España se queda a oscuras

Lo importante para el tándem Sánchez/Calvo es abrillantar la momia del dictador. Que un tal y sospechoso Íñigo Alfonso –sueldazo, buen trato y cargazo con el PP- sustituya en RNE a Alfredo Menéndez, profesional donde los haya; que estulticias varias y egos diversos tengan que ver con la subida subir los impuestos, bla, bla, bla.

Lo sustancial es aburrido y encima exige talento y trabajo. ¡Demasiado!

Mire, señor presidente, ya sé que estos datos le suenan a chino pero en los últimos años el 13 por ciento de la población española se ubica en el 1,76 por ciento de los más de 8.000 municipios.

Lo que sí que es urgente es evitar el ya desierto geográfico que nos inunda, impedir que el parámo sin habitantes acabe por ahogar a la nación

En lugar de andar tirando el dinero (que no es suyo) en bagatelas, cargazos a familiares y amigos, deudos y dadivosos, debería ponerse a trabajar en asuntos de la máxima urgencia –esto sí que es “urgente”- de cómo evitar el ya desierto geográfico que nos inunda, impedir que el parámo sin habitantes acabe por ahogar a la nación.

Cómo impedir el final del mundo rural frente al urbano. Como ha escrito un experto en el asunto “si se transita por algún pueblo de las dos Castillas, Aragón, Extremadura, puede cruzarse de punta a punta sin ni siquiera despertarse los perros. Lo ha escrito con conocimiento y argumento Sergio del Molino en la 'España vacía'. Ese desierto demográfico es ya un hecho en 22 de las 50 provincias que componen el Estado. Añado: entre esas 22 hay 14 en las que más del 80 por ciento de sus municipios están en riesgo de extinción. Soria en la memoria. El 94 de sus municipios pueden desaparecer ipso facto.

Pero esto al Gobierno no le importa. Es más fácil conspirar para mantenerse en reservados de restaurantes de lujo que pagan con pólvora del rey.