Es noticia
Inversión turística con propósito: nuevos incentivos, más humanidad e innovación
  1. Economía
  2. Tribuna
Natalia Bayona

Tribuna

Por

Inversión turística con propósito: nuevos incentivos, más humanidad e innovación

En 2024, más de 1.400 millones de turistas cruzaron fronteras. España, con casi 94 millones, se afianzó como el segundo destino mundial. ¿Invertimos como deberíamos en turismo?

Foto: Foto: iStock.
Foto: iStock.

Durante décadas, el modelo de inversión turística ha funcionado bien a nivel global compuesto por la creación de grandes proyectos hoteleros y megaciudades en torno al sector, marcos de incentivos fiscales y la atracción de capital extranjero como pilares de su desarrollo.

Pero el contexto ha cambiado. Las tensiones geopolíticas, la aceleración de la digitalización con la fuerza de la inteligencia artificial, la sostenibilidad y las nuevas preferencias de los viajeros nos obligan a repensar estrategias. No se trata de abandonar lo que funciona, sino de ampliar el enfoque.

Además, aún nos queda resolver el reto más importante del sector a nivel mundial: su profesionalización traducida en oportunidades en empleos de calidad para los más jóvenes. Educación formal, educación técnica, educación continuada… En resumen, más y más educación.

Más allá del sol y la playa

El turismo no es solo el arte de promover un destino, es un sector económico que apoya a más de 100 subsectores. Desde la fabricación de productos manufactureros asociados en la hotelería como los amenities, los grandes congresos y eventos, los parques temáticos, la infraestructura vial o los puertos.

El conocido como el 'sector económico más humano de todos' ha demostrado su crecimiento constante con inversiones en más de 38.000 millones de dólares en los últimos años, siendo más del 65% enfocada a la infraestructura hotelera. La inversión turística también debe mirar a la innovación. Hoy, solo el 2% de los unicornios (empresas tecnológicas valoradas en más de 1.000 millones de dólares) a nivel mundial representan al sector. Hay un camino muy largo por recorrer para que el turismo sea un líder en esta materia.

Además, el desbalance digital en las empresas tradicionales es evidente. Siendo una industria dónde más del 80% de su tejido empresarial está compuesto por las pymes y la mitad de ellas solo llega a invertir menos 5.000 dólares anuales en digitalización, está claro que si queremos turismo mundial para rato, necesitamos la creación de un marco de inversiones donde las subvenciones y las ayudas directas a la alfabetización muestren una evolución.

¿Qué debemos hacer?

El sector tiene una oportunidad única para ir un paso más allá. ¿Por qué no pensar en crear zonas francas turísticas, como lo hacen otros sectores económicos? ¿Y si las áreas económicas especiales se aplicaran también a las zonas rurales, incentivando el turismo comunitario y las artesanías? Eso sí, siempre pensando en que cualquier incentivo fiscal tenga como retorno empleo de calidad para los más vulnerables y su profesionalización.

El nuevo marco de inversiones no se debe limitar a los impuestos. La agilidad administrativa, la seguridad jurídica, el acompañamiento al inversor y una apuesta clara por la educación son piezas igual de importantes. Ejemplo de ello es lo que estamos haciendo desde ONU Turismo con más de 50 países: ayudarles a crear su guía de inversión para el sector, promover nuevos incentivos como canje de deuda por biodiversidad en Ecuador o la creación de 'colegios amigos del turismo' en Colombia para formar desde la juventud y zonas económicas especiales en países como Sudáfrica o Indonesia.

Cuanto más viajo, más percibo la relevancia del turismo como un vehículo de cohesión social. El llamado balance económico, social y medioambiental solo puede surtir efecto si la regulación, conectividad e inversión van de la mano, sin dejar de lado lo que hace al turismo único: su autenticidad, la búsqueda de lo local y la evolución como seres humanos para generar experiencias memorables en lo que vendemos.

*Natalia Bayona es directora ejecutiva de ONU Turismo.

Durante décadas, el modelo de inversión turística ha funcionado bien a nivel global compuesto por la creación de grandes proyectos hoteleros y megaciudades en torno al sector, marcos de incentivos fiscales y la atracción de capital extranjero como pilares de su desarrollo.

Turismo