Es noticia
La tormenta de verano viene por la derecha
  1. España
  2. Al Grano
Antonio Casado

Al Grano

Por

La tormenta de verano viene por la derecha

El PP de Casado no puede permitirse compartir los tics xenófobos de Abascal (Vox) respecto al partido ceutí que lo propuso a la Asamblea autonómica como 'persona non grata'

Foto: El presidente del PP, Pablo Casado (d), y el líder de Vox, Santiago Abascal. (EFE)
El presidente del PP, Pablo Casado (d), y el líder de Vox, Santiago Abascal. (EFE)

Tormenta de verano en la derecha española. Pellizcos de monja, que pican de momento sin dejar señal. ¿O alguien se cree que Pablo Casado y Santiago Abascal, viejos amigos, ramas del mismo tronco, se han conjurado para favorecer el atornillamiento de Pedro Sánchez al poder?

No está mal traído el órdago de Vox tras la declaración de su líder nacional como 'persona non grata' en Ceuta, gracias a la abstención de los nueve diputados del PP en la Asamblea de esa ciudad autónoma: “Si el PP no se retracta, habrá consecuencias”, advierten en Vox después de dar por rotas las relaciones con el partido hermano.

Ni rectificación ni ruptura de relaciones. Por la cuenta que les trae a ambos, ahora que la derecha reza unida y los sondeos se ponen de su parte

Pero no habrá rectificación en la posición del presidente ceutí, Juan Jesús Vivas (PP), coincidente con la de la cúpula nacional, como supimos luego por las declaraciones de su portavoz, el alcalde Martínez-Almeida. No la habrá, al menos en los términos propuestos por Vox, que pretende una revocación del acto parlamentario en el que fue reprobado Santiago Abascal por su desprecio a los ceutíes musulmanes, tan españoles como los cristianos o los ceutíes ateos.

Ni rectificación ni ruptura de relaciones. Por la cuenta que les trae a ambos, ahora que la derecha nacional reza unida y los sondeos se ponen de su parte. De parte de un PP escoltado por Vox en las cifras eventualmente ganadoras en las próximas elecciones generales. Pero Casado no puede permitirse de ninguna manera compartir los tics xenófobos de Santiago Abascal respecto al partido político (MDyC) que lo propuso a la Asamblea autonómica como 'persona non grata'.

Foto: Pablo Casado y Santiago Abascal. (EFE)

Llegado el caso, en una muy improbable ruptura de relaciones con el PP, la peor parte se la llevaría Vox, ya con tendencia a la baja en todas las encuestas por el efecto 'aspirador' del PP. Lo cual sirve también para Andalucía, por si la tentación de provocar un adelanto electoral rondase por la cabeza de Abascal, también con el pretexto de que el Gobierno andaluz (PP-Cs) es un “cómplice de la invasión”. Qué barbaridad.

Y a Casado tampoco le vendría mal perfumarse de centrismo por cuenta de los excesos verbales de Abascal durante los consabidos asaltos a las fronteras de Ceuta y Melilla y por la profesión de fe musulmana de un partido político español.

"En un asunto de soberanía, no se puede confundir nacionalidad con religión", me dicen desde el PP sobre los excesos verbales de Abascal

“En un asunto de soberanía, no se puede confundir nacionalidad con religión”, me dice un alto dirigente del PP. Exacto. Es el punto clave de la posición de Génova, perfectamente representada en el abstencionismo de sus nueve diputados en la Asamblea de Ceuta, tan contraria a la demonización de Abascal como a la que él perpetra contra la presunta marroquinidad de MDyC, un partido tan español como Vox.

Foto: El presidente de Vox, Santiago Abascal. (EFE)

Su pecado es “haber puesto en peligro la convivencia en Ceuta”, según Juan Jesús Vivas, el presidente ceutí, muy molesto porque Vox se negó a firmar una moción en la que se reconocía la ciudad autónoma como parte esencial de España.

Aunque Vox sea primera fuerza política en Ceuta, todo eso es más grave que el agravio recibido. El rasgado de vestiduras de Abascal por ser declarado 'persona non grata' no justifica la enormidad del órdago contra el PP, al que tacha de “colaborador necesario”. La desproporción es tan evidente que en ninguno de los dos partidos creen seriamente que las amenazas de Vox sobrevivan a la descarga tormentosa propia de estas fechas.

Tormenta de verano en la derecha española. Pellizcos de monja, que pican de momento sin dejar señal. ¿O alguien se cree que Pablo Casado y Santiago Abascal, viejos amigos, ramas del mismo tronco, se han conjurado para favorecer el atornillamiento de Pedro Sánchez al poder?

Pablo Casado Santiago Abascal
El redactor recomienda