Es noticia
La batalla madrileña del 28-M: empieza la cuenta atrás
  1. España
  2. Crónicas desde el frente viral
Pablo Pombo

Crónicas desde el frente viral

Por

La batalla madrileña del 28-M: empieza la cuenta atrás

Esto tiene pinta de que Ayuso y Almeida gobernarán, sin demasiados problemas, además. Vox avanza hacia la irrelevancia política, aunque probablemente logre cubrir mínimos en el recuento

Foto: La candidata por el PSOE a la alcaldía de Madrid, Reyes Maroto. (EFE/Víctor Lerena)
La candidata por el PSOE a la alcaldía de Madrid, Reyes Maroto. (EFE/Víctor Lerena)
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

Va a estar bonita la campaña electoral madrileña. Se ve que todos los competidores están dispuestos a asumir riesgos, que habrá grandes errores y aciertos, que lo que viene marcará buena parte de la conversación nacional. Además, aunque el resultado parezca bastante escrito, puede darse por hecho que sus consecuencias impactarán en todo el sistema de partidos español. Seguramente, para todo lo que resta de década.

Las últimas semanas nos han dejado un buen anticipo de lo que está por venir. En la izquierda, hemos visto diluirse la enésima jugada pergeñada desde Ferraz sobre la Federación Socialista Madrileña. Ya es tradición. Reyes Maroto no ha llegado a decepcionar, porque nunca alcanzó a ilusionar. Simplemente, no produce nada fuera de la indiferencia y casi quizá sea mejor que siga así. Resignada, como parece, a seguir en el camino hacia el patíbulo del 28-M sin voluntad de agitar mucho las cosas.

Más ganas viene mostrando Lobato, que sigue todo el rato tocando todas las teclas menos la buena. La pobreza en los productos que está emitiendo, demasiado cercanos al ridículo por la intención de ser más conocido y de caer simpático, refleja que el equipo de marketing es flojete, pero, sobre todo, que el problema de origen en esa campaña es de lectura de la región y, por lo tanto, de orientación estratégica.

Foto: Juan Lobato cuando era alcalde de Soto del Real. (equipolobato.es)

Hemos visto algo más de talento en Más Madrid, pero de forma desigual. Hasta el momento, los materiales de Rita Maestre van mejor tirados que los de Mónica García. Si bien conviene recordar que, a estas alturas de la campaña anterior, ambas ya lo estaban haciendo mucho mejor que en esta ocasión.

Las dos tienen ante sí dificultades distintas. Rita ha sido madre y tardará en volver a la carrera, así que no tardaremos en ver si su equipo ha preparado bien la agenda y los contenidos para rebajar la impresión de ausencia sobre el terreno. Mientras tanto, Mónica García está sufriendo las consecuencias de un error no forzado. El patinazo del bono social ha generado una crisis de credibilidad que no se puede reparar. Haga lo que haga su equipo, el boquete en el casco seguirá. Y ese es un daño que, incomprensiblemente, Lobato no ha sido capaz de aprovechar. Ya es tarde, dejó escapar su oportunidad.

Foto: Mónica García, esta semana en la Asamblea de Madrid. (EFE/Daniel González)
TE PUEDE INTERESAR
Mónica García y sus horas más bajas como líder de la izquierda: "Ha perdido credibilidad"
Ignacio S. Calleja Alejandro López de Miguel

Ayuso hace las cosas de otra manera. No hemos visto ningún cartel suyo y tampoco ningún vídeo. Se ha dedicado a desactivar el arma principal de la oposición. Al cerrar el acuerdo de sanidad, no evita que la cuestión vaya a ser determinante en la contienda electoral, porque será así en casi todos los territorios, pero sí saca la cuestión del escenario central, dejando a Mónica García sola en el ring, golpeando al aire.

Simultáneamente, parece haberse acompasado con Feijóo. Mantiene a Sánchez como adversario de referencia, al tiempo que rompe con Vox aplicándole su propia medicina: mitad de agresividad, mitad de victimismo y cero piedad.

Foto: Isabel Díaz Ayuso con Rocío Monasterio en una foto de archivo. (EFE/Sergio Pérez)

Van a sufrir los de Abascal tanto en la carrera regional como en la municipal. Tienen problemas para explicar lo que están haciendo, no ya a los madrileños sino a ellos mismos. Quisieron venderse como más duros que Ayuso y han terminado rebajándose a la categoría de los dogmáticos problemáticos. Ese puede ser un error fatal.

Los de Vox, que hace poco tiempo eran la organización política española que mejores productos lanzaba, han perdido el toque desde las urnas andaluzas. Y no porque se les haya caído la partitura, sino porque ha cambiado la realidad. Siguen siendo contundentes, claro. Pero Ayuso lo es más.

Foto: Rocío Monasterio e Isabel Díaz Ayuso, de espaldas, durante una reunión. (EFE/Kiko Huesca)

Hace bien Almeida en ir a rueda de la lideresa, aunque no tenga otra opción que esa. Tengo la impresión de que buscará evitar los errores, no necesita mucho más. Por eso tiene sentido, más allá del aire que quieran imprimir los publicistas, que centre su campaña en la gestión. No porque sea una gran fortaleza, sino porque es la menor debilidad.

Veremos si Begoña Villacís termina entrando, como parece. A día de hoy, no se ve castigo por su coqueteo con el PP y eso tiene lógica, porque su electorado se ubica fundamentalmente en esa zona. La cuestión está, creo yo, en si podrá aguantar hasta el último tramo, que es donde se la juega. Su juego va de gestionar las expectativas mientras estén vivas, al mismo tiempo que dosifica las fuerzas de un equipo más pequeño que los de los rivales.

Foto: La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, durante su comparecencia de este miércoles. (EFE/Fernando Villar)
TE PUEDE INTERESAR
El paso en falso de Villacís compromete su futuro después del 28-M
Ignacio S. Calleja Ana Belén Ramos

Difícil lo tiene Podemos, obvio. Compiten sin cartel. Pero la sombra de Iglesias es alargada y las cosas a la izquierda del PSOE están como están. Por eso, no habrá sorpresa, aunque sí intención de contarnos que el ánimo de los morados sube al abrirse las puertas de Galapagar para que el guerrero fantasma se dirija a la capital.

Esto tiene pinta de que Ayuso y Almeida gobernarán, sin demasiados problemas, además. Vox avanza hacia la irrelevancia política, aunque probablemente logre cubrir mínimos en el recuento, conviene en todo caso recordar que estamos hablando de un partido que fundacionalmente es madrileño. Ya veremos si después de la noche electoral no empiezan a verse intentonas para moverle la silla a Abascal. Desde fuera, da la sensación de que la dirección actual ya ha dado todo lo que podía dar, aunque la cercanía de las elecciones generales puede postergar una sucesión que necesitan a ojos vista.

Foto: Imagen de la manifestación, en Cibeles, contra el gobierno de Pedro Sánchez. (EFE/Víctor Lerena) Opinión
TE PUEDE INTERESAR
Entre el antisanchismo y el recelo de Abascal
Javier Caraballo

Si se cumplen los pronósticos, habrá quien celebre secretamente el resultado, aunque sea una derrota. En el ayuntamiento y en la Comunidad de Madrid, están los dos mayores trampolines que Sumar puede dar de cara a las urnas del después.

Esta vez, y no por unas décimas como en la anterior ocasión, Más Madrid puede superar ampliamente al PSOE. No es un cambio menor ni localizado. Los socialistas pueden terminar siendo terceros en la segunda región más poblada del país, después de haber sido destronados en la más poblada, Andalucía, su granero electoral histórico. Uno mira el mapa y se pregunta cómo puede el Partido Socialista articular territorialmente una mayoría. Y no lo ve. Solo faltan dos meses, dos meses, nada más. Bienvenidos a la cuenta atrás.

Va a estar bonita la campaña electoral madrileña. Se ve que todos los competidores están dispuestos a asumir riesgos, que habrá grandes errores y aciertos, que lo que viene marcará buena parte de la conversación nacional. Además, aunque el resultado parezca bastante escrito, puede darse por hecho que sus consecuencias impactarán en todo el sistema de partidos español. Seguramente, para todo lo que resta de década.

Noticias de Madrid
El redactor recomienda