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El PP constituye hoy el equipo de campaña... pero sin candidato

El PP constituye su comité de campaña para las europeas y ya ha puesto en marcha el programa electoral pero Rajoy no da pistas sobre el candidato

Mariano Rajoy se toma su tiempo para las decisiones de personal (nombramientos, destituciones y cambios de destino), pero el tiempo corre y el PP tiene que adelantar trabajo. Ya explicó su presidente en público que no hará cambios en el Gobierno antes de Navidad y que después, si puede, tampoco. Otra cosa es el partido. Hoy mismo se constituye en la sede nacional del PP el comité de campaña para las elecciones europeas sin que el jefe del Ejecutivo haya dado pistas siquiera de a quién pondrá al frente de las listas, si seguirá Jaime Mayor Oreja, recurrirá a algún ministro o ministra, un veterano de la dirección o si simplemente correrá el escalafón.

El programa para los comicios también está encargado. Desde Génova han pedido borradores e informes al Grupo Parlamentario en la Eurocámara y opinión e ideas a los barones autonómicos de más peso. Está todo en marcha porque faltan menos de cinco meses para los comicios (son en mayo), cuatro en la práctica si se descuenta la Navidad.

El equipo de campaña, elegido por María Dolores de Cospedal y sancionado por Rajoy en el comité ejecutivo, es bastante obvio en su composición y no da pistas sobre las intenciones de su presidente. Lo encabeza Carlos Floriano como coordinador general, lo lógico en su calidad de vicesecretario de organización. El PP vuelve a contar para la campaña con Esteban González Pons (Programas) y también repite funciones Juan Carlos Vera, más de dos décadas en el área de organización. Vicente Tirado, hombre de Cospedal y responsable del área electoral, se estrena en el equipo. Javier Arenas, ahora vicesecretario de Política Autonómica y Local, se queda al margen.

En el Partido Popular están casi acostumbrados a la particular forma de administrar los tiempos de sus jefes. A Aznar también le gustaba apurar los plazos para cualquier nombramiento y la filtración o difusión pública de aspiraciones a algún cargo conllevaba a sus dirigentes la pena de estancamiento en el escalafón. Pero Rajoy lo supera. En las últimas elecciones europeas, las de mayo de 2009, esperó al 4 de enero, después de Navidad y antes del Día de Reyes, para anunciar que iba a proponer a Mayor Oreja para encabezar las listas. Envió un SMS a los miembros del comité ejecutivo con la noticia. El candidato se había enterado unos días antes, en una fecha indeterminada de diciembre.

Con esos precedentes, en el PP descartan que antes de Navidad tengan candidato para las europeas. Hay quien apuesta incluso a que la decisión se pueda retrasar aún más que hace cinco años, hasta los prolegómenos de la Convención Nacional del partido prevista para febrero. El problema interno abierto con las asociaciones de víctimas del terrorismo y las consecuencias de la doctrina Parot apuntalan la continuidad de Mayor Oreja, según interpretan en fuentes del PP. Pero falta conocer la decisión del jefe. De momento, programa y campaña se ponen en marcha sin que sus responsables puedan adivinar si habrá cartel de continuidad absoluta, relativa con algún ministro muy conocido, o cambio claro con dirigentes descolocados, de los que se quedaron en el banquillo en 2011 o los que tuvieron todo tipo de cargos en la etapa de Aznar.

Mariano Rajoy se toma su tiempo para las decisiones de personal (nombramientos, destituciones y cambios de destino), pero el tiempo corre y el PP tiene que adelantar trabajo. Ya explicó su presidente en público que no hará cambios en el Gobierno antes de Navidad y que después, si puede, tampoco. Otra cosa es el partido. Hoy mismo se constituye en la sede nacional del PP el comité de campaña para las elecciones europeas sin que el jefe del Ejecutivo haya dado pistas siquiera de a quién pondrá al frente de las listas, si seguirá Jaime Mayor Oreja, recurrirá a algún ministro o ministra, un veterano de la dirección o si simplemente correrá el escalafón.

Mariano Rajoy Jaime Mayor Oreja