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Renfe se desespera con los buscadores de internet que mandan en Rusia y China
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Renfe se desespera con los buscadores de internet que mandan en Rusia y China

Internet es algo más que Google. Lo sabe bien Renfe, el operador público de servicios ferroviarios, que desde el pasado verano mantiene una particular cruzada con

Internet es algo más que Google. Lo sabe bien Renfe, el operador público de servicios ferroviarios, que desde el pasado verano mantiene una particular cruzada con las redes. La compañía ha tratado de evitar que el trágico accidente de tren ocurrido el pasado verano penalice a toda una industria de la que España es referente internacional a través del producto AVE.

Evitar el rastro digital de ese luctuoso episodio se ha convertido en una tarea de comunicación primordial. En principio, el primer esfuerzo se ha concentrado en conseguir que cualquier búsqueda con los términos AVE y España en el buscador Google no haga referencia al accidente de Galicia. Un objetivo estratégico que un buen trabajo de posicionamiento puede lograr.

El problema para Renfe ha ido más allá. Aunque se asocia Google a internet, sólo es la principal red de referencias online, pero existen otras. Precisamente, dos de los países donde España tiene comprometidos más intereses con el desarrollo de la alta velocidad, como Rusia y China, poseen operadores nacionales que dominan el mercado por delante del gran hermano estadounidense.

Durante los meses posteriores, el buscador ruso Yandex y el chino Baidu referenciaban en sus motores de búsqueda los términos España y AVE a contenidos que hacían mención al accidente de Galicia en el que fallecieron 78 pasajeros. Conseguir romper esa relación, sin tener los conocimientos que se comparten respecto a Google, supuso un quebradero de cabeza para Renfe.

La vinculación del accidente de Santiago de Compostela a la alta velocidad española generó una vulnerabilidad competitiva para toda la industria nacional. Aunque parezca gratuito, el resto de competidores emplean estrategias de inteligencia económica para desacreditar las candidaturas de terceros. Algunas de esas actuaciones se libran de forma invisible a través de internet.

Internet es algo más que Google. Lo sabe bien Renfe, el operador público de servicios ferroviarios, que desde el pasado verano mantiene una particular cruzada con las redes. La compañía ha tratado de evitar que el trágico accidente de tren ocurrido el pasado verano penalice a toda una industria de la que España es referente internacional a través del producto AVE.

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