El doctor Fuentes (Operación Puerto) quiere hacer caja: pide 300.000 dólares por una entrevista

El famoso "doctor" Eufemiano Fuentes, principal acusado de la Operación Puerto, la mayor trama de dopaje deportivo descubierta en España, está de nuevo en campaña, necesitado de hacer caja. La semana pasada reapareció en Aranjuez como si de una gran estrella del deporte se tratara, rodeado de guardaespaldas y por sorpresa, para, en el marco del curso sobre medicina deportiva organizado por la Universidad Rey Juan Carlos, disertar sobre el tema, no sin antes exigir la retirada del aula de las cámaras de televisión presentes (dicen que casi una veintena).

El profesor Fuentes se ha puesto en marcha, ahora que también lo ha hecho el Tour de Francia (el ciclismo es su especialidad), y antes de que arranque la Vuelta a España, dispuesto a rentabilizar sus saberes con una entrevista en exclusiva y bien pagada. Desde su detención y puesta en libertad, en mayo de 2006, Fuentes no ha realizado ninguna declaración a ningún medio, excepción echa de la que, en junio del pasado año y previo pago, concedió a José Ramón de la Morena (Cadena SER), con quien se comprometió a no abrir la boca durante un tiempo. ¿Ha vencido ya el plazo?

El caso es que Fuentes, como todo hijo de vecino, necesita dinero y para ello está dispuesto a conceder una entrevista en exclusiva con una televisión, a ser posible mexicana o argentina (donde el interés por el ciclismo es más bien escaso), televisión que podría vender los derechos de la misma a cadenas de todo el mundo.

Y, ¿por qué México o Argentina? Porque en ambos países hay cadenas con cobertura en otros muchos de la zona, tal que USA en el caso mexicano, lo que podría facilitar la financiación de la compra de la interview al poder dividir su coste entre varios países. Además, el doctor se sentiría más relajado y tranquilo lejos de avispero español, donde su presencia mueve siempre al escándalo.

Y, manos a la obra, la empresa que posee los derechos de imagen del mago de la Operación Puerto se ha puesto ya en contacto con varias cadenas de ambos países, dispuestas a pagar a precio de oro una entrevista con el famoso doctorcito español. He aquí lo que vale la exclusiva:

a) Cuatro pasajes de avión en primera clase (Madrid- México-Madrid, o Buenos Aires, en su caso), para el profesor Fuentes, su mujer, su abogado y el dueño de la firma propietaria de los derechos.

b) Tres suites en un hotel de 5 estrellas durante una semana.

c) 300.000 Dólares USA (50% a la firma del contrato, y el otro 50% antes de la grabación del programa).

Durante la semana de estancia en México D. F. o Buenos Aires, Fuentes se compromete a contar off the record al periodista que hubiera de entrevistarle, que en cualquier caso deberá ser un profesional de prestigio, “todo lo que tiene que saber y no se puede contar sobre la vida y milagros de deportistas de élite con las sustancias prohibidas, tanto a nivel mundial como local”.

A cambio, la cadena dispuesta a comprar la entrevista se comprometería, por su parte, a aceptar la propuesta de Fuentes tanto en lo que afecta al formato cómo a las imágenes en off que se ofrecerían en el programa, así como a pactar previamente las preguntas a formular por el entrevistador, aunque el doctor se encargaría de que la cosa no quedara demasiado light.

Y es que el doctor tiene un código deontológico que no le permite dar nombres de deportistas concretos, pero sí decir cosas como que “entre mis clientes ha habido jugadores de fútbol de primer nivel, que jugaban en equipos españoles y que han participado en mundiales vistiendo la camiseta de México”, o en su caso, Argentina. La entrevista se grabaría cinco días después de la llegada del profesor al país, una vez asumidos todos estos requisitos.

El doctor está dispuesto a viajar en cualquier momento, después de que, hace unos días, el juzgado le devolviera el pasaporte. Queda por saber si en México o Argentina hay alguna cadena interesada en la ganga. El equipo de Fuentes, eso sí, es un maestro vendiendo la mercancía: “El interés que despierta el doctor en toda Europa es enorme: no hay día que ante su casa en Canarias no aparezca alguna cámara de televisión, ya sea española, alemana, francesa o italiana. Incluso de USA vienen”. Un fenómeno el doctor.