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Aventuras y desventuras, sobre todo, de una coordinadora covid
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David del Cura

Entresijos y gallinejas

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Aventuras y desventuras, sobre todo, de una coordinadora covid

Una llamada a Salud Pública es una “lotería”. Depende de quien te atienda, te pone o no un aula en cuarentena

Foto: Un docente con sus alumnos en clase. (EFE/Ángel Medina G.)
Un docente con sus alumnos en clase. (EFE/Ángel Medina G.)

En esta pandemia el sector educativo ha sufrido repentinos cambios de guión. Cada vuelta al cole arrancaban como sospechosos, e incluso peligrosos, para después con esfuerzo y dedicación entrar en el colectivo de los “héroes”. Consiguieron ese sello de tranquilidad social como “lugares seguros”. Hasta que llegó ómicron y con ella el caos, la desgobernanza y la lotería vírica y administrativa.

La “coordinadora covid” de un colegio de línea 1 (una clase por curso) nos confiesa cómo el cambio de protocolo el 5 de enero ha descontrolado los procedimientos. Con el anterior, estos coordinadores podían tomar decisiones, adelantarse y parar la expansión del virus a tiempo. Con tablas de Excel, jornadas maratonianas y la existencia convertida en una centralita en todo momento. El esfuerzo daba resultados.

Foto: Algunos colegios no tienen servicio de enfermería. (EFE/Ángel Medina G.)

Con el cambio de protocolo las preocupaciones y las sospechas sobre su funcionamiento se han confirmado: “Ya no tenemos capacidad de anticiparnos. Salud Pública nos tiene que dar el visto bueno y cuando nos lo da ya es hora de entrar en el colegio”. La circunstancia más delirante y real es que en Salud Pública trabajan de ocho a tres y los niños se siguen contagiando en fin de semana, ¡criaturas!

Además, todo depende de quién te coja el teléfono cuando finalmente te lo cogen ¿qué pasa con tres positivos? Pues…. ejemplo práctico: “A mediados de la semana pasada teníamos un brote con tres alumnos y dos profesoras, no se cuarentenó el aula por no contabilizar a profesores y eso desencadenó, a los tres días, un brote de 10 alumnos y dos profesoras. Cuatro días más tarde, cerrábamos dos aulas más con cuatro alumnos positivos y una docente; los profesores sí contábamos esta vez… En cierto modo, es un alivio que contemos”.

placeholder Niños de primaria en el colegio. (EFE/ Jesús Diges)
Niños de primaria en el colegio. (EFE/ Jesús Diges)

"¿Qué hago con mi hija?"

La ruleta de las decisiones administrativas y la falta de criterio cerrado provoca situaciones que erosionan la relación del equipo docente con las familias. Este lunes, después de pasar a primera hora el informe diario recibieron la orden de poner en cuarentena tres clases minutos antes de abrir las puertas. Así que, junto a la valla del cole cuando padres, madres, abuelos, cuidadores o vecinos que llegaban con los niños, iban recibiendo la noticia: "Están en cuarentena, para casa, es la orden de Salud Pública". Se escuchó de todo en esos corrillos de indignación, desinformación y, "¿qué hago con mi hija?".

Ahora había que llamar a esas familias que consiguieron conciliar con fórceps para preparar el regreso

Los chats echaban humo y pestes, en minutos había que hacer planes para una semana sin clases. Siempre están los que se ponen nerviosos y pierden los papeles. Lo frustrante es que con perseverancia, cotejando alumno a alumno, sus circunstancias, su pauta, sus infecciones… tres horas después, los que habían pasado la enfermedad y otros cuantos podían volver a las aulas. Ahora había que llamar a esas familias que consiguieron conciliar con fórceps para preparar el regreso. Como la pandemia parece que ha gastado las sonrisas hubo quien regresó refunfuñando, son los de los papeles perdidos. Pocos pero incómodos.

Foto: Algunos directores han notificado 10 bajas de profesores. (EFE/Marcial Guillén)

Sumemos a estos episodios el impacto que cada brote tiene en el funcionamiento y en las relaciones entre todos los integrantes de la comunidad educativa. El control es milimétrico con un modelo de vigilancia de la RDA. Los coordinadores covid son los que primero reciben las notificaciones de positivo de alumno, familiar o persona con síntomas; hay que determinar sus contactos estrechos, si usan el comedor, con quién se han sentado; llevar al día las altas, las fechas de incorporación…"Lidiar con la frustración de ser siempre portadora de malas noticias". Cada tutor tiene que tener la información actualizada, los hermanos, las clases remotas; el comedor ajustar los menús, en secretaría readaptar las cuentas y por último hay que rellenar los informes de Salud Pública, llevar al día cada detalle porque… la coordinadora también puede enfermar.

¿Qué pasa cuando un profesor da positivo? No hay sustituciones ni el primer día “ni el séptimo”

¿Qué pasa cuando un profesor da positivo? La realidad es que no hay sustituciones el primer día “ni el séptimo”, no hay profesores. ¿Y a nivel pedagógico?, ¿cómo avanzamos?, ¿se mantendrán las pruebas de la Comunidad en mayo? Casi dos años después del inicio de esta pandemia se multiplican las preguntas sin respuesta y la fatiga hace mella en quienes han cumplido todas las indicaciones, incluso las cambiantes.

“Llegará un momento en el que todo esto explote y los profesores digamos que no podemos más”. Es la sentencia de una de tantas coordinadoras covid que este año ha tenido una de las vueltas al cole más duras. Los docentes y los equipos educativos siguen formando parte del equipo de los “héroes” lo recuerdo para algunos grupos de esos de “guasap”, para la administración y hasta para los sindicatos de la educación. Pero que no hace falta que les hagan osos y madroños de plástico pintados con pedestales de corchopán imitando granito. Basta con una sonrisa a la puerta del cole, buenos días y un "¿qué tal?".

En esta pandemia el sector educativo ha sufrido repentinos cambios de guión. Cada vuelta al cole arrancaban como sospechosos, e incluso peligrosos, para después con esfuerzo y dedicación entrar en el colectivo de los “héroes”. Consiguieron ese sello de tranquilidad social como “lugares seguros”. Hasta que llegó ómicron y con ella el caos, la desgobernanza y la lotería vírica y administrativa.

Vuelta al cole Pandemia
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