De Bertín y su ‘gilipollez’ del 15-M al ‘Mohamed’ de Duran Lleida

El día en que numerosas empresas pasaban sesudos informes sobre la influencia de los políticos en Twitter y otras redes sociales, con mediciones exhaustivas de tuits, seguidores, influencia, palabras más repetidas, etc, los usuarios de la red volvían a dictar sentencia y demostraban que por mucha maquinaria que emplean los ‘cerebros’ de los candidatos por intentar posicionarse no hay manera de luchar contra las ocurrencias. Ayer, ni @ConRubalcaba ni @MarianoRajoy ni un voluntarioso @ToniCanto lograban acercarse a los 10 temas del momento. A dos días del fin de la campaña, mordían el polvo en Twitter ante dos personajes tan dispares como Bertín Osborne y Josep Antoni Duran Lleida. Y no precisamente por voluntad propia.

El cantante y presentador debe ‘agradecerle’ a El Confidencial haber permanecido encaramado en las más altas posiciones de los temas más comentados por los tuiteros. En una entrevista realizada por Vanitatis para la sección ‘Se retratan’ sobre el 20-N, el bueno de Bertín tuvo un rapto de sinceridad y no se lo ocurrió tildar de otra cosa más que “gilipollez” el fenómeno del 15-M. Decía otras cosas, pero las redes sociales extractaron el exabrupto y en menos de lo que se envía un tuit, la etiqueta #BertínOsborne subía como la espuma.

Bajo el encabezamiento ‘Bertín Osborne cree que el 15-M es una gilipollez y una soplapollez’ cientos de internautas crucificaron al artista, animados además porque el diario Público se hizo eco en su web de la entrevista. La reacción de los ciberindignados, contestada por defensores del cantante, llevaron a Osborne a la cima del ‘trending topic’.

Sólo otra boutade del ‘moderado’ Duran Lleida, el que hace apenas 24 horas decía que en cuento pasen las elecciones volvería a ser el político más valorado, consiguió hacer sombra en materia electoral a la ‘soplapollez’ de Bertín. Duran, que nunca antes en campaña había aparecido por la lista de los 10 temas del momento, irrumpió ayer ‘gracias’ a unas declaraciones en las que se mostraba muy alarmado por que hubiera en Cataluña “cada vez más Mohameds y menos Jordis que no respetaran las peculiaridades de este país”.

La reacción en Twitter fue tal que durante varias horas hubo dos etiquetas metidas entre los temas del momento, una #Mohameds y otra, #Jordis, aunque al final los tuiteros se pusieron de acuerdo y se organizaron para criticar bajo la primera de ellas (y también defender) al político nacionalista.

El duodécimo día de campaña agonizó y por los más vistos de Twitter no apareció ni un tema promocionado por los principales candidatos. Ni siquiera @CarmeChacon2011 logró serlo con su desafío a Rubalcaba ni con su sentencia admonitoria, que más parecía amenaza, en alguno de sus mensajes del estilo “Ni un voto de una mujer para el PP”. Y es que, por mucho que las empresas se dediquen a analizar Twitter, los designios de los tuiteros son inescrutables.