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¿A quién le importa el estado de la Nación? Los políticos convierten el Congreso en una peña de fútbol
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¿A quién le importa el estado de la Nación? Los políticos convierten el Congreso en una peña de fútbol

Miércoles 13 de mayo. Segunda jornada del debate sobre el estado de la Nación, el primero desde que José Luis Rodríguez Zapatero fue reelegido en 2008.

Miércoles 13 de mayo. Segunda jornada del debate sobre el estado de la Nación, el primero desde que José Luis Rodríguez Zapatero fue reelegido en 2008. España atraviesa una situación crítica con más de cuatro millones de parados. Pero un acontecimiento de rango superior eclipsa la actividad parlamentaria: Barcelona y Athletic de Bilbao se juegan la final de la Copa del Rey.

En las escaleras de la fachada principal del Congreso tuvo lugar un hecho insólito. Los seis diputados del PNV (Josu Erkoreka, Pedro Azpiazu, Aitor Esteban, Emilio Olabarria, José Ramón Beloki y Joseba Agirretxea) posaban con uno de los famosos leones enarbolando banderas, bufandas y camisetas del Athletic. Beloki, miembro de la Mesa del Congreso, ironizó: “La principal resolución que vamos a presentar es ésta: 3-0”. Mientras, el portavoz de CiU, Josep Antoni Duran i Lleida, no dudó en poner en juego su bien ganada credibilidad durante su duelo con Zapatero, y se prestó a posar ante decenas de cámaras con una camiseta del Barça. Más moderado, pronosticó un 1-0 para su equipo.    

Los medios de comunicación buscaron con avidez la supuesta cara amable de los políticos aficionados al fútbol, quizá para contrarrestar los dos días de adusto debate en la Cámara. A ello se prestaron los diputados, que agradecieron que los periodistas les cuestionaran sobre su apuesta para la porra de la final, en lugar de por el modelo productivo o el desempleo. Así, Mariano Rajoy vaticinó que habría prórroga, y Zapatero se negó a mojarse, porque los dos equipos llegaban “muy fuertes”.

Pero el show todavía no había terminado. El flamante secretario general del Grupo Socialista, Eduardo Madina, y la ministra de Defensa, Carme Chacón, posaron como si fueran los nuevos fichajes de Athletic y Barça. Chacón, con una camiseta de Messi, y Madina, con otra del club rojiblanco, aunque anónima. Ambos pronosticaron un 3-1, pero cada uno barriendo para su casa. Madina y Chacón, los mimados de Zapatero en el PSOE, demostraron que, por ahora, su rivalidad se queda en el ámbito futbolístico.

La final hizo que figuras republicanas e independentistas se pasaran, por una noche, al bando monárquico. Fue el caso de Joan Puigcercós, presidente de ERC, y Ernest Benach, presidente del Parlamento de Cataluña. Ambos se encontraban entre los invitados de honor que asistieron al partido. Benach nunca ha ocultado su gran afición por el Barça. El presidente del Parlamento catalán es tan forofo que cuando juega su equipo partidos de la Champions, -que casi siempre caen en miércoles, día de pleno en el hemiciclo catalán- suspende la sesión a las 19.00h para poder llegar con tiempo al Camp Nou, o si juegan fuera de casa, ir hasta su domicilio de Reus para poder acomodarse en su sofá y verlo por la televisión tranquilamente. 

Pero los independentistas no fueron los únicos que quisieron acudir a la final. Y es que, en plena campaña electoral por las elecciones europeas, salir en la foto es casi más importante que tener un buen programa. Toda la plana mayor se encontraba allí, desde el presidente de la Generalitat, José Montilla -que vistió su viaje al fútbol con una reunión relámpago con el presidente valenciano Francisco Campos-; pasando por el presidente de CiU, Arthur Mas, o la presidenta del PP en Cataluña, Alicia Sánchez-Camacho. Incluso se desplazaron al campo los candidatos de CiU y PP a las europeas, Ramon Tremosa y Santiago Fisas, respectivamente. Sólo les faltó afirmar que lo que el fútbol unió, que no lo separe el Estatut.

Miércoles 13 de mayo. Segunda jornada del debate sobre el estado de la Nación, el primero desde que José Luis Rodríguez Zapatero fue reelegido en 2008. España atraviesa una situación crítica con más de cuatro millones de parados. Pero un acontecimiento de rango superior eclipsa la actividad parlamentaria: Barcelona y Athletic de Bilbao se juegan la final de la Copa del Rey.