Évole se cita con Pedro Sánchez para un programa sobre los militantes del PSOE

El diputado Pedro Sánchez romperá su largo silencio mediático el próximo domingo en La Sexta con Jordi Évole, y en dura lid televisiva frente a los 'triunfitos' del reencuentro de OT. La entrevista fue anunciada por el propio presentador en Twitter, tras concluirse la primera jornada del debate de investidura, y se llevará a cabo tras la elección de Mariano Rajoy como presidente del Gobierno, este mismo sábado. Un encaje de fechas que obligará al equipo de 'Salvados' a trabajar contrarreloj para tener la cinta lista para la emisión el domingo por la noche.

No hace mucho, el propio Évole aseguraba que en esta temporada no abordaría temas políticos, salvo que Rajoy le concediese una entrevista en exclusiva. Pero tener en antena al defenestrado Pedro Sánchez bien vale una excepción. El exlíder del PSOE no ha ido a ninguna tele desde que el pasado 28 de septiembre, 17 miembros de su ejecutiva dimitieron por mandato de los barones rebeldes y tuviera que anular, 'in extremis', la entrevista que tenía apalabrada con Pedro Piqueras para el informativo de la noche de Telecinco. Pocos días después, un tenso comité federal, que pasará a la historia del drama socialista, le cortaba la cabeza y, con ella, sus aspiraciones de liderar una mayoría alternativa a la del PP en el Congreso de los Diputados.

Pues bien, así las cosas, el programa del próximo domingo se presenta con un aliciente especialmente morboso. Sánchez podrá contestar a Felipe González y a cuantos han contribuido a su caída, y aclarar cuáles son sus planes de futuro a partir de ahora. La charla con Évole es el plato fuerte de un programa especial que 'Salvados' dedicará a analizar la militancia del PSOE y cómo han vivido las bases este giro copernicano del “no es no” a la abstención. Tampoco se sabe, por cierto, si Sánchez acudirá al programa como diputado raso del Congreso o como afiliado del partido, si es que opta, finalmente, por abandonar su escaño en las Cortes.

Máxima expectación, por tanto, que augura un dato de 'share' muy llamativo para La Sexta. Mientras tanto, el equipo del programa se está centrando ahora en buscar una localización adecuada para rodar la entrevista. A Évole le gustaría, en su línea de estilo, que se pudiera hacer en un espacio alejado de la imagen institucional de la política. En una casa, por ejemplo, o en un bar o un restaurante. Quizá, quién sabe, se recurra a esos dependientes del Carrefour de Pozuelo con los que Sánchez debatió en verano sobre si había que abstenerse o no ante Mariano Rajoy.

Sea como fuere, todos esos detalles están pendientes aún de confirmarse con el propio Sánchez, a quien ayer se pudo ver con una imagen pétrea sentado en su escaño de la cuarta fila del Congreso. Serio, sin mirar al presidente del Gobierno ni al orador de su partido, quien fuera su estrecho colaborador, Antonio Hernando, y sin aplaudir el discurso con el que su partido ha traicionado la hoja de ruta del no a toda costa.