El peronismo quiere encarcelar a Javier Milei

Ahora mismo, el candidato con más opciones para convertirse en próximo presidente de Argentina es Javier Milei. Tanto por méritos propios cuanto por deméritos ajenos: después de cuatro años de nefasta gestión económica, el peronismo es incapaz de levantar creíblemente cabeza, y Juntos por el Cambio, el equivalente al PP español, ha ejecutado una campaña electoral terrible (peor incluso que la de Feijóo para las generales), cuyo colofón han sido unos muy polémicos audios de su fichaje estrella para ministro de Economía, Carlos Melconian, en los que bordea la corrupción, el tráfico de influencias y el acoso sexual.

Y como Milei parece ahora mismo imparable desde un punto de vista electoral, se lo busca parar mediante procedimientos mafiosos, impulsados por el peronismo gobernante pero respaldados por la presunta oposición de Juntos por el Cambio. El ejemplo más claro de momento, aunque no el único, ha sido que el todavía presidente de la república, Alberto Fernández, ha denunciado a Milei por "intimidación pública" tras sus comentarios respecto al peso argentino: una denuncia por la que podría ser condenado a entre dos y seis años de cárcel.

Opinión

TE PUEDE INTERESAR

200 economistas contra Milei

Juan Ramón Rallo

Concretamente, Milei constató lo que ya debería ser sobradamente sabido por todos: que el peso argentino es una moneda nefasta y que ningún ciudadano que quiera preservar sus ahorros a corto-medio plazo debería plantearse invertir en un depósito a plazo fijo denominado en pesos. Pues bien, como el peso ha seguido depreciándose desde entonces (tal como viene haciendo regularmente desde hace una década), los responsables de la calamitosa política económica argentina han decidido culpar a Milei de hundir el peso.

Al parecer, los argentinos habrían huido en masa de esta divisa —como si estuviéramos ante una especie de pánico bancario— tras las admoniciones de Milei: una acusación en sí misma poco verosímil, pero que se vuelve del todo estrafalaria si tenemos en cuenta que Milei siempre ha dicho lo mismo respecto al peso y, sobre todo, que la tasa de inflación del peso durante el mes de septiembre fue del 138,3% en términos interanuales y del 12,7% en términos intermensuales (si se mantuviera este ritmo durante el conjunto del año, la tasa de inflación acabaría siendo del 320%). ¿También es Milei responsable de esta gigantesca inflación interior? Y si la inflación interior está desbocada, ¿acaso cabe pensar que esa depreciación de la moneda no se manifestará también en su tipo de cambio frente al dólar?

Es más, ¿cuál debería haber sido el deber patriótico de Milei respecto al peso? ¿Exhortar a los argentinos a que inviertan sus ahorros en depósitos a plazo fijo en pesos aun sabiendo que la inflación los va a devorar? Al contrario, un buen ciudadano debería alertar a sus compatriotas de que invertir en pesos ahora mismo equivale a ser robado por la casta política y de que, por ende, deberían mantenerse alejados de ella.

Opinión

TE PUEDE INTERESAR

Por qué me parece un error el modelo de banca Simons que defiende Milei

Juan Ramón Rallo

Pero resulta que no solo Alberto Fernández ha denunciado a Milei con tan nulo fundamento como este, sino que el fiscal general argentino ha decidido impulsar tan disparatada acción penal. Al respecto, llama la atención que este clarísimo caso de lawfare (pues el fiscal general es tan independiente en Argentina como en España) no haya sido criticado como tal por aquellos que siempre denuncian lawfare cuando los tribunales procesan a un político de izquierdas. Y también llama la atención que Juntos por el Cambio, consciente del deterioro institucional de Argentina y habiendo efectuado ellos mismos comentarios con un contenido similar al de Milei (como que los activos del banco central valen cero), se sume a esta caza política contra Milei. Parece que tanto los unos como los otros carecen de escrúpulos con tal de llegar al poder.

Mas lo único cierto en este caso es que quien ha destruido el valor de la moneda y ha arruinado a millones de argentinos es el peronismo. El pirómano denunciando al bombero de provocar incendios.