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El Confidente
Por
Escotet ya sabe dónde aprieta el zapato en España
Aunque ha tardado, Escotet se ha rodeado de un par de buenos anfitriones y lobistas para abrirse paso y llegar a las alfombras rojas de nuestro país
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Lleva poco tiempo en nuestro país, pero se ha dado cuente de cómo funcionan las cañerías del sistema. El empresario venezolano Juan Carlos Escotet todavía descubre con asombro cuáles son los usos y costumbres de esta España y a medida que pasa el tiempo más convencido queda de las similitudes con su originaria y tumultuosa Venezuela.
No es la tensión política, con el frente secesionista de Cataluña, lo que más le sorprende. Al presidente y propietario de Abanca, el banco gallego que compró por sorpresa frente a La Caixa a finales de 2013, le ha costado entender cómo en territorio de Europa, con toda la simbología que eso implica, el sistema funciona al son los compases que susurran unos pocos.
Aunque ha tardado, Escotet se ha rodeado de un par de buenos anfitriones y lobistas para abrirse paso y llegar a las alfombras rojas de nuestro país. Basta pisar los salones adecuados y completar la agenda del móvil con dos docenas de contactos adecuados para saber qué se cuece en tiempo real entre las cuadras que separan el Congreso del palacio de La Bolsa.
Una vez conseguido esto, el financiero venezolano siente que ya puede desenvolverse con garantías en nuestro ‘sistema’. Tal es así, que hasta se ha animado a participar en la puja para comprar Liberbank. Ya es uno más y se siente integrado en la madre patria. No hay nada como sentirse parte del paisanaje para disfrutar de las comodidades del dinero.
Lleva poco tiempo en nuestro país, pero se ha dado cuente de cómo funcionan las cañerías del sistema. El empresario venezolano Juan Carlos Escotet todavía descubre con asombro cuáles son los usos y costumbres de esta España y a medida que pasa el tiempo más convencido queda de las similitudes con su originaria y tumultuosa Venezuela.