La Reina Sofía visita a su ex consejero real en la UVI de la clínica Ruber

La Reina Doña Sofía ha acudido rápidamente a la clínica Ruber después de enterarse de que Sabino Fernández Campo, su fiel consejero, había sido operado de urgencia el pasado lunes. El que fuera jefe de la Casa del Rey comenzó a sentirse mal durante el domingo debido a problemas intestinales que viene arrastrando desde hace tiempo. De hecho, la del pasado lunes fue la tercera intervención de las últimas semanas.

María Teresa Álvarez, su esposa, resta importancia a la situación y asegura que la enfermedad de Fernández Campo no reviste gravedad y que en los próximos días será dado de alta.

La Reina, que estuvo en la clínica casi una hora, pidió conversar en persona con la propia María Teresa Álvarez, a quien le transmitió el cariño y la preocupación que siente la Familia Real ante la salud del que fuera el mejor confidente de Zarzuela

A la Ruber acudió también el presidente de Mensajeros de la Paz, el Padre Ángel, que tiene un fuerte vínculo con el matrimonio. No en vano, él fue el sacerdote que les unió ante el altar. Hasta el centro sanitario se han desplazado también un sinfín de personalidades y amigos íntimos del militar asturiano que cumplirá 92 años el próximo mes de marzo.

El general ostenta el título de Caballero del Real Cuerpo de la Nobleza del Principado de Asturias, y forma parte del jurado y del patronato de los Premios Príncipe de Asturias. Cada temporada acude al teatro Campoamor a compartir el día con los premiados y con sus viejos camaradas.

Los últimos consejos al Rey

Durante los veranos, Fernández Campo suele participar en los cursos de La Granda que se celebran cerca de la localidad de Avilés.  Y allí tuvo lugar una de sus intervenciones más sonadas, cuando dijo en un tono muy serio: “En momentos en que las aspiraciones de algunas autonomías se desbordan y presentan deseos separatistas o independentistas, es muy aconsejable que el Rey intervenga de algún modo y deje constancia de la necesidad de mantener la unidad y la integridad de la patria”.

Asimismo, el veterano consejero resaltó los mandamientos esenciales para ejercer como monarca moderador: “Información, preparación y anticipación”. El general retirado insistió en la necesidad de que el Rey este “bien informado de cuanto ocurre en España y en el extranjero” y subrayó su papel como mediador en la política nacional y en las relaciones exteriores; resaltando su labor en América Latina y en los países árabes. “Con prudencia, dado las limitaciones constitucionales pero con firmeza, el Rey ha de anticiparse a la toma de decisiones…”.