Caño cede ante Florentino: Diego Torres, apartado del Real Madrid

Diego Torres, periodista encargado de cubrir la información del Real Madrid para 'El País', no fue convocado para la final de Milán. Se trata de una medida del director del periódico, Antonio Caño, para congraciarse con Florentino Pérez, que lleva tiempo exigiendo la destitución del periodista. En este caso, el detonante, enésimo en la relación entre Torres y el constructor, fue un tuit en el que Torres tildaba a Álvaro Arbeloa de "artista de la genuflexión", en referencia a la actitud servil que ha mantenido el lateral, sin minutos en los últimos tres años, para con la directiva blanca.

Hay artistas del balón y hay artistas de la genuflexión, como Arbeloa: pic.twitter.com/EgTtniHzgN

El tuit dio argumentos a Caño, blanco y habitual de los palcos del Bernabéu, para dar el gusto a Florentino en una vieja cruzada: decapitar a Diego Torres. El presidente del Real Madrid ha llegado a acusar a Torres en público de escribir ficción -"a usted le gusta mucho la novela, como tengo la ocasión de ver cada vez que hace un artículo", le dijo en una rueda de prensa-. El periodista se ha caracterizado por firmar algunas de las crónicas más ácidas sobre el Madrid de los últimos años. Algunas de ellas, como 'El baño de Red Bull', llegaron incluso a generar desmentidos ordenados por un Mourinho paranoico en plena búsqueda de topos.

En poco más de dos años, Caño ha cedido en una pretensión, la de alejar a Torres del Real Madrid, que sus predecesores, Jesús Ceberio y Javier Moreno, sortearon durante una década. Después del polémico tuit, Torres sí cubrió el final de Liga, y fuentes de la redacción apuntan que acudirá a cubrir la Eurocopa y los Juegos de Río para ser relevado definitivamente de la información del Real Madrid después del verano. En el mismo edifico de 'El País' está el 'As'. Y su director, Alfredo Relaño, admite una mala relación con Florentino. Decía José María García, que de presiones sabe un rato, que lo importante no es quién llama para pedir tu cabeza, sino quién descuelga el teléfono.