Dos Palabras
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¿Quién mete la mano en el avispero del PP andaluz?
Este va a ser un fin de semana clave para el futuro del PP en Andalucía. Rajoy, Cospedal, y Arenas van a tomar la decisión definitiva
Este va a ser un fin de semana clave para el futuro del PP en Andalucía. El presidente del Gobierno y del partido, Mariano Rajoy, junto a la secretaria general, María Dolores de Cospedal, y el vicesecretario Javier Arenas van a tomar la decisión definitiva sobre la persona que debe liderar al partido en aquella comunidad y hacer frente al 'huracán Díaz'. Es más que probable que el próximo lunes esté tomada ya la decisión y que, si no el mismo lunes, a lo largo de la semana se anuncie el candidato/a que se presentará al Congreso Extraordinario de los días 1 y 2 de marzo en Sevilla, que será clausurado por Mariano Rajoy.
Hace tiempo escribí en este periódico que el perfil del candidato/a que necesitaba el PP andaluz pasaba por una ministra, la de empleo, Fátima Báñez. Desde entonces se ha escrito mucho, se han unido muchos nombres a la quiniela, algunas mujeres como la alcaldesa de Fuengirola, el alcalde de Córdoba, el secretario de Estado Juan Manuel Moreno y el ministro Arias Cañete. Pero Miguel Arias siempre estuvo descartado -no para los medios- porque su objetivo último es Europa, y a Juan Manuel Moreno, que hubiera sido un buen candidato pero que resumía en su persona las hostilidades entre Málaga y Sevilla, fue el propio Rajoy -también lo contamos en este periódico- quien le dijo que diera un paso atrás después de insinuar que estaba dispuesto. Y lo dio.
Todo parecía decantarse en un solo nombre, el de José Luis Sanz, pero se convirtió en el candidato de Cospedal y Zoido, y eso hizo que los barones provinciales próximos al expresidente del PP andaluz le dieran la espalda
El siguiente en darlo fue Nieto, el alcalde de Córdoba, porque en la dirección nacional nadie estaba dispuesto a perder una plaza tan importante como esa y que depende tanto de su continuidad como regidor. Todo parecía decantarse en las últimas semanas en un solo nombre, el de José Luis Sanz, secretario regional del PP y alcalde de Tomares. Pero Sanz, que empezó siendo un hombre próximo a Javier Arenas, se convirtió en el candidato de Cospedal y Zoido, y eso hizo que los barones provinciales próximos al expresidente del PP andaluz y vicesecretario general le dieran la espalda. Y, a partir de ahí, vino el lío.
Un lío al que en las últimas horas se ha unido, siempre tan oportuna, Esperanza Aguirre, pidiendo para los demás lo que nunca pide para ella misma -¿o no recuerda que después de anunciar que dejaba la política frenó en seco el intento de Génova de convocar un Congreso extraordinario en Madrid para buscar un nuevo presidente regional del partido?-. También Ana Botella, que no ve ocasión de buscar comparaciones que le permitan salvar su futuro político.
Lo cierto es que durante todo este tiempo Cospedal y Zoido han mantenido una línea de interlocución abierta y continua con Rajoy, y que cada vez que la secretaria general viajaba a Andalucía para intentar recomponer las naves lo hacía con el encargo expreso del presidente de cerrar la crisis abierta en el PP andaluz por la renuncia de Zoido a ser candidato a la Junta, pero allí chocaba siempre con la animadversión manifiesta de los 'hombres de Arenas'.
Y mientras eso ocurría, la actual presidenta de la Junta, sin hacer nada más que articular un discurso coherente, ha ido ganando espacio y ensanchando el margen que le separa de sus principales adversarios. Es más, el único obstáculo a que Susana Díaz convoque elecciones anticipadas viene de la propia crisis interna de su partido, que es lo único que puede impedir hoy que obtenga una mayoría absoluta, porque si no fuera así las elecciones anticipadas coincidiendo con las europeas estarían más que aseguradas pillando al PP con el pie cambiado.
Mujer, joven, con discurso y que no esté atrapada ni por familias de abolengo ni por familias de partido. Ese nombre sigue siendo el de Fátima Báñez
¿Quién puede hacer sombra a Susana Díaz? En el PP son conscientes de que ese reto es difícil hoy por hoy. Pero lo son también de que necesitan un perfil fácilmente contrastable con el de la presidenta andaluza. Mujer, joven, con discurso y que no esté atrapada ni por familias de abolengo ni por familias de partido. Ese nombre sigue siendo el de Fátima Báñez, aunque es verdad que en algún momento ella ha dicho que no quería porque le supondría un sacrificio personal muy grande.
Pero lo cierto a estas alturas es que es la única candidata de consenso: cuenta con el beneplácito de Rajoy, con el de Cospedal, es amiga de Soraya Sáenz de Santamaría y no es enemiga de nadie en el PP andaluz. Y Sanz podría incorporarse perfectamente a su candidatura. Además, si finalmente se toma esta decisión, no sería necesaria una crisis de Gobierno por su nombramiento porque tiene asegurada la continuidad como ministra al menos hasta las elecciones autonómicas. ¿Por qué? Bien fácil: Báñez no es diputada autonómica y la única manera de tener presencia mediática en Andalucía robándosela a Susana Díaz es su continuidad al frente de un ministerio en el que, además, solo se esperan buenas noticias a partir de este 2014. Y la tarea principal, es decir, la reforma laboral y los 'retoques' que ha pedido la UE ya están hechos, luego solo le queda recoger los frutos de su gestión y venderlos adecuadamente.
Dicho esto, caben otras dos opciones: la primera, que Arenas ceda y salga adelante el nombre de Sanz con una candidatura de consenso en la que el vicesecretario del PP propondría al nuevo secretario regional; y, la segunda, que aparezca -es lo menos probable, por no decir imposible- un 'mirlo blanco' en el que nadie había pensado. Incluso hay una tercera posibilidad que no es incompatible con ninguna de las anteriores: el congreso del PP andaluz es abierto, hasta el extremo de que cualquiera puede presentarse con tan solo 90 firmas de apoyo, lo cual no hace sino ahondar en la posibilidad de una sorpresa. ¿Alguien dijo avispero?
Este va a ser un fin de semana clave para el futuro del PP en Andalucía. El presidente del Gobierno y del partido, Mariano Rajoy, junto a la secretaria general, María Dolores de Cospedal, y el vicesecretario Javier Arenas van a tomar la decisión definitiva sobre la persona que debe liderar al partido en aquella comunidad y hacer frente al 'huracán Díaz'. Es más que probable que el próximo lunes esté tomada ya la decisión y que, si no el mismo lunes, a lo largo de la semana se anuncie el candidato/a que se presentará al Congreso Extraordinario de los días 1 y 2 de marzo en Sevilla, que será clausurado por Mariano Rajoy.