Urdangarín, duque de Palma... Arena

Si Iñaki Urdangarín no fuera yerno vigente del Rey, cabría calificar de peliaguda su situación en el escándalo denominado 'caso Palma Arena', sustanciado en un juzgado de Instrucción y que cuenta entre sus ramificaciones con los presuntos delitos que mantienen a Jaume Matas en libertad bajo una fianza millonaria. En junio de este año ya declaró como imputado el número dos del duque de Palma en el Instituto Noos, el economista Diego Torres. El jugador de balonmano presidía esta entidad cuando en 2005 organizó en Palma unas fantasmagóricas jornadas sobre turismo y deporte, en las que se llegó a la apabullante conclusión de que el deporte es muy importante para el turismo o viceversa.

A raíz de la investigación judicial se ha descubierto que el esposo de la infanta Cristina se embolsó cien mil euros, por sus trabajos para el citado Illes Balears Forum. Por si las sospechas de connivencia no fueran suficientes, Urdangarín fue obligado desde las alturas a desvincularse con toda urgencia del Instituto Noos en 2006, cuando aparecieron las primeras informaciones sobre esta institución pretendidamente benéfica.

Urdangarín cobró del Govern Matas a través de una inmobiliaria de su propiedad. El truco consiste en montar el evento con la fachada de una entidad sin ánimo de lucro, para facturar a continuación al benéfico instituto desde una mercantil. A falta de conocer el desenlace judicial para el yerno del Rey, se está repasando su patrimonio y, como mínimo, debería barajarse el cambio de su título a duque de Palma Arena, el velódromo que triplicó el presupuesto en su construcción y que después no fue homologado por la Unión Ciclista.

El deportista olímpico siempre mantuvo una excelente relación con el expresident de Balears y ministro de Medio Ambiente de Aznar. En cuanto recuperó el poder, le felicitó con un rotundo "se nota mejor ambiente en la calle". Desde luego, Matas mejoró la ambientación económica del aristócrata, que por aquellos años adquiriría dos pisos en la Palma de la burbuja inmobiliaria.

El extravagante Forum alcanzó un presupuesto de dos millones y medio de euros en dos ediciones. Hubo voces que asociaron la marcha de los Duques de Palma a Washington con un intento por poner distancia con las actividades del benemérito Instituto Noos que, por supuesto, también desplegó su actividad en Valencia.

A juzgar por las actuales vacaciones de la Familia Real, el duque es consciente de las amenazas que revolotean sobre su cabeza. El esposo de Cristina ha estado tan distante como Jaime de Marichalar, pero de cuerpo presente. En las fotos oficiales, el gigantón de 1,95 conseguía pasar desapercibido y  se movía con aire ensimismado. Lejanos quedan los veranos en que zarpaba en el 'Fortuna' junto a su esposa e hijos, como si fuera el propietario del carísimo yate, para recorrer las calas más recónditas de la isla. La versión más misericordiosa reconoce que no ha mostrado el comportamiento apropiado en un familiar de los Reyes, que han mantenido serias desavenencias con los cónyuges de sus tres hijos. 

Los ‘pañales’ del duque de Palma

En el maratoniano interrogatorio judicial a Jaume Matas por esta causa, el político del PP animó al juez a desarrollar un fleco en el que aparecía el nombre de Urdangarín, consciente de las repercusiones de esa investigación. El sarao turístico-deportivo incluyó una rueda de prensa en la que Urdangarín compartió focos con el político del PP. La fiscalía anticorrupción considera que el entramado pudo servir para el desvío de fondos públicos.

Como contrapartida de sus excelentes relaciones con el entonces presidente de Baleares, el duque de Palma tuvo que aparecer en un programa del canal autonómico balear  IB3, donde se le obligó a ponerle unos pañales a un bebé en público. Quienes enfocan el escándalo desde su faceta cómica, esta humillación supone un castigo suficiente para un yerno del Rey.