Palo Alto
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Esa 'izquierdona viejuna'
Sí, señor Méndez de Vigo, hay mucho "viejo" por estos lares. Y una de las justezas históricas en su labor sería, desde el liberalismo con tintes sociales, quitarles el pelo de la dehesa
Al ministro Íñigo Méndez de Vigo le vino la Moreneta a ver en forma de esa senadora separatista, tan prepotente como chula (sin causa), que dice llamarse Mirella Cortés, en su casa a las horas de comer.
Digo que le vino Dios a ver porque al socaire de una gilipollez (que varios ministros canten el "Novio de la Muerte" en un desfile de Semana Santa) le permitió darle un repaso ideológico en toda regla a una independentista que va de moderna cuando en realidad se trata de posiciones medievales/feudales.
🎥 Mendez de Vigo responde a la Senadora Mirella Cortés de .@Esquerra_ERC sobre cantar "El novio de la muerte" en la procesión del Cristo de la Buena Muerte en Málaga 🎤 pic.twitter.com/h6nPdNv6dG
— Fernando Jou Rivera (@FJouRivera) 10 de abril de 2018
"Usted me dice lo que puedo hacer o no hacer; cantar o no cantar…, ¿qué problemas tienen ustedes con la libertad? ¡No me sea usted vieja…! El ministro de Educación, por una vez, se quitó el complejo de encima y propinó una manita de obleas 'xacobeas' muy propias ante un carcamal ideológico que, encima, se cree en superioridad moral.
Es cierto que una golondrina no hace verano pero sobre ese predio 'viejuno' y demodé revolotean muchos pájaros. No han hecho otra cosa en su vida (periodistas incluidos) que repartir eslóganes fracasados y han terminado por poner escuela como aquel maestro ciruela.
Por no enterarse ni siquiera se han enterado de que hace casi 30 años que cayó el Muro de Berlín. Fue derrumbado por la piqueta del pueblo llano para combatir una tiranía terrible, hambrienta y andrajosa.
Sí, señor Méndez de Vigo, hay mucho "viejo" por estos lares. Y una de las justezas históricas en su labor sería, desde el liberalismo con tintes sociales, quitarles el pelo de la dehesa. Hace décadas Francisco Umbral les describió como la "izquierdona casposa". Siguen con la caspa.
Al ministro Íñigo Méndez de Vigo le vino la Moreneta a ver en forma de esa senadora separatista, tan prepotente como chula (sin causa), que dice llamarse Mirella Cortés, en su casa a las horas de comer.