La risita irónica de una rencorosilla Botella

Le debe hacer mucha gracia a la alcaldesa (digital) Ana Botella la ausencia de candidatos al sillón que calienta y que ganó por la salida de Gallardón.

Lleva muy mal que pasado el verano tuviera que anunciar su default ante la pésima opinión de los madrileños con su gestión, por un lado, y el nulo apoyo del partido a su causa. Fazmatella S.L. lleva muy mal el asunto y acusa a Esperanza Aguirre de haber segado la hierba bajo los pies a la última criatura política del aznarismo hasta el punto de haberle negadoel saludo ostentóreamente a la lideresa en la reciente convención nacional del PP.

Fazmatella S.L., una de las empresas familiares que mejores cuentas de resultados han arrojado durante los últimos años (¡Hacienda bien lo sabe!), se cachondea del vacío político existente entre los dos grandes partidos en Madrid. “Catarsis de cambio”, ha dicho la del café con leche. “Todos estamos iguales”.

Una de las cosas más inteligentes que ha hecho Botella –amén de velar por el bienestar de su prole con el ardor y entrega de una loba–ha sido no enfrentarse públicamente con su antigua compañera de promoción en la Complutense. Porque Aguirre le hubiera devorado de una simple dentellada.

Otra cosa es que bajo el mantel la ponga a escurrir.