Cuatro príncipes para sustituir a Rouco

El tiempo es implacable. Todo lo puede, incluso en el caso de los príncipes de la Iglesia. El cardenal Antonio María Rouco Varela va a cumplir 76 años y dentro de un año y medio (febrero del 2014) tendrá que dejar la presidencia de la Conferencia Episcopal, si bien el arzobispado de Madrid es cosa exclusiva del Romano Pontífice.

El poder del cardenal gallego (Villalva, Lugo), que nació en el mismo pueblo que Manuel Fraga, nadie lo discute. Ha construido un círculo interior a su medida que no será fácil de desmontar, en opinión de la oposición interna, pero sobre todo, ha levantado un way of life religioso propio cuya seña básica es el conservadurismo. No se trata de un personaje carismático, ni al que adoren las cámaras de televisión, pero negar su enorme habilidad es un ejercicio estulto y fatuo.

Así, el Cardenal se prepara para su retiro en la verde Galicia. ¿Quién recibirá el testigo de Añastro, 1? Según fuentes de la Conferencia, estos son los nombres, a día de hoy, que pueden optar con alguna garantía al sillón de Su Eminencia: Carlos Osoro, obispo de Valencia; Juan José Asenjo, arzobispo de Sevilla; Francisco Pérez, obispo de Pamplona -todos ellos con matiz moderado y centrista-, y, finalmente, don Antonio Cañizares, amigo personal del Papa Ratzinger, exPrimado de España (Toledo), ministro en el Vaticano y últimamente contertulio y amparador de José Luis Rodríguez Zapatero.

¿Hace o no hace milagros la Iglesia?