivel mundial por lo que una fuerte desaceleración de sus economías –como la que estamos sufriendo- va a impactar en el precio.

Comprar bancos ingleses porque están muy, muy baratos, por debajo incluso de los niveles de la debacle de final de los años ochenta. Si esta crisis no termina con el mundo tal y como lo conocemos, creo que representan una oportunidad histórica en términos de valoración.

El lunes que viene cerramos el semestre. ¡Vaya seis mesecitos! ¡Han sido como para escribir a casa! Los mercados en este periodo han puesto en precio el fuerte deterioro de el cuadro macroeconómico –a día de hoy con síntomas horribles, “estanflacionistas”-; una crisis financiera de proporciones bíblicas de la que todavía no tenemos muy claro cuando empezaremos a salir; y han comprado el “decoupling” de emergentes y comodities. El resultado: bolsas –salvo honrosas excepciones de algún que otro emergente- arrastrándose por el fango. Bonos también desplomándose, con una curva de tipos que no sólo se ha invertido sino que se ha desplazado muy fuerte y rápido en todos los plazos. Y petróleo y materias primas en el cielo.