Es noticia
El problema económico más urgente de Argentina
  1. Economía
  2. Laissez faire
Juan Ramón Rallo

Laissez faire

Por

El problema económico más urgente de Argentina

Mientras no se solvente el problema de las Leliqs y de los Pases, será muy complicado levantar el cepo cambiario

Foto: Javier Milei, nuevo presidente de Argentina. (Reuters/Agustín Marcarían)
Javier Milei, nuevo presidente de Argentina. (Reuters/Agustín Marcarían)
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

Javier Milei suele repetir que el más acuciante de los problemas que ha de resolver la economía argentina es el de las Leliqs y los Pases. De hecho, el baile de nombres de candidatos a presidir el Banco Central y el Ministerio de Economía, que hemos vivido durante estos últimos días, está muy estrechamente relacionado con la gestión de esa bomba de relojería que son las Leliqs y los Pases.

Veamos: Leliqs y Pases son pasivos a muy corto plazo del Banco Central de la República Argentina (BCRA). Las Leliqs vencen a 28 días y los Pases a un día. Cada vez que alguno de esos pasivos vence, el BCRA cuenta con dos opciones: o pagarlo o refinanciarlo. Para pagarlos, debería contar con suficientes ingresos en pesos, pero no los tiene ni lejanamente; como alternativa, podría crear nuevos pesos y cancelar esa deuda, pero ello abocaría el país a la hiperinflación, dado que las Leliqs y los Pases prácticamente triplican el monto de la base monetaria. Así pues, al BCRA solo le queda la opción de refinanciar esos pasivos a vencimiento: pero aquí el problema reside en que sus acreedores solo están dispuestos a hacerlo a tipos de interés anuales por encima del 100%.

Eso significa que las Leliqs y los Pases, que hoy superan los 23 billones de pesos, terminarán el año en cerca de 30 billones de pesos. Y, si nada cambiara, concluirían 2024 con un monto de 60 billones de pesos. El monto nominal va creciendo por la necesidad de refinanciar el principal y los nuevos intereses que van generándose con la refinanciación de ese principal. Al tipo de cambio oficial, una deuda de 30 billones de pesos son unos 85.000 millones de dólares: algo que el Estado argentino carece de solvencia para digerir (no digamos ya 170.000 millones de dólares si el problema perdurara un año más).

Así que la cuestión debe resolverse de manera urgente. Porque, además, mientras no se solvente este problema, será muy complicado levantar el cepo cambiario. Si se permite la libre compraventa de dólares en Argentina a cualquier tipo de cambio, muchos acreedores de Leliqs y Pases optarían por dar el salto al dólar, lo que depreciaría enormemente el peso (recordemos que el valor de las Leliqs y de los Pases casi triplica el de la base monetaria) y acercaría el país a la hiperinflación (estaríamos ante el equivalente al Rodrigazo que vivió el país en 1975). Para desactivar esta bomba de relojería, solo hay dos formas.

Foto: Javier Milei. (Reuters/Matias Baglietto)

Por un lado, liquidar en el mercado activos del banco central o del Estado para, con lo así ingresado, amortizar total o parcialmente el importe vivo de las Leliqs y los Pases. Este era, de hecho, el plan al que originalmente se había adscrito Milei (el llamado plan Cachanosky/Ocampo, que pretendía colocar en los mercados financieros, con ciertas mejoras de calidad crediticia, los activos del banco central denominados en dólares, así como otros activos del Estado) pero que al parecer ha rechazado finalmente.

Por otro lado, refinanciar a largo plazo (y a un menor tipo de interés) las Leliqs y los Pases, retrasando, por tanto, el momento en que puedan ser amortizados con ingresos del banco central (y dándole al banco central más tiempo para lograr los ingresos necesarios). Esto puede hacerse por dos vías: o bien mediante un canje forzoso de las Leliqs y los Pases por bonos del Estado a largo plazo (esto es lo que ocurrió en la propia Argentina en 1989 con el llamado Plan Bonex) o buscando financiación voluntaria de terceros. Esto último es lo que parece que planea hacer ahora Milei y para lo que está tanteando al macrista Toto Caputo como ministro de Economía: lograr un préstamo a largo plazo de 15.000 o 30.000 millones de dólares para recomprar las Leliqs y los Pases, poder levantar el cepo y a partir de ahí volver a crecer con equilibrio presupuestario.

Pero démonos cuenta de que reemplazar la deuda a corto plazo del banco central por nueva deuda a largo plazo solo soluciona el acuciante problema de liquidez del país, pero no su problema de solvencia a más largo plazo. Es paralizar la suspensión de pagos, pero no impedirla: lo de impedirla, si se puede, dependerá de las políticas que se sigan a partir de ahí. Suerte, porque la necesitarán, y mucha.

Javier Milei suele repetir que el más acuciante de los problemas que ha de resolver la economía argentina es el de las Leliqs y los Pases. De hecho, el baile de nombres de candidatos a presidir el Banco Central y el Ministerio de Economía, que hemos vivido durante estos últimos días, está muy estrechamente relacionado con la gestión de esa bomba de relojería que son las Leliqs y los Pases.

Argentina
El redactor recomienda