Lo del Banco Madrid: ni una sola cabeza en la pica

A medida que pasa el tiempo vamos conociendo cosas verdaderamente sorprendentes en relación con Banco Madrid como esa noticia referida a la contratación de Baltasar Garzón a expensas de un multimillonario venezolano de cuyo nombre es mejor no acordarse y que escondía sus espurios millones de aquel país petrolero donde la gente se muere por los disparos de la Policía o de hambre.

Pues bien, mientras miles de honrados y modestos cuentacorrentistas continúan “atrapados” en BM, la Fiscalía continúa silbando y vaga. Saben, o deberían saber, igual que los jueces, que esa entidad era un nido de escualos. Deberían ser llamados a declarar, como mínimo, el que fue gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordoñez (MAFO) y que autorizó sin ningún tipo de prejuicio la compra del BM por un banco andorrano. ¿Exigió que nombraran presidente a José Pérez, que durante ocho años fue inspector jefe del Banco de España? ¿Fue el dedo de MAFO sustancial para que su consejera y directora general del Tesoro, Soledad Núñez, ocupara plaza de consejera en BM?

Están callados como muertos. Acojonados a ver si escampa. Mientras los clientes de buena fe y honrados, mirando a la luna de Valencia. Sorprende extraordinariamente, mucho más entre los más de cien mil “pillados”, que hasta el momento la justicia española no haya levantado el lápiz siquiera de oficio. ¿Qué pasa aquí? ¿Hay gato encerrado? Hay algo más que sospechas. Lo que sabemos a ciencia cierta es que en una entidad financiera española presidida por el que fuera jefe de inspección del BDE se blanqueaba dinero, llegaban enormes cantidades de dólares y euros de los lugares más infectos del mundo y ese presidente –ya sabemos que el consejero delegado era el que decidía pero eso no obvia en absoluto la responsabilidad de Pérez, Núñez y el resto de los consejeros- no se enteraba de nada. Es decir, igual que Griñán o Chávez… ¡Carajo!

No parece, al decir de los expertos, que el actual jefe del Banco de España, Luis María Linde, se esté demostrando más diligente que el nefasto MAFO. Ello viene a confirmar que los opositores, incluso los número uno, no significa otra cosa que son empollones pero que de ello no puede colegirse mayor cosa.

Si Linde no es capaz de excitar el celo de la Fiscalía en un asunto tan claro, a lo peor hay que pensar en proponer una rebelión fiscal. De impuestos quiero decir.