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Portugal, la ‘cabra’ de Caldera y la España socialista
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Portugal, la ‘cabra’ de Caldera y la España socialista

Las fichas de dominó del Proyecto Europeo de la elite de Bruselas van cayendo una a una según el orden que estaba previsto. El resultado de

Las fichas de dominó del Proyecto Europeo de la elite de Bruselas van cayendo una a una según el orden que estaba previsto. El resultado de aplicar un tipo de políticas año tras año está ahí y los gestores públicos que padecemos, en Europa y en cada país, siguen en sus tronos echando balones fuera y destrozando nuestras economías. El caso portugués estaba cantado y solo había que hacer los deberes y ver lo mal que se han hecho las cosas allí durante muchos años para adelantar el resultado.

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En la zona Euro, cada vez que un país tiene problemas serios de financiamiento hay que ver los fundamentos del mismo y estudiar qué ha pasado. Hemos de pensar que lo crítico en el ajuste dentro de nuestra área monetaria es el sector exterior, y así lo hicimos al estudiar el caso español en un artículo reciente (enlace) y en otro anterior (enlace). Para el caso portugués haremos lo mismo, pero nos centraremos en su Cuenta Corriente de la Balanza de Pagos, que ve el saldo de sus transacciones exteriores de bienes y servicios.

El déficit exterior permanente supone que, de forma estructural, su nivel de gasto es superior a su producción y que la economía está equilibrando sus cuentas externas vía endeudamiento público o con variaciones en su balance privado, esto es, con inversiones exteriores en su economía y, en mucha menor medida, de residentes extranjeros en vivienda. El equivalente en el mundo empresarial sería un proyecto de empresa fallido por perder entre el 10 y el 6% de su facturación durante por lo menos una década, algo a todas luces insostenible. Pero es que además,  Portugal, que no ha tenido burbuja inmobiliaria que le ocultara su déficit público como nosotros (ver siguiente gráfico), en al menos los últimos veinte años, ha sido incapaz de poner en orden sus cuentas fiscales, y encima hace poco les pillan haciendo trampas. De modo que lo que vemos estos días es simplemente cómo pincha la burbuja de deuda de un país apuntalado por la UE donde además no hay alternativa de gestión pública. 

Portugal es el canario en la mina de la UEM

A finales del 2005 tuve que defender ante otros economistas que, más allá de una previsible crisis inmobiliaria global, la UEM en su conjunto enfrentaría serios problemas con su deuda soberana; no acerté con Irlanda ni que España lo haría tan mal, y Grecia lo dimos por descontado como un problema menor, pero lo de Portugal era totalmente previsible. Si nuestra banca no hizo sus deberes ¿por qué de nuevo hemos de endeudarnos todos más para rescatar a Portugal y pagar los platos rotos de la mala gestión de otros?

El principal argumento que utilicé entonces fue que el núcleo central de la zona Euro realiza una mala gestión pública y ello se ve reflejado en los mínimos y máximos crecientes que hace el ratio Deuda Pública/PIB de Francia y Alemania, como puede verse en el gráfico siguiente; en ese sentido Portugal solo avanza lo que le ocurrirá a Francia y Alemania si no mejoran su gestión pública.

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Como se ve en la gráfica, Portugal siguió hasta la segunda crisis un patrón intermedio entre el francés y el alemán, posteriormente Portugal y Francia son dos gotas de agua y España, en 2007, se une al grupo cuando aflora el déficit oculto por la irresponsabilidad de no abordar un problema que conocían. Portugal es tan ‘europea’ en su desorden público que justificó su plan de ajuste (enlace inglés, portugués) para evitar acudir al FMI diciendo que "sería malo para el país, para Europa, para la moneda única y para el proyecto europeo". De vergüenza.

A principios de 2006, cuando entrabas en el detalle portugués siempre aparecía un informe de McKinsey sobre competitividad al que se ve que no le hicieron mucho caso. El informe, de 2004, está regulín (enlace extracto), y obvia alertar a los portugueses que con el tamaño de su economía les urge una agresiva expansión comercial exterior (sitio para empezar tienen), aparte de una reforma política. Vale la pena leer el comienzo de la introducción de ese informe que es todo un síntoma del estado de cosas allí: “En el aniversario de la sangrienta revolución que derribó en 1974 la larguísima dictadura, Portugal mira atrás a una generación que la ha transformado en una economía moderna”. Hechas las preces, abluciones y loas obligadas a la casta política reinante, la que se supone es la oficina de consultoría de mayor nivel es abducida y se queda a medias: lamentable. Vista cual es la piedra capitular del edificio portugués, nada realmente competitivo puede esperarse de la estructura que la sostiene; con decirles que a la izquierda hay un partido socialista y a la derecha uno socialdemócrata y todos viven emulando a Bruselas, donde esperan que Barroso, solo superado en incompetencia por Trichet, nos endeude a todos los europeos para mantener el tinglado plutocrático y parasitario portugués. Mejor el FMI.

La ‘cabra’ de Caldera y la España socialista

En la Transición, la izquierda solía reventar las asambleas universitarias lanzando una cabra, que es emponzoñar el debate introduciendo un tema polémico y estéril

Tenemos a cargo de nuestra economía, al igual que Portugal, a seguidores incondicionales del peculiar europeísmo que hoy reina en Bruselas y, como muestra la gráfica anterior, ya han conseguido que sigamos a Portugal acercándonos a Francia y Alemania. Pero es que, en realidad, los socialistas españoles no van a resolver ningún problema económico, lo que sí harán son cortinas de humo e intentar engañar a los españoles.

Recientemente, Vidal Cuadras nos recordaba que, en la Transición, la izquierda solía reventar las asambleas universitarias lanzando una cabra, que es emponzoñar el debate introduciendo un tema polémico y estéril. Eso es exactamente lo que ha hecho Caldera, el adalid de la España del ladrillo, la baja productividad y la inmigración masiva; desde una fundación del PSOE, Jesús Caldera Sánchez-Capitán -un ministro socialista que dejó el Gabinete en extrañas circunstancias- ante unas elecciones municipales y autonómicas, no se le ocurre peor idea que lanzar la cabra de lo que supuestamente, según él, haría Rajoy si ganara las elecciones en 2012. Su panfletillo propagandístico La España de Rajoy y Cameron es todo un ejemplo de cómo, con dinero de los sufridos contribuyentes, se intenta perturbar gravemente el debate electoral autonómico y municipal con unos futuribles desconocidos, cuando no falsos.

Lo que no explica la cabra de Caldera es que Cameron asume el cargo con un país al borde de la insolvencia, como explicamos en un artículo reciente (enlace), gracias a la pésima gestión del socialista Gordon Brown que le dejó un muerto histórico, como le dejarán los socialistas españoles a Rajoy. No es la primera vez que pasan el muerto a otro y una de las mejores forma de verlo es con la evolución del ratio Deuda Pública/PIB, porque si el endeudamiento público se usa bien aumentará menos que el PIB; esa es una de las cosas que consiguió el PP y no el PSOE, como se ve en el siguiente gráfico.

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Aparte de lo anterior, tenemos conocimiento de otras cosas, por ejemplo de que Fernández Ordoñez sabía, al menos en 2003 (en realidad antes), del comienzo de la burbuja inmobiliaria (y más cosas) cuando escribió Los problemas del final de los problemas y no hicieron nada, al contrario, para ganar elecciones alimentaron con el bicho durante 51 meses para alborozo de Caldera hasta convertirlo en un monstro que nos arruinó a todos. Conocieron de la crisis y no hicieron nada para ganar las elecciones. Vieron la evidencia de la necesidad de la reforma financiera y no han hecho nada de provecho salvo liar mas la madeja ¿Y todo ese desastre económico, por no hablar del destrozo del Estado, para qué?

La política no es mi área pero, si revisamos unos pocos ejemplos, podemos decir que, bajo un paño político de izquierda radical, realizan intervenciones empresariales como en el caso de Enel contra Endesa y luego Solbes termina de consejero de Enel, al parecer lo intentaron también contra el BBVA desde Industria y fracasaron; re-estructuran el sector audiovisual y surge un grupo mediático con vínculos con la ministra Chacón, luego quitan la publicidad de TVE, mientras Rubalcaba intenta que a Prisa y a él no los machaque el fuego “amigo” del presidente, quien a su vez es muy amigo de un magnate del eólico y al pueblo lo abrasan con las tarifas eléctricas, y todas esas cosas las hacen descaradamente. Ese es su afán económico, mientras meten sus cabras como cortinas de humo.

Siete años perdidos y cuatro millonarios de izquierda

Tal vez las acciones antes referidas no sean ilegales pero, ¿alguien piensa, de verdad, que unos personajes con esa Ética, que se caracterizan por no atender las urgencias del país, cumplirán con sus obligaciones y mirarán por el Bien Común en lo que queda de legislatura? Qué va, harán lo mínimo indispensable, pactando lo que sea, manipulando a la opinión pública para seguir a lo suyo asegurándose su futuro; estos nos dejarán como Portugal, pero con un Estado inoperante, y el que venga que arree. Lo peor de la situación que vivimos es que exige que se hagan todos los deberes pendientes, los que no se han hecho desde el 2004 y los que el día a día vaya imponiendo, de modo que cuanto antes termine esta España Socialista que padecemos, mejor.

*Luis Riestra Delgado es economista.

Las fichas de dominó del Proyecto Europeo de la elite de Bruselas van cayendo una a una según el orden que estaba previsto. El resultado de aplicar un tipo de políticas año tras año está ahí y los gestores públicos que padecemos, en Europa y en cada país, siguen en sus tronos echando balones fuera y destrozando nuestras economías. El caso portugués estaba cantado y solo había que hacer los deberes y ver lo mal que se han hecho las cosas allí durante muchos años para adelantar el resultado.

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