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¿Quién aspira a llenar el hueco de Alierta?
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Graciano Palomo

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¿Quién aspira a llenar el hueco de Alierta?

Una vez que el aragonés se ha retirado de Telefónica, todas las miradas del poder del IBEX se dirigen hacia un catalán que pasa por ser su sucesor natural

Foto: Isidro Fainé y César Alierta en una Junta de Accionistas de Telefónica. (EFE)
Isidro Fainé y César Alierta en una Junta de Accionistas de Telefónica. (EFE)

Tras la muerte de Emilio Botín, el banquero que fue políticamente un hombre para todas las estaciones y que resultó, incluso, el principal consejero del inane Rodríguez Zapatero, César Alierta tomó el mando de lo que genéricamente se conoce como el 'poder del IBEX', al que invoca constantemente Pablo Iglesias, y en ocasiones acierta.

El maño emuló a su gran rey Fernando, el icono de Nicolás de Maquiavelo en su inmortal 'Príncipe', y arbitró con habilidad y tino una situación harto delicada aquí y acullá aprovechando la fortaleza de la primera transnacional española. Ahora, con el aragonés en la desenfilada a petición propia el poder económico tiene que elegir un líder que les represente ante Merkel -si es que la canciller continúa ordenando la Puerta de Brandeburgo- con la potencia que la internacionalización del IBEX requiere.

El nuevo presidente tiene retos importantes encima de la mesa de Las Tablas. Suenan rumores fuertes en el sentido de que, a la marcha voluntaria de César, podrían seguirla otras. Fuera, a la intemperie, está el presidente de Unedisa, Antonio Fernández-Galiano, y rumorean también que Luis Enríquez se encuentra en 'stand by'. Cosas que se dicen…Ambos tienen una acreditada vitola como gestores en medios.

Alierta siempre se apoyó y tuvo su aval en Isidro Fainé y este en Jaume Giró, un artista impagable en la conjugación de los verbos, a la hora de leer los espacios y sentarse en las intersecciones. Es el hombre de la sucesión natural en estos complicados momentos donde solo existen tres elementos claves de subsistencia nacional: la jefatura del Estado, el mantenimiento del 'statu quo' europeo y la recuperación económica.

Fainé cuenta en esta enrevesada coyuntura con el factor catalán pero de vuelo tridimensional. No creo que exija a nadie que para trabajar en Caixabank tenga que firmar una cláusula 'Neymar style'; hoy el mundo se ha quedado tan pequeño que los vuelos gallináceos sólo sirven para alimentar la satrapía pueblerina.

Recuerdo que hace unos años, conversando con el muy avispado e inteligente David Madí, el hombre que quiso hacer de Artur Mas el “Kennedy catalán”, le advertí de que solo aplicando el 'método Blair' podrían mandar legítimamente los catalanes en España y ser influyentes en Europa y el resto del mundo.

Ese método lo viene aplicando con precisión física Isidro Fainé. El sucesor natural.

Tras la muerte de Emilio Botín, el banquero que fue políticamente un hombre para todas las estaciones y que resultó, incluso, el principal consejero del inane Rodríguez Zapatero, César Alierta tomó el mando de lo que genéricamente se conoce como el 'poder del IBEX', al que invoca constantemente Pablo Iglesias, y en ocasiones acierta.

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