Duelo de pines y corbatas en la toma de posesión del nuevo Gobierno

Los complementos de la vestimenta sirven a veces para mandar mensajes subliminales y otras, no tan subliminales. Ayer, día de la jura y promesa de cargos en el primer Gobierno de coalición de la democracia española, parecía un momento apropiado para ello.

José Luis Ábalos, el anterior ministro de Fomento y ahora de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, tomó posesión ayer de su nueva cartera ataviado con una corbata azul con rayas de la bandera de España. Y en los puños de la muñeca, sendos gemelos circulares, también decorados con colores de la rojigualda.

Con las críticas que ha recibido Pedro Sánchez por pactar su investidura con ERC, cuesta pensar que su mano derecha en el partido deje estas cosas a la casualidad. Y no solo por su reacción al ser preguntado por su corbata patriótica. Lejos de hacerse el sorprendido, él mismo ha enseñado los gemelos. Toda una declaración de intenciones de uno de los pesos pesados del Gobierno... Aunque por ahora no haya logrado ninguna vicepresidencia.

Quien sí la ha conseguido ha sido Pablo Iglesias, quien también decidió tomar posesión de su cargo con un complemento cargado de simbolismo. El mismo que escogió Alberto Garzón, ministro de Consumo. Ambos optaron por ir con americana, sin corbata y con un pin en la solapa con forma de triángulo rojo invertido. Se trata de una insignia que los nazis ponían a quienes pertenecían a partidos de izquierda y que en la actualidad se usa como símbolo antifascista. No es la primera vez que Garzón lo usa. En 2016, con motivo del aniversario de la liberación de Mauthausen, ya lució el triángulo.

Insignias distintas, mensajes distintos, sensibilidades distintas y probablemente destinatarios distintos. Toda una metáfora de la legislatura que viene. Larga, corta o mediopensionista, lo más probable es que no nos aburramos.