El infiltrado de la boda de Tamara al que le gusta Sánchez

Por si la campaña electoral no estuviera suficientemente complicada para la izquierda, ayer salió la segunda entrega del ¡Hola! sobre la boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva, repleto de funestos signos sobre un inminente cambio de régimen en España...

En efecto, hay que saber leer las señales.

El lunes 10 de julio de 2023, los quioscos se quedaron sin ejemplares del primer despliegue del ¡Hola! A España solo le preocupaba el bodorrio. Bloque conservador al alza. Como nada ocurre por casualidad, esa noche, Alberto Núñez Feijóo se impuso por sorpresa a Pedro Sánchez en el cara a cara.

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¿No entiende usted la relación entre una cosa y otra? Escuche: dentro del ¡Hola! hay varios documentos escalofriantes que reflejan que España ya está a otra cosa:

1) Los pajes de Tamara e Íñigo van vestidos con pololos tiroleses (lo que Woody Allen llamaría niños disfrazados para invadir Polonia, y el ¡Hola!, siempre ducho en el arte del eufemismo, “trajes de inspiración austriaca”).

2) En la página 43 de la primera parte del serial, hay una foto de Tamara “sentada frente al tocador, con un espejo trifold, con el que se preparó para el gran día, ante la mirada atenta de su caniche abricot, Jacinta”.

Un caniche. Jacinta. Poca broma.

Lo que no cuenta la publicación es que Jacinta lleva puesto un indescriptible lazo blanco. En realidad, Jacinta no mira a Tamara, sino al vacío, es decir, al futuro. ¿Qué ve el caniche de Tamara? ¿Que si gana la derecha habrá más galletitas prémium para perritos como ella?

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Pero el caniche de Tamara tiene el corazón partío. Esconde un terrible secreto: le entristece que el primer miembro de su raza que llega a presidente del Gobierno —Perrosanxe— esté en apuros. Durante los últimos años, Jacinta ha mantenido en silencio su admiración por Perrosanxe porque, según ella, "no quería perturbar al ama Tamara".

Los perros enanos, en definitiva, también tienen sentimientos. Hablemos claro: aunque ella se sonroje solo de pensarlo, Jacinta está enamorada de Perrosanxe... pero un caniche de la alta sociedad no debería mezclarse con chuchos socialistas, batasunos o bolivarianos.

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En el nuevo número de ¡Hola! se anuncia en portada: “La entrevista más esperada. Íñigo habla por primera vez y libera sus sentimientos”.

Pues bien, doblo la apuesta. La entrevista más esperada. La caniche Jacinta habla por primera vez y libera sus sentimientos:

Habla Jacinta (a corazón abierto):

"Mis sentimientos hacia Perrosanxe son profundos, pero debo esconderlos por lealtad a mi ama. Guau guau. Además, he vivido momentos inolvidables en esta mansión. He visto a don Mario Vargas Llosa leer en alto sus libros en francés durante las comidas (también en las meriendas y en las cenas). He visto a la madre de mi ama, la señora Isabel Preysler, escuchar baladas de Julio Iglesias mientras suspiraba melancólica. He visto a las señoras de la casa hacer espiritismo con Isabelita Perón, y hablar con el archiduque Francisco Fernando de Austria desde el más allá. He visto a señoras con cardados hacer trenecitos en el salón mientras escuchaban El chachachá del tren de El Consorcio. He visto baldosas de Porcelanosa tan brillantes que reflejaban todo el sistema solar. He visto al ama Tamara firmar contratos con el ¡Hola! para todas las primeras comuniones de la familia hasta 2073. Todos estos momentos se perderán como lágrimas en la lluvia... Nada va a volver a ser igual. Barrunto que Perrosanxe va a salir por una puerta e Íñigo Onieva va a entrar por la otra. El señorito Onieva tiene turbiedad en la mirada. No me gusta. Pero no se lo voy a decir al ama Tamara, porque no la quiero perturbar. ¡Guau!".