La tacañería del Getafe: hasta Alfonso pasa por taquilla en el campo al que da nombre

En el mundo del fútbol conviven dirigentes modernos con otros, diríamos, más arcaicos. El carismático presidente del Getafe CF, Ángel Torres, es de los segundos. Aunque sus técnicas de dirección son efectivas (sólo hay que ver dónde ha colocado a este modesto equipo del sur de la Comunidad de Madrid)... también es verdad que son muy peculiares.

Torres no es ningún manirroto. Al contrario: alegrías económicas, las justas. De hecho, desde que el Getafe está en la élite, su política de entradas ha creado mucha polémica entre los hinchas. El empresario toledano piensa que lo mejor es poner precios caros. Caiga quien caiga. 

La idea más brillante la tuvo en la primera de las dos finales de Copa consecutivas que disputó el Getafe. La marea azulona estaba entusiasmada después de remontarle al Barcelona con un histórico 4-0. Y Torres, con su visión empresarial, pensó en convertir ese entusiasmo en dinerito fresco para la caja. Por ello, encargó miles de bufandas del Getafe a 2,5 euros de coste de producción cada una y obligó a comprarlas a todos los aficionados que adquirieran una entrada para aquella final de 2007 en el Santiago Bernabéu. Se las vendía a 10 euros. Así, Torres consiguió 7,5 euros limpios por cada entrada, aparte de la taquilla.

Las escenas más graciosas de aquellos días se vieron en las oficinas del club. Los jugadores, a quienes también se les obligaba a pagar por cada entrada, se marchaban con docenas de bufandas sin entender nada ni saber qué hacer con ellas. Para más INRI, aquella final se jugó bajo el calor veraniego que ya a finales de junio suele hacer en Madrid, y donde, la verdad, una bufandita puede llegar a ser hasta molesta.

Esto fue excepcional, sí, pero hay ejemplos más cotidianos. Como obligar a los socios a pagar 50 euros para un partido de las primeras rondas de Copa del Rey o Europa League. Este hecho (unido al frío y a la hora del encuentro) ha motivado en alguna ocasión que el Coliseum Alfonso Pérez haya registrado entradas más típicas de Tercera División que de una competición nacional o internacional. Pero Ángel Torres ni se inmuta.

En la temporada 2007/08, cuando el 'SuperGetafe' alcanzó las semifinales de la Copa de la UEFA (los partidos más importantes que jamás ha jugado el club), Torres ideó que todo el que quisiera comprar una entrada debía adquirir otra sí o sí. Se supone que era para evitar la reventa…

Cobra 20 euros a entrenadores del fútbol base

Pero el encabezonamiento mayor del presidente del Getafe tiene que ver con las invitaciones para los partidos de casa. De hecho, se podría decir que no existen. Muchos son los empleados del club que han intentado hacerle entrar en razón, pero Torres lo tiene claro: todo el mundo paga.

Los entrenadores de las categorías inferiores deben abonar 20 euros para presenciar in situ algún partido importante, para asombro de los recién llegados al club. Y muchos son los casos de exjugadores del Getafe o profesionales de otros equipos (cuando estas invitaciones suelen ser recíprocas en la mayoría de campos de España si el partido lo permite) que también deben pasar por taquilla y comprar un ticket.

Sin duda, la mejor anécdota tuvo lugar cuando Alfonso Pérez Muñoz (exjugador de Real Madrid, Barcelona y Betis), natural de Getafe y que da nombre al estadio del conjunto azulón a pesar de no haber defendido nunca sus colores, también tuvo que pasar por taquilla para entrar en 'su' campo. Lo dicho: Ángel Torres es un dirigente más que peculiar.