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¡Eran tigres de papel!
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Graciano Palomo

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¡Eran tigres de papel!

Si el Estado hiciera sus deberes, en unos años esas generaciones de independentistas verían con gran claridad que el mundo del siglo XXI no se parece en nada al que les presentó el clan Pujol

Foto: Concentración en la plaza de Sant Jaume por la liberación de los líderes independentistas presos. (EFE)
Concentración en la plaza de Sant Jaume por la liberación de los líderes independentistas presos. (EFE)

La cárcel debe ser muy dura. Porque creíamos que 'los Jordis', Forcadell, Junqueras y Forn, personajes señeros del intento de golpe de Estado, eran émulos del escocés William Wallace de 'Braveheart' y resulta que nos han resultado unos meros tigres de papel.

Han causado un mal extraordinario a todos los españoles —especialmente a los catalanes—, se conducían como auténticos sátrapas cuando gozaban de todas las prebendas en el poder autónomo catalán, amparados por el Govern de Mas y Puigdemont, se han reído y aún despreciado al conjunto de los españoles y ahora vienen piando como corderitos pidiendo perdón y retractándose de sus presuntos delitos.

Con los 'indepes' de salón y caviar ocurre lo mismo que con las gentes que se autotitulan de izquierda y no pagan la seguridad social a la asistenta

¡Si yo fuera independentista catalán estaría avergonzado de tales sujetos! El otro anda huido, gastándose el dinero que no es suyo y haciendo el ridículo más espantoso que conocerse pueda. Si estás tan seguro de ti mismo y del pueblo que dices te protege da la cara y navega por aguas limpias.

Con los independentistas de salón y caviar ocurre lo mismo que con las gentes que se autotitulan de izquierda y luego no pagan la seguridad social a la asistenta y le dan un sobre en negro por las horas trabajadas. Lo importante no es lo que pregonan, no. Es lo que hacen, cómo viven y cómo se conducen personalmente. Falsos progresistas; aún más falsos independentistas. No creen en Cataluña como patria. ¡Qué va! Creen en ellos y sus pecunios.

Si el Estado hiciera sus deberes estoy convencido de que en unos años esas generaciones de independentistas amamantados en las tetas del presupuesto verían en lontananza y con gran claridad que el mundo del siglo XXI no se parece en nada al que les presentó el clan Pujol hace más de cuatro extensas décadas.

La cárcel debe ser muy dura. Porque creíamos que 'los Jordis', Forcadell, Junqueras y Forn, personajes señeros del intento de golpe de Estado, eran émulos del escocés William Wallace de 'Braveheart' y resulta que nos han resultado unos meros tigres de papel.

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