Voto del miedo… ¿esto es todo lo que se le ocurre al PP?

El presidente del Gobierno en funciones y candidato del PP a la reelección, Mariano Rajoy, ha abierto la precampaña electoral con un vídeo grabado en el Palacio de la Moncloa que, al margen de que pueda ser considerado como un uso partidista de las instituciones públicas, resulta bastante pobre desde el punto de vista estético -una imagen estática de Rajoy, al que solo se ve de frente y de perfil como si fuera un busto parlante-, y cuyo mensaje podría resumirse en un simple “o yo, o el caos”.

Desconozco de quién ha sido la idea del vídeo de marras, pero es para enviarle a hacer la campaña de algún candidato a presidente de comunidad de vecinos. Yo si fuera el PSOE, lejos de denunciar el vídeo a la Junta Electoral, lo que haría es colgarlo en todas las webs posibles. Pero el vídeo deja en evidencia que en el PP siguen sin haberse enterado de lo que ha pasado en España y que a la gente ya no se la puede convencer con argumentos tan precarios como el de “vóteme a mí, porque los demás son un desastre”.

Es verdad que desde las nuevas formaciones se ha banalizado hasta tal extremo la política que la argumentación se ha convertido en papel mojado, pero a pesar de haber pasado cuatro meses desde las elecciones de diciembre, siguen ofreciendo a los ciudadanos algo que el PP y el PSOE no pueden ofrecer: novedad. Sí, ya sé que me van a decir que en este tiempo se les ha visto el plumero y todo lo que ustedes quieran, pero para una enorme cantidad de gente siguen siendo los representantes de la nueva política, frente a la vieja. Que yo no me creo esa distinción -creo que hay buena y mala política, no vieja y nueva-, pero ese discurso ha calado entre los votantes, y el 26 de junio van a sacar un buen resultado e, incluso, está todavía por ver si no será mejor que el de hace cuatro meses, hasta el punto de que en la izquierda se produzca eso que se llama el 'sorpasso'.

Lo que podíamos esperar de partidos a los que se supone una experiencia más que suficiente es una solidez argumental que brilla por su ausencia

Precisamente por eso, lo que podíamos esperar de partidos a los que se supone una experiencia más que suficiente es una solidez argumental y una capacidad de sorprender que, sin embargo, brillan por su ausencia. Ni en un lado ni en el otro, seamos serios. Pero me resulta especialmente chocante que quien está llamado a convencer a los españoles de que él es la mejor opción para ser presidente del Gobierno, recurra a un argumento tan burdo como el empleado en el vídeo.

No sé a quién quiere convencer Rajoy. Su votante ya está decidido: esos 7,5 millones de votos que componen el suelo electoral del PP parecen inamovibles. ¿Al votante de Ciudadanos? Me temo que ese, lejos de lo que cree el PP, está tan convencido de su voto el 20 de diciembre que no va a cambiarlo ahora, entre otras cosas porque Ciudadanos no parece ser un peligro para la estabilidad del país, sino más bien todo lo contrario… Luego no creo que le compren el argumento a Rajoy. ¿Al votante de Podemos? A ese lo que conseguirá es convencerle aún más de votar a la formación morada, y no les digo nada después del acuerdo con Garzón para terminar de disolver IU.

El voto del miedo es el argumento de los cobardes, de los que no tienen nada que ofrecer. Fue el del PSOE de González cuando el socialismo se batía en retirada

Siempre he dicho que el voto del miedo es el argumento de los cobardes, de los que no tienen nada que ofrecer. Fue el que usó el PSOE de Felipe González contra el PP -¿se acuerdan del vídeo de los dóberman?- cuando el socialismo se batía en retirada, sin ideas, sin proyecto, acosado por la corrupción, y el PP de Aznar asomaba como lo nuevo, como lo ilusionante… Y al final le pasó factura al PSOE. A la gente, y más en circunstancias como estas, hay que convencerla con ideas, con proyectos… Con audacia.

Y eso es lo que le falta a un PP anquilosado que no permite que sus actores más jóvenes tomen de verdad las riendas del partido. Hay que atreverse a ofrecer reformas, y no solo subvenciones al primer empleo. Eso ya está muy visto, y la gente no lo compra. Lo que quieren los ciudadanos es sentir que los partidos han entendido el mensaje de que hay que cambiar las cosas. El PP tiene mes y medio para corregir el rumbo, pero me temo que va a seguir insistiendo en el voto del miedo.