Cataluña, año 2030

Un profundo conocedor de Cataluña, del alma catalana, Jaume Giró, persona templada donde las haya, me adentra unos lustros en el corazón mismo de aquella tierra.

Parte de un hecho al parecer incuestionable. Al día de hoy, de cada cuatro jóvenes catalanes, entre 16 y 20 años, dos votan a partidos secesionistas (PDeCAT, ERC); uno a la CUP y otro a partidos constitucionalistas. La cosa tiene su aquel.

Tendrá que defenderse con las armas legales y civilizadas con las que cuenta, pero el problema no se arregla en Estremera, ni en Alcalá Meco

Parece claro que, dada la situación, el Estado no puede aflojar el dogal de aquellos que le han puesto en un brete, esto es, que tendrá que defenderse con las armas legales y civilizadas con las que cuenta, pero el problema no se arregla en Estremera, ni en Alcalá Meco, ni siquiera en Soto del Real. Esto es, aplicar la ley a quien delinque, sin olvidar nunca la Constitución.

Escrito lo anterior, habrá que concluir con alguna justeza que, además de lo dicho, habrá que hacer algo. Una porción importante (demostrado) de ciudadanos catalanes no pueden seguir viendo al resto de España como enemigos. Se necesitan "gestos" amables que no soy capaz de articular ahora mismo. Pero algo…

Soy de los que piensan que una nación, antes que nada, es la voluntad de vivir juntos.