Sebastián tarda 11 meses en responder a las dudas sobre su plan para reciclar bombillas

La opacidad está caracterizando la campaña de reparto de bombillas de bajo consumo promovida hace un año a bombo y platillo por el ministro Miguel Sebastián. Según el portavoz del Grupo Popular en la Comisión de Industria, Antonio Erías Rey, “la iniciativa no beneficia a los fabricantes españoles, ya que la mayor parte vienen de China”, y del reparto de 6 millones previsto en 2009 sólo se ha efectuado el 20%, con lo que las oficinas de Correos se han convertido en almacenes de bombillas. Tampoco se ha programado un sistema de recogida cuando se funden, necesario por contener mercurio, nocivo para la salud.

 

El portavoz del PP presentó en abril del año pasado una batería de preguntas escritas sobre el coste, la fabricación y el reparto de las lámparas de bajo consumo con las que se pretendía ahorrar un 20% de la energía que consumen los hogares españoles, en línea con el mandato de la Unión Europea. También el diputado de IU Gaspar Llamazares realizó varias preguntas al respecto y ambos han tenido que esperar once meses la respuesta.

Sebastián no les aclara por qué las lámparas se importan de China, en detrimento de los fabricantes españoles. En su repuesta a al PP dice que el primer contrato para suministrar 500.000 bombillas y repartirlas en La Rioja y Navarra se adjudicó a empresas con sede en España, “con independencia de que la fabricación de sus productos se realice en todo o en parte en otros países”.

Las empresas adjudicatarias fueron Philips Ibérica SAU, Osram SA, Silvanya SSH, GEE Lighthing y Lámparas Especiales LAES. La primera importa lámparas de China y ha presionado a la Comisión Europea para que levante los aranceles. La única fábrica española, Cegasa, no se ha visto favorecida por la iniciativa del Gobierno, pese a que su plantilla, de 1.300 trabajadores, ha sufrido ya dos regulaciones de empleo.

El segundo contrato, para suministrar 6 millones de lámparas de bajo consumo, fue adjudicado por concurso público a la Sociedad Ibérica de Construcciones Eléctricas (SICE), del grupo ACS que preside Florentino Pérez. Aunque Sebastián no concreta el coste de las adjudicaciones y de la campaña, el gasto previsto era de 24 millones de euros en 2009, y de una cantidad similar este año.

La previsión de entregar una bombilla por hogar en 2009 no se ha cumplido, las lámparas no han llegado ni al 20% de las familias y cuando se falla en lo más elemental, será muy complicado cumplir la previsión de ahorro y eficiencia energética comprometida ante la UE.