Es noticia
FoodTech: el futuro de la actividad agroalimentaria
  1. España
  2. Comunidad Valenciana
Valencia Monitor

Valencia Monitor

Por

FoodTech: el futuro de la actividad agroalimentaria

Dentro de España, la Comunidad Valenciana es la región con el tercer sector agroalimentario más importante al generar el 9,4% del VAB

Foto: Inauguración de la tercera edición de F4F-Expo Foodtech. (EFE/Miguel Toña)
Inauguración de la tercera edición de F4F-Expo Foodtech. (EFE/Miguel Toña)

El sector agroalimentario español cuenta con un elevado nivel técnico y un bagaje cultural que lo convierte en uno de los principales motores de la internacionalización de la economía española, así como uno de los más fuertes en el ámbito de la UE-27. De hecho, en 2022 contribuyó con el 9,2% del valor añadido bruto (VAB) y el 11,4% del empleo del total de la economía de España, además de concentrar el 17,5% de las exportaciones de bienes del país, según datos del Observatorio sobre el sector agroalimentario español en el contexto europeo 2022 de Cajamar. Esta evidente importancia del sector se traslada al ámbito comunitario, ya que España aporta el 12,3% del VAB y el 10,4% del empleo agroalimentario de la UE-27, y se posiciona como la cuarta economía exportadora de este tipo de productos en la región. Dentro de España, la Comunidad Valenciana es la región con el tercer sector agroalimentario más importante al generar el 9,4% del VAB, el 11,6% del empleo y el 13,2% de las exportaciones de la actividad agroalimentaria española.

Esta fortaleza del sector contrasta con la relativa debilidad en la inversión en I+D que realiza, puesto que supone el 3,7% del total que realizan las empresas a nivel nacional y se traduce en un esfuerzo inversor (inversión en I+D como porcentaje del PIB) del 0,6%, por debajo de la media comunitaria, que se sitúa en el 0,7%. Sin embargo, la cadena de valor del sector agroalimentario al completo está experimentando en los últimos años una revolución en la forma de producir, elaborar y consumir los alimentos de la mano de las FoodTech.

Foto: Cerdos en el corral de una granja. (EFE/Orlando Barría)

Pero ¿qué es el sector FoodTech? Básicamente, es un conjunto de startups e instituciones que aplican las tecnologías digitales como la IA (inteligencia artificial), big data, robótica, impresiones 3D, genética, blockchain, biotecnología, entre otras, para mejorar la gestión del sector, incrementar la eficiencia de las explotaciones agrarias y la industria agroalimentaria, así como aumentar la calidad de los productos.

Se sabe muy bien que la innovación constituye un factor determinante para el crecimiento sostenido de un sector en concreto y del conjunto de la economía. Quizás esta afirmación cobra más peso en el caso del sector agroalimentario dado su perfil estratégico y los retos actuales y futuros a los que se enfrenta. Uno de ellos es garantizar la seguridad alimentaria frente al crecimiento de la población, pues, según las proyecciones de las Naciones Unidas, la actual población mundial de 7,9 billones de personas continuará aumentado hasta los 9,7 billones en 2050. A este aumento de demanda de alimentos se suma que, en países como China e India, la capacidad adquisitiva de la clase media se ha incrementado, poniendo más presión a esta demanda creciente de alimentos. En España, se prevé que la población pase de 47,4 millones de personas en 2022 a 52,9 millones en 2050 (INE).

Foto: Daniel Ordóñez. (EC)

Además, atender las necesidades alimentarias de esta población mundial implica un impacto en los recursos naturales que, unido al cambio climático, el control de las emisiones de gases de efecto invernadero y la persistencia de las sequías, hace indispensable una mejora en la eficiencia hídrica de los cultivos y en la gestión de los recursos necesarios para el funcionamiento de la cadena de producción del sector agroalimentario y el cumplimiento de los objetivos marcados en la Política Agraria Común (PAC). Actualmente, el sector agroalimentario español es el responsable del 25,1% de las emisiones de gases de efecto invernadero del total de la economía nacional y del 10,6% en el ámbito comunitario. La UE-27 se ha marcado el año 2050 para alcanzar la neutralidad climática con cero emisiones netas.

Sin duda, un actor clave en esta transformación digital del sector agroalimentario es el consumidor, tanto por las tendencias de consumo que impone y que influyen en las decisiones del resto de los eslabones de la cadena agroalimentaria como por la demanda directa de alimentos que tiene y la forma en la que los utiliza. Uno de los elementos detrás de la seguridad alimentaria es la reducción del desperdicio de alimentos, tanto de los productos que se desperdician sin haber sido utilizados como de aquellos que han sido transformados para luego desecharse. En 2022, dos de cada tres hogares españoles desperdiciaban algún tipo de alimento, es decir, el 70,8% de los hogares. En términos per cápita, se desperdició un total de 25,3 kilos o litros de alimentos por persona en 2022, un 10,3% menos que hace un año, principalmente gracias a la mejor gestión de los productos sin utilizar. Aunque la tendencia del desperdicio alimentario va a la baja, aún se mantiene en niveles nada despreciables.

Foto: José Luis Cabañero, cofundador de Eatable Adventures.

Por tanto, la digitalización debe ser la clave para que el sector agroalimentario español mejore estos indicadores y encuentre las soluciones a lo largo de toda la cadena de valor para afrontar los retos mencionados. Es en este punto en el que las FoodTech cobran importancia al proporcionar la tecnología necesaria para mejorar la actividad agroalimentaria actual e incluso introducir un cambio de paradigma dentro de la misma.

El ecosistema FoodTech en España está consolidado y cuenta con 412 empresas que posicionan al país dentro del top 10 global. Tres regiones concentran el 65,3% de las FoodTech en España, principalmente Madrid (27,7%) y Cataluña (25,7%), seguidas a distancia por Andalucía (11,9%). La Comunitat Valenciana también cuenta con un ecosistema Foodtech en el que las startups trabajan con institutos tecnológicos cuyas líneas de investigación están vinculadas a esta área, así como dentro de parques tecnológicos que contribuyen a transferir el conocimiento y en muchos casos dar paso a nuevas startups. Si bien las startups valencianas desarrollan su actividad en diferentes partes de la cadena de valor del sector agroalimentario, destacan en el AgriTech.

Foto: Patxi Larumbe, CEO y cofundador de la empresa Cocuus System Ibérica. (EFE/Jesús Diges)

El tejido empresarial del sector de las FoodTech se caracteriza por un liderazgo de la pequeña empresa al concentrar el 93,6% del ecosistema y con solo el 6,3% de empresas que cuentan con más de 50 empleados. La mayor parte de las FoodTech se dedican a la producción y transformación de alimentos (34% del total), a las que siguen las desarrolladoras de soluciones de logística, distribución y retail (25%), las AgriTech (agricultura inteligente) que concentran el 24% y las desarrolladoras de aplicaciones restaurante tech (17%).

En el último año, las AgriTech o, lo que es lo mismo, la agricultura de precisión e inteligente se han ido consolidando tanto en España como el resto de UE-27, poniendo el foco principalmente en los sistemas de automatización de cultivos, lo que conlleva un aumento de la eficiencia en el uso de los recursos. Sin embargo, la producción y transformación de alimentos sigue liderando el sector, y es la creación de nuevos productos con nuevos ingredientes, como la fertilización por precisión, la actividad que concentra el mayor esfuerzo. En la fase de comercialización de la cadena agroalimentaria, la logística, distribución y retail centra sus esfuerzos en el desarrollo de nuevos canales de venta que van dirigidos directamente al consumidor, mientras que, en el área de restaurante más tecnológico, el desarrollo de plataformas de gestión supone casi un tercio de su actividad.

Sin lugar a duda, la revolución que suponen las FoodTech dentro de la actividad agroalimentaria ya es una realidad que no está exenta de retos, que van desde atraer el apoyo de inversores e instituciones de investigación nacionales, así como la aceptación de estas tecnologías por parte de los consumidores que permitan su completa incorporación a los canales de consumo. Quizás el desafío más importante en un futuro es encontrar el equilibrio entre estas nuevas tecnologías que representan las FoodTech y los procesos tradicionales dentro de la actividad agroalimentaria, que dotan de un valor adicional a los productos españoles en los mercados internacionales, y que tienen estrecha relación con el funcionamiento del medio rural, el medio ambiente y la participación de los animales en la nueva realidad del sector agroalimentario.

*Jimena Salamanca, economista del Ivie y profesora de la Universitat de València

El sector agroalimentario español cuenta con un elevado nivel técnico y un bagaje cultural que lo convierte en uno de los principales motores de la internacionalización de la economía española, así como uno de los más fuertes en el ámbito de la UE-27. De hecho, en 2022 contribuyó con el 9,2% del valor añadido bruto (VAB) y el 11,4% del empleo del total de la economía de España, además de concentrar el 17,5% de las exportaciones de bienes del país, según datos del Observatorio sobre el sector agroalimentario español en el contexto europeo 2022 de Cajamar. Esta evidente importancia del sector se traslada al ámbito comunitario, ya que España aporta el 12,3% del VAB y el 10,4% del empleo agroalimentario de la UE-27, y se posiciona como la cuarta economía exportadora de este tipo de productos en la región. Dentro de España, la Comunidad Valenciana es la región con el tercer sector agroalimentario más importante al generar el 9,4% del VAB, el 11,6% del empleo y el 13,2% de las exportaciones de la actividad agroalimentaria española.

Noticias de Comunidad Valenciana
El redactor recomienda