Doce meses de Nacho sin Esperanza

La situación en 12 meses ha cambiado sustancialmente para Ignacio González al frente de la Comunidad de Madrid. Entonces todo a su alrededor era un mundo de conspiración e incertidumbre con gente interesada no en hacerle la cama sino en ponerle una cuerda en forma de dogal. Hoy ya nadie cuestiona en el Partido Popular -que era la madre del cordero- que González volverá a ser candidato a la espera del ticket que permita al centro/derecha conservar la capital y sus alrededores.

Hace un año lo único que cambió en el poder de la Comunidad es que a nivel de Boletín se oficializó lo que era una realidad porque en realidad González llevaba gobernando mucho tiempo. Pero tampoco resultaba (ni resulta) nada fácil sustituir a una mujer tan llamativamente mediática como Esperanza Aguirre y con tanta determinación en una serie de asuntos claves, si bien Nacho vino a heredar el macizo colaborador de la raza que él mismo había cooptado. Tal es el caso de Isabel Gallego, personal capital en el entorno de una y de otro.

Decía que 12 meses después en lo que supone el continente interno popular el presidente de la CAM ha dado la vuelta a su propia situación -como reconocen sus propios adversarios/enemigos y viceversa- y se ha asentado en el sillón de la Puerta del Sol con entidad propia. Eso sí, pendiente always de los bostezos de la otrora lideresa madrileña que tengo para mí que podría compartir ese ticket madrileño como única manera de mantener el hatillo.

Lo más difícil -tener impronta propia- va abriéndose paso 'magnis itineribus'y no hay que olvidar que todavía queda año y medio para corta la cinta. 12 meses en los que la antigua subordinada a título de consejera, María Dolores de Cospedal, ha tenido algo que decir en el tema NG.

Le falta pacificar los temas de Educación y Sanidad -asuntos que siempre estuvieron en poder de la izquierda- pero ha sabido mantener el tipo, al menos hasta el momento. Lo de los colegios públicos bilingües es algo tan de alabar -lo haga quien lo haga, pero lo hace Madrid- que hasta el pobre Barranco aplaude con las orejas.A falta de JJOO, González podría llevarse al coleto Eurovegas si es que los chicos de don Mariano -al final el pragmatismo termina por imponerse- se ponen el delantal porque tampoco estamos muy sobrados de primeras piedras.

Lo que heredó políticamente de Aguirre, una inequívoca idea de España, sigue inhiesta y la ha sabido conjugar con determinación y sentido práctico: es la comunidad que más crece. Punto.

Hace un año cuando tomó posesión en el viejo caserón de Sol la pregunta en los corrillos es cuánto tiempo duraría el muchacho. Hoy el interrogante es quién será su compañero(a) de viaje en el siempre difícil intento de conservar capital y comunidad para el Partido Popular.